Incómodo

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- ¿Qué hacéis aquí?- dice Riley con una sonrisa.
- ¿No escuchaste nada?- pregunto con miedo.
- No, vine. A por la fregona del conserje. ¿Por qué?
- Porque estábamos discutiendo y ya sabemos que no te gusta que lo hagamos- dice Lucas guiñandome el ojo cuando Riley se gira para mirarme.
- Maya... No debes insultar a Lucas, él es mi novio- sentí como si me hubiesen dado una patada en el corazón y hubiesen roto.
- Riley, comencé yo.- Dijo Lucas cabizbajo, Riley se extraño y levantó una de sus cejas.
- ¿Es eso cierto?- me preguntó extrañada.
- Sí, ¿tanto te extraña que no haya empezado yo una pelea? - Dije con un elevado tono de enfado.
- No es eso- dijo Riley movía la cabeza de un lado a otro, pero sabía que mentía.
- No pasa nada. - Le dije, no quería comenzar una disputa y no podría enfadarle con ella después de haber besado a su novio.
- Exacto, no pasa nada. Ahora hay que volver a clase. - dijo Lucas para cortar la tensión que se sentía en aquel cuarto de la limpieza.

- ¿Tienes mi fregona?- Dijo el conserje mientras entraba por la puerta.
- Emm- dijo Riley como respuesta mientras buscaba la fregona.
- Aquí está- dije extendiendo la fregona que acababa de coger del suelo en dirección al conserje.

Pero no me había dado cuenta que no era la única que había cogido la fregona, encima de mi mano de encontraba la de Lucas. No pude evitar mirarle, y el también lo hizo, nos mirábamos sin dejar de sujetar la fregona.

- Sí, aquí está. - DijoRiley arrebatando la fregona de nuestras manos, lo que hizo que Lucas y yo rompiesemos nuestro contacto visual. Al hacerlo sentí como mis mejillas se comenzaban a poner rojas por aquel momento tan incómodo.

Riley nos mira un par de segundos y después se gira como si nada hubiese pasado para entregarselo al conserje que se encontraba de pie, inmóvil delante de nosotros iluminado por la tenue luz del cuarto.

- Gracias chiquilla- dice con una sonrisa mientras le revuelve el pelo con la mano derecha. - Y ustedes no pueden estar aquí sin mi consentimiento- nos dice a Lucas y a mí cambiando la sonrisa de su rostro y transformando sus labios en una linea recta.

- Por supuesto, no volverá a pasar.- Decimos Lucas y yo al unisono.

- Vale, ahora salgan todos de aquí.- dice mientras se aparta de la puerta y estira el brazo izquierdo en dirección al pasillo y el derecho doblado en la misma dirección. Sin pensarlo dos veces salimos de aquel lugar, primero sale Riley dedicándole una sonrisa dulce al señor que nos pedía que saliesemos, seguidamente sale por la puerta Lucas pidiendole disculpas cabizbajo por haber entrado y por último salgo yo, mirándole desafiante, sin miedo y sin emitir palabra ni sonido alguno.

Una vez fuera el señor de la limpieza cierra la puerta con delicadeza, cierra con llave el cuarto, seguramente para que no volvamos a entrar, y desaparece al girar la esquina del pasillo hacia la derecha.

Los tres nos quedamos allí mirándolos y en silencio. Últimamente hay mucho silencio... ¿Riley sospechará algo sobre Lucas y yo? ¡No! No hay un Lucas y yo, así que no puede sospechar nada porque no pasa nada.

- Bueno ahora que hemos salido- comienza a decir Riley seria, me espero lo peor y intuyo que Lucas también porque se pone tenso y mira a Riley con preocupación en los ojos.- Chicos... No me gusta que estéis así.

- ¿Así? ¿Así como? No estamos de ninguna forma... Estamos normales... Como tú... Como todas las personas a las que no les pasa nada- Comienza a decir Lucas a toda prisa... ¿Este hombre no sabe mantenerse callado y calmado? Siempre tiene que meter la pata.

- ¿Qué? Lucas tranquilo... Me he dado cuenta.

- ¿De qué? De qué te vas a dar cuenta si...- comienza a decir Lucas pero le pego un codazo en una de sus costillas sin que Riley se de cuenta porque estaba mirando fijamente a Lucas. Lucas entendió que debía de dejar de hablar y así lo hizo, pero no podía evitar que se notara lo nervioso que estaba.

- Las cosas entre vosotros se están volviendo cada vez más tensas... Y si continúan así se van a volver muy incómodas... No podéis discutir i enfadaros... Maya eres mi mejor amiga y Lucas, tú eres mi novio- dice mientras le coge del brazo lo que me hace dar un vuelco al corazón.- Quiero que os llevéis bien.- Termina diciendo mientras apoya su cabeza en el hombro derecho de su novio y me coge la mano con su mano izquierda.

- Chicas.

- Farkle.- decimos Riley y yo al unisono.

- Farkle- dice Lucas tosiendo para hacerse de notar.

- Don perfecto- dice Farkle apartando la mirada de Lucas.

- Riley necesito ayuda.

- ¿Para?- dice Riley soltándose a Lucas y dejando de apoyar su cabeza sobre su hombro.

- Ven, ahora te lo enseño- dice Farkle cogiendo a Riley de la mano mientras mira a Lucas desafiante como pretendiendole decir que se la va a robar pero Lucas no muestra ninguna expresión de desaprobación ante la insinuación de su amigo. Así que, extrañado Farkle comienza a caminar llevándose a Riley a rastras.

Y allí nos quedamos nosotros dos. Veo como nuestros dos amigos giran la esquina y comienzo a hablar.

- Tenemos que hablar.

- Ya hemos hablado- dice Lucas con esa sonrisa suya.

- Bueno, pues más.

- Vale, ¿a donde vamos? ¿al gimnasio? ,¿a...

- A ningún sitio- digo tajante.

- Quieres hablar aquí.

- No, ahora no vamos a hablar. Hablaremos esta tarde cuando hagamos el trabajo.

- ¡El trabajo! Se me había olvidado, ¿cómo es que te has acordado?

- Porque...- porque me era tiempo que pasaríamos juntos- porque sí, no sé los misterios de mi cerebro.

- Bueno pues esta tarde- dice Lucas entre risas.

- De acuerdo, al final de las clases nos vamos juntos a la biblioteca y allí hacemos el trabajo y hablamos.

- Vale.

- Vaquero estúpido.

- ¿Cómo?- dice Lucas muy extrañado.

- Melanie ha pasado.- Melanie es una compañera de clase, no habría soltado eso si no fuese la cotilla del siglo. Si nos ve hablando normal y yo no le insulto, comenzará un rumor que nadie quiere que llegue a los oídos de nadie y mucho menos de Riley.

- Ahh- dice Lucas aliviado- bueno... ¿vamos a clase?- dice con una sonrisa y un brillo particular en los ojos.

- Claro.- digo esbozando una sonrisa y creo que también con ese brillo en mis ojos azules.

PERDÓN POR LA TARDANZA... PERO ME HA SIDO IMPOSIBLE ESCRIBIR ANTES TAMBIEN QUERIA AGRADECERLE Y DELICARLE ESTE CAPITULO A MariaFrias5 porque me ha escrito pidiéndome que escribiese un nuevo capitulo, eso me ha animado y me ha hecho buscar tiempo donde no lo hay para escribir este.

ASÍ QUE GRACIAS a ti y a todos los que leeis esta historia.

Besos y abrazos para todos.

Algo que quisiera decirte  (lucaya)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora