(....)
Al día siguiente Caitlin y yo nos pasamos el día en mi casa , sin hacer nada, viendo la tele y arrasando con la nevera.
Son las ocho de la noche , me dirijo al salón , tengo una cosa preparada para Caitlin y la veo tumbada en el sofá durmiendo. Sonrío, me encanta verla así, tan niña, tan vulnerable , tan tierna. Me acerco sigilosamente a ella y me agacho hasta quedarme a su altura.
-Bella-susurro acariciando su cabeza con mis dedos.
Suelta un leve gemido mientras se remueve en el sofá.
-Despierta dormilona-deposito suaves besos en su rostro para despertarla.
Ella abre los ojos y me mira haciendo un pequeño puchero con su boca.
-Quiero llevarte a un sitio.
-¿A donde?-se incorpora quedándose apoyada en su codo.
-Ponte la chaqueta-muestro una pequeña sonrisa y me pongo de pie.
Caitlin inclina su cabeza y me mira extrañada.
-No me mires así, ¿no te fías de mí?-levanto una ceja.
-¿Enserio tengo que responder a eso?-ríe.
-Te va a gustar-me acerco a ella, me inclino y la beso.
Ella coge mi cara con una de sus manos y sigue besándome mientras acaricia mi barba. Cojo su mano y tiro de ella levantándola del sofá.
Nos ponemos las chaquetas y salimos de casa. Entrelazo su mano con la mía y andamos calle abajo en dirección de la playa.
-¿A donde vamos?-me mira ella curiosa.
-Ya verás-sonrío.
-Odio las sorpresas y lo sabes-resopla.
-Las mías no-la miro.
-Las tuyas más-se muerde el labio.
-Te vuelvo a repetir que nunca he hecho algo que no te guste-acaricio su cara sin parar de andar-Así que relájate.
Cailtin suspira y no reprocha más. Llegamos a la playa. Aún no se ha escondido el sol, el atardecer es precioso , perfecto para esta ocasión.
-Quítate los zapatos-le ordeno.
Ella se los quita y los coge con sus manos.
-¿Y ahora qué?-me mira.
Sonrío y la cojo en volandas , ella pega un pequeño chillido y se agarra a mi cuello.
-¿Que haces?-susurra entre risas.
-Ser un caballero-sonrío mientras ando por encima de la arena.
-Sabes que se andar,¿no?-me mira divertida.
-Sí, lo se pero me gusta cogerte-la miro.
Caitlin sonríe de nuevo y entorna su cabeza hacia delante.
(.....)
Álvaro anda hacia un acantilado y llegamos a una zona de la playa donde la gente no suele estar. Mi mirada se fija en unas mantas que hay colocadas en la arena con unas pequeñas velas rojas alrededor.
-¿Y..y esto?-le miro asombrada.
-Me apetecía estar un rato a solas contigo de esta manera, un día te dije que me encantaba mirar anochecer y hoy quería hacerlo contigo-me baja al suelo.
El contacto de mis pies la la fresca arena me relaja . Dejo mis zapatos en el suelo , ando unos pasos hacia aquellas toallas y las observo mientras frunzo mis labios y creo una sonrisa.
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I CAN ONLY GIVE U SEX
RomansaEl sexo puede ser mortal si por culpa de el acabas completamente e irrevocablemente enamorado.