A veces te quiero. (Editando)

CAPÍTULO 19

Odio este día, odio todos los diez de abril de todos y cada uno de los años. Tendría que encantarme, ya que son dieciocho, pero no me gusta mi cumpleaños.

Me levanto y con tranquilidad voy hacia la ducha, me visto y salgo a desayunar. Al abrir la puerta me encuentro con una caja de cartón en el suelo, está envuelta. La agarro y la llevo hasta la cocina.

Mi padre está con Patricia, los dos sentados en la isla de la cocina.

-Buenos días cumpleañera. -dice mi padre.

-Eh...buenos días.

Estoy bastante sorprendida con su comportamiento, pero me alegro de que esté así.

-Ábrelo venga.

La caja contiene varios regalos envueltos en papel rosa, los voy abriendo uno a uno. El primero es un par de botas negras de media caña, otro es un jersey gris con un lazo negro a la espalda y el último es un libro de autoescuela y un sobre con diez prácticas de conducir.

-¿Me has pagado el carné de conducir? Me muero, muchísimas gracias.

Una sonrisa se asoma por el rostro de mi padre y Patricia le acaricia la espalda.

(-)

-Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz.

Marcos lleva todo el recreo cantando esa canción, la voy a acabar odiando, y no para de tirar confeti.

-Te quiero mucho pero a veces te mataría -digo entre risas.

-¿No vas a hacer nada por tu cumple? Venga, es viernes, tienes mucha suerte de poder celebrarlo el mismo día.

No puedo evitar reírme ante lo que acaba de decir.

-No, no voy a hacer nada.

Soy la primera en llegar a la siguiente clase, me siento en mi silla a esperar a los demás.

-No nos has dicho que era tu cumple pero...

Cinthia, la delegada, está en el umbral de la puerta junto con varios compañeros de clase, lleva una bandeja con varios pastelitos. Cantan cumpleaños feliz mientras caminan hacia mí.

-Aunque casi no hables y casi no se note que estás en clase, nos acordamos de ti -dice mientras lleva hacia mí la bandeja.

(-)

Llego a casa y lo primero que hago es dejar la mochila en el salón e ir corriendo a la cocina a comer, ya que hoy me muero de hambre y la tortilla de patata huele de maravilla.

Cuando termino voy hacia mi habitación y me sorprendo cuando veo que está llena de globos rosas y plateados y hay una caja enorme encima de mi cama.

Bajo a toda velocidad las escaleras y me cruzo con Patricia por el pasillo.

-¿Tú tienes algo que ver con todo lo que hay montado en mi habitación?

Niega con la cabeza.

-¿Y mi padre?

-Tampoco.

Abro la caja y un globo plateado me golpea la cara cuando es liberado, tiene una especie de pie y lo apoyo en el suelo. Pintado con purpurina muestra un 18.

Sigo mirando en el interior y saco una falda corta de vuelo, de tiro alto y azul, también un crop top de tiras del mismo color. Unos tacones azul eléctrico bastante brillantes también estaban dentro. Llevo las manos a la boca y comienzo a saltar, me encanta todo.

Un sobre está pegado en la parte interna de la tapa, lo cojo y lo abro.

Ponte guapa, a las nueve en punto te voy a buscar. Alan.
PD: FELIZ CUMPLEAÑOS