XXV
932
Después de muy pocos dias,
Tal vez por no dar espera
Y que alguno no se juera,
Hicieron citar la gente,
Pa riunir un contingente
Y mandar a la frontera.
933
Se puso arisco el gauchaje:
La gente está acobardada;
Salió la partida armada
Y trujo como perdices
Unos cuantos infelices
Que entraron en la voltiada.
934
Decía el ñato con soberbia:
!Esta es una gente indina;
Yo los rodié a la sordina:
No pudieron escapar;
Y llevaba orden de arriar
Todito lo que camina."
935
Cuando vino el Comendante
Dijeron: "!Dios nos asista!"
Llegó les clavó la vista
(Yo estaba haciendome el zonzo);
Le echó a cada uno un responso
Y ya lo plantó en la lista.
936
"!Cuadráte!", le dijo a un negro.
"Te estás haciendo el chiquito,
Cuando sos el más maldito
Que se encuentra en todo el pago.
Un servicio es el que te hago,
Y por eso te remito."
A OTRO
937
"Vos no cuidás tu familia
Ni le das los menesteres;
Visitás otras mujeres,
Y es preciso, calavera,
Que aprendás en la frontera
A cumplir con tus deberes."
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La vuelta de Martin Fierro
ClassicsSegunda parte de "Martin Fierro" por Jose Hernandez...