Capítulo 15.

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Dedicado a: @Marano_Lynch

Ross Lynch:

Esto es una jodida tentación, ______ y yo estamos solos en casa, y ella está adentro de la ducha, bañándose...
Ese delicioso cuerpo completamente desnudo.

Tragó saliva y me acercó a la puerta.
¿Y si entro?
______ me mataría.

Aún sigue molesta conmigo, debido a que luego de que "escapáramos" de la escuela para que ella pudiera cambiarse, cada uno vino a casa en su propio coche a pesar que le dije que fuera en el mío.

Mi mano toca la perilla del baño, y la giro con cuidado de no hacer mucho ruido, asomo mi cabeza.
Deslumbrándome con la vista que tengo.

La cortina transparente me deja ver sus redondos y blancos senos, no son muy grandes pero tampoco son muy chicos. Son perfectos, y estoy casi seguro de que caben perfectamente en mis manos.

Una vez más imagino a lo que sabrían en mi boca.

Su trasero bien colocado, provocativo, es del tamaño perfecto, al igual que sus senos, no es muy grande ni pequeño.

Me lamo los labios y contemplo como echa shampoo en una de sus manos y lo frota por su cabeza. Mhn...

Me gustaría estar allí.
Penetrarla, hacerla gozar.

Suspiro silenciosamente.
Sigo mirándola mientras mi mente comienza a imaginar.

______ desnuda sobre mí... autopenetrándose mientras jadea y gime mi nombre, le como los labios ferozmente mientras siento como empieza a moverse sobre mí.

La deseo, realmente la quiero de todas las formas o posiciones que podrían existir en una cama.

Trago saliva.
¿Se dará cuenta que estoy mirándola si me masturbo aquí? Seguramente sí.

Algo llama mi atención, en una de sus muñecas veo un gran corte color maso menos rojo. ¿Qué?

Entrecierro mis ojos para poder ver bien pero no veo nada con claridad, solo veo un par de líneas en sus muñecas.

¿Cómo es que no las he visto antes?
Nunca las he visto...
Seguramente usa maquillaje para cubrirlas, como hace Rydel cuando tiene un barrito o un pequeño corte que se hace cuando se depila los brazos.

Frunzo el ceño y me obligo a cerrar la puerta del baño antes de que ______ se de cuenta que estoy mirándola como un maldito acosador.

Mi erección duele.
Entro a mi habitación rápidamente, me bajo los jeans junto a los bóxers y comienzo a masturbarme.

Pero no puedo concentrarme muy bien debido a lo que ______ tenía en las muñecas... Acaso...

¿Se cortará?

•••

Termino de comer el último bocado de pizza, voy a la cocina, y lavo mi plato, aunque realmente nunca lo he hecho.

______ me mira extrañada y luego sigue concentrándose en limpiar la alacena.

No la he visto comer últimamente, además, la veo mucho más delgada que cuando la conocí.

Observo sus muñecas, evidentemente no hay ningún corte. Definitivamente usa maquillaje para cubrirse esos feos cortes.

-No haz almorzado nada
Le digo llamando su atención.

Ella decide ignorarme.
Bufó sonoramente y le quitó el trapo con el que esta limpiando.

-Come.

-No tengo hambre.

-¿Te pregunte su tenías hambre? Come, hay pizza en la sala principal.

Ella me mira raramente.
Pero no me hace caso y se sienta en una de las sillas de desayuno con los brazos cruzados.

-______.
Le digo intentando mantenerme serio.

Ella se encoge de hombros.
Mierda. Mierda.
Pero que difícil es obligarla a comer.

-Si no comes se lo diré a mamá, y se enojará.

______ mira hacia el piso y se retira de la cocina. No tardo en seguirla.
Se dirige a su habitación.

Joder.
Subo los escalones corriendo y la detengo de cerrar la puerta.

-______ vamos, tienes que comer.
Insisto entrando a su habitación.

-No, vete.

Me dice seriamente y se dirige al tocador, puedo notar que hay algo ligeramente brillante que cubre con una de sus manos.

Frunzo el ceño y me acercó a ella.

-¿Qué es eso?

Pregunto poniéndome frente a ella.
Puedo notar como se pone nerviosa.

-Un collar que me regalo mi abuela.

Evidentemente, eso no tenía forma de un collar.

-Dámelo.
Le digo seriamente.

Puedo notar como los ojos de _______ se aguan.
Niega con su cabeza y mira hacia el piso.

Con cuidado la aparto de allí dejando ver una pequeña navaja. Mis ojos se abren como platos. Tomó la navaja entre mis manos con cuidado de no cortarme y la miro.

Ella llora silenciosamente.
Evidentemente, se corta.

Y eso me duele, demasiado.

-¿Por qué lo haces?

Pregunto mientras la observo.
Sus ojos azules están apagados.
Se limpia las lágrimas y me mira fijamente.

-Porque estoy harta... Ross mi vida era tan diferente... no tenía que trabajar, era mala con todo el mundo, me burlaba de las personas, tenía ropa fina y cara, pedía algo y me lo conseguían con tan solo chasquear los dedos... pero cuando murió mi padre todo cambio... mi madrastra se quedo con todo el dinero de mi padre, me quede sin dinero y comenzaron a burlarse de mi en la escuela, mi madrastra también me trataba mal así que vine con mamá a Los Angeles, mamá enfermo... no teníamos dinero... tuve que trabajar en esto para pagar mis estudios y comprarle sus medicinas... pe... pero murió -Sollozo- Mi vida es una mierda, y tu te encargas de romperme más de lo que estoy con tus estúpidas burlas y malos tratos... estoy cansada de vivir Ross... solo quiero morirme y reencontrarme con mis padres, quiero a mis padres.

Susurra estallando en lágrimas.
Dejo la navaja en el mismo lugar que antes, voy hacia ella y la abrazo con bastante fuerza.

Se lo que ella necesita... solo un abrazo.

Empleada | Ross LynchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora