Mi Corazón en Palabras

16. Allison

—A mí también me gusta leer, pero algo un poco más científico, después de todo, estudio biología, así que es lo más adecuado.

Me reí del comentario y de la sonrisa coqueta que destelló después en la muy bonita cara de Santiago. Realmente no era como me lo esperé, porque bueno siendo amigo de Mike... Era realmente agradable e inmensamente guapo, alto, cabello castaño, ojos color avellana. Pero por muy guapo que sea, lo más que podríamos llegar a ser es amigos, no había atracción, al menos de mi parte, ya que seguía disparándome esa sonrisa coqueta, que no se si era por mi o así era su sonrisa normal.

Estaba en su último año de universidad, tenía 23 años y estaba soltero, esas fueron las primeras tres cosas que me dijo luego de que fuimos presentados.

La cita de Alice, Ryan, era guapo también, cabello negro, estatura media (un poco más bajo que ella en tacones), ojos marrones. Se veía bastante nervioso por al menos los primeros 20 minutos, pero luego la extravagancia de mi amiga lo hizo relajarse, aunque seguía viéndose un poco tímido.

—Bueno, pues yo estudio literatura así que lo que leo es totalmente adecuado. Además... —me interrumpí abruptamente porque un poco más allá de la pequeña pista de baile que estaba al costado derecho de nuestra mesa, se encontraba una pareja peleando. Ella parecía a punto de llorar y el como si quisiera golpearla hasta el cansancio, daba bastante miedo. Un sonido estrangulado salió de mi garganta cuando me di cuenta por qué habían llamado mi atención. Eran Melanie y Mike.

—Oye preciosa, ¿estás bien? Te ves un poco pálida.

Ignoré totalmente a Santiago y me puse rápidamente de pies, iba a dirigirme hacia la dirección en la que estaban, cuando vi como la tomaba del brazo bastante fuerte y prácticamente la arrastraba a lo que parecía ser una puerta trasera. Salte cuando sentí una mano envolverse alrededor de mi muñeca izquierda.

—Oh Dios mío, ¿Qué te pasó? ¿Fue un accidente?

A diferencia de cuando Johan me pregunto, no sentí la necesidad de contarle la historia completa, simplemente no teníamos el mismo tipo de conexión.

—Algo así —dije evasivamente—Tengo que ir un momento al baño, ya regreso.

Le dirigí una sonrisa tensa y prácticamente corrí hacia el lugar por el que había desaparecido Mel. Casi había llegado a la puerta cuando esta se abrió y apareció Mike, al verme se puso rígido pero trato de disimularlo y pasó junto a mí ignorándome totalmente. Justo detrás de él aparecía mi hermana que parecía haber estado llorando y se veía bastante nerviosa.

Me acerque rápidamente a ella.

— ¿Estás bien? ¿Por qué estaban peleando ustedes dos?

—Claro que estoy bien y no estábamos peleando, simplemente tuvimos un desacuerdo —dijo con un leve temblor en la voz seguida de la sonrisa más falsa que había visto en ella jamás.

— ¡Melanie Brigitte Pride! No me mientas, te conozco lo suficiente como para saber que no estás bien y que tu encantador novio se veía bastante violento.

Me quede totalmente estupefacta cuando me dirigió una mirada de la que nunca antes había sido el blanco. Irritación, fastidio.

—Simplemente estas siendo paranoica. Mike sólo estaba un poco molesto, pero está mejor ahora, además yo estoy perfectamente bien, no todos después de que tenemos una discusión sentimos la necesidad de cortarnos las venas.

Juro que sentí como si me hubiese apuñalado en el corazón y un par de lágrimas salieron antes de que pudiese detenerlas. En cuanto se dio cuenta de lo que había dicho una mirada de horror cruzó por sus ojos azules.

—Fresita...

Me lastimó aún más que me llamara por el nombre cariñoso que me había dado por mi loco amor a las fresas.

No me quede a escuchar lo que iba a decir. Salí por la puerta que ella acababa de entrar y corrí lo más rápido que pude, sólo Dios sabe dónde.

Me detuve cuando oí que gritaban mi nombre y no era Mel. Era Santiago.

— ¿Qué pasó? Tu hermana estaba un poco histérica allá dentr... ¿Por qué lloras? ¿Te lastimaste? —colocó sus manos en mis mejillas y limpio con sus pulgares el rastro de lágrimas.

—Estoy bien —dije entrecortadamente —Sólo fue algo sin importancia.

—No me parece que sea algo sin importancia, cuando tu hermana parecía a punto de tener un colapso nervioso y en tu mirada puedo ver que estas herida.

—Solo quiero irme a casa, ¿me puedes llevar?

Me miró en silencio durante unos cuantos segundos, luego suspiro y me dio un pequeño beso en la frente.

—Lo que quieras preciosa, pero con una condición.

Le di una mirada recelosa, por la que él se rio y volvió a besar mi frente.

—No es nada malo. Caray, ten un poco de fe en mí. Quiero tener otra cita contigo, solos tú y yo.

No sé por qué por una fracción de segundo cuando lo estaba considerando pensé en Johan...

—Está bien, acepto —estuve de acuerdo mientras sonreí débilmente.

El sonrió ampliamente y me señalo la dirección en la que estaba estacionado su auto.

Acepté porque realmente quería ir a casa luego de haber sido herida horriblemente por mi hermana, pero también porque me había caído muy bien. Pero eso si me aseguraría de dejar claro, que sólo saldríamos como amigos, nada más.

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¡Hola mis pequeños saltamontes!

Como pueden notar hoy estoy generosa así que aprovechen su 2x1

Díganme que les gusto y que no. Siempre espero sus hermosos comentarios con mucha ilusión :)

¿Por qué creen que Melanie le habló de esa manera a nuestra querida Ally? Hagan sus apuestas y déjenla en los comentarios.

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Comentar es totalmente gratis. ;)

Besitos llenos de amor y de labial sabor a fresa <3