Maratón 1/2
Shawn
Iba a asesinarlos, lenta y dolorosamente, había perdido la clase de inglés ¡La clase de inglés! ¿sabes que es eso? no, no lo saben, mi día se arruino.
*El no verle el trasero y las piernas a esa maestra por la mañana no es exactamente "arruinarse" el día*
¿Siempre tienes que ser tan aguafiestas?
*Exactamente*
-¡Shawn!- se escuchó la voz de Max. me volví a él y lo miré de mala gana.
-Ni me dirijas la palabra, me perdí la clase de inglés, por su culpa.
*infantil*
-Pero tú nos dijiste que nos adelantáramos.
-¿Yo dije qué?
-¿Ahora no tienes memoria? ¿A ti qué te pasa ultimamente?
-Yo jamás dije eso- defendí caminando a la cafetería.
-Sí que lo hiciste- se burló.
-Max- Lo llamé, sin saber exactamente el por qué y qué era lo que iba a salir de mi boca.
-¿Sí?
-Te parecerá tonto, lo sé- comencé, mientras me rascaba la nuca con nerviosismo, no sabía por qué lo hacia realmente- ¿cómo le hablas a una mujer?
-Con... la boca- bromeó.
-Si serás idiota; no, cómo te diriges a ella.
Él soltó una gran carcajada.
-¿Tú? Shawn Mendes pidiéndome consejos de cómo hablarle a una mujer, esto sí que será historia- expresó gracioso.
-Es... joder, ella es... diferente.
-¿Diferente? . ¿quién es ella?
-No puedo decirlo- respondí más nervioso; en ese momento pasaron frente a nosotros las porristas, bendito sea, quién sera que este allá arriba.
*Estúpido*
Déjame disfrutar la vista.
*Hay otra linda vista para allá*
Voltee hacia mi derecha y ahí estaba: Zoe caminando en nuestra dirección y seguramente mirando como Max y yo observábamos a las porristas.
*Genial, cabeza de chorlito, así la conseguirás pronto*
No ayudas Cuchirrión.
*No pensaba hacerlo*
Deje de observar a las porristas y jale a Max de nuevo hacia la cafetería.
-¡Hey!, ¿que acabas de hacer?- se quejó con molestia.
-Tengo hambre.
-Yo también- respondió frotando sus manos; sé que esas dos palabras eran en doble sentido.
*Ves, esos son tus amigos, siéntete orgulloso*
-¡Shawn!- me llamó Ariana, acercándose rápidamente hacia mí.
-Hola prima- la saludé.
-Ahí está, tienes una oportunidad- susurró cerca de mi oído apuntando con la vista a Zoe quién hacía fila para pedir su desayuno.
-Pero...- traté de oponerme, pero no me dejo terminar cuando ya estaba al lado de Zoe. Ella me había empujado.
-Ho-ho-hola- tartamudeé con nerviosismo, mirándola cómo pedía su comida a la encargada desde la barra.
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¿Apostamos? »s.m
Fanfiction-Esto sera sencillo. Y después descubrirás por ti misma primita, que un hombre como yo no cambia, hombres como yo no nos fijamos en ese tipo de chicas. -No estés tan seguro. ¿No es lo mismo apostar con la virginidad que con el corazón? ¿Cierto? Po...