capitulo 4

3.2K 221 15
                                    

Mi respiración es agitada ya que me encuentro corriendo para alcanzar a llegar a la tienda donde venden frutas para comprar unas cuantas fresas. Tengo que comprarlas para hacer un pastel, para mí. ¿Porque precisamente a las siete de la noche se me antoja comer pastel con fresas? Ni yo misma lo sé, me encontraba sola en el apartamento (como siempre) sentada en el sofá viendo unas cuantas recetas en la televisión de pasteles y vi unas fresas...pero sin decirles mentiras se veían tan deliciosas. Anote la receta, la cual me pareció muy fácil.

Gracias a dios la tienda se encuentra abierta. Entro saludo a Anna una chica de unos dieciséis años por lo que he hablado con ella, esa es su edad.

-¿fresas?-me pregunta Anna mientras arregla unas cosas en los estantes. Ella es alta morena ojos azules muy claros y súper linda de cara ,al igual,como persona. La he invitado a mi casa en varias ocasiones, pero siempre me dice que está muy ocupada lo cual me consta ya que es una chica que se preocupa mucho por sus estudios, aparte es una chica cariñosa y tranquila.

-me ofendes-me toco el pecho. Mientras ella me mira con una ceja alzada detrás de sus lentes-¿no puedo venir a visitar a mi amiga?-sigo con mi mano en el pecho. De ella sale una risa muy tierna.

-te conozco-me apunta con sus largos dedos y rio-¿las quieres frescas?-iba a responder cuando vuelve a hablar-claro que si las quieres las frescas-asiento y rio.

Suelto una carcajada a ver lo que dice en la parte trasera de su camisa blanca "no me violen. Tengo sida y no hay cura" esta chica y sus camisas. Busca rápidamente las fresas mientras veo un cuadro de un paisaje con pastizales, un árbol a la izquierda y una niña sentada de espalda al árbol.

-muy linda, pero tenebroso-dicen y doy un salto hacia atrás. Anna se encuentra detrás de mí y se está riendo. Se dirige a la caja y yo detrás de ella mirando su camisa con el seño fruncido.

-mi madre me obligo a usarla-ríe y yo asiento mientras ella coloca las fresas dentro de una bolsa-dice que haci puedo evitar que me violen-esta vez no me controlo y suelto una carcajada.

-yo creo que invitara a los vagabundos a violarte-se ríe mientras me pasa la bolsa-ya que tienen sida no perderán nada-le pago-pero dile que me consiga una-le giño un ojo, mientras le doy un beso en la mejilla-hasta pronto An-me sapero de ella y camino hacia la puerta.

-hasta que se te acaben las fresas Ali-rio negando con mi cabeza, mientras salgo y el frio aire de la noche choca con mi cara.

Después del beso que me dio Asdrúbal, el cual fue el mejor beso de mi vida, Me llevo a mi apartamento y me dijo que no volviera a ir por esos lugares, para que según él, estuviera más tranquilo me dio su número de teléfono y que si estaba en algún aprieto haci fuera a cualquier hora lo llamase que él estaría conmigo en menos de diez minutos como mínimo.

Estoy caminando por la calle, la cual está alumbrada por focos de luz. A lo lejos veo un local el cual desde donde estoy parece un gimnasio, no salgo mucho de noche haci que nunca lo he visto abierto ya que parece que solo es de horario nocturno. Lo he visto de día, pero nunca está abierto así que debe ser exclusivamente nocturno. Miro de reojo mi reloj de muñeca y ya son casi las nueve. Sigo caminando hasta que mi móvil vibra, lo saco del bolsillo trasero de mi jean y veo que en la pantalla aparece el nombre de "Rustam". Contesto e inmediatamente me hablan.

-hola Ali-su tono es de alegría. Ya solucionamos todo eso de la chica con voz chillona y su mentira, ya que bueno no me puedo pelear con mi amigo porque es mi único verdadero amigo en este país y ¿qué haría sin él? Quedaría más sola que un perro callejero y no puedo permitir que nuestra amistad acabe, solo porque no me dijo que iría a follar con una chica. Él tiene su vida personal y debo de comprender que no puede estar pegado a mí como siamés-¿cómo ha estado la amiga mas buena del mundo?-de por sí ya es bastante cariñoso y después de que arreglamos "el problema" ha estado peor.

Vendido Al DiabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora