Capítulo 9: Facetas

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Continuando con lo que aportó el Choreza... Pasó esa weá en la mesa, del pedido qlo que hizo y la decisión tan a la fuerza que tomó el Jaime y me paré enojao y salí de las cabañas, weón. El aire frío me golpeó el rostro, pero no me detuve y seguí caminando sin rumbo por la nieve, amurrao cual cabro chico.

¡Tenía una rabia, weón! En serio odiaba a ese tipo, no sé qué se creía el conshesumareh pa venir a decirme todas esas cosas, lo peor es que nunca sabía que contestarle cuando me sacaba en cara que nos llevaría al sur de manera "segura". ¡¡Pero ahora no iba a ser seguro ni cagando!!

¿¡Sacarle sangre a los híbridos!? ¿Qué mierda, weón?

Estos weones eran unos suicidas qlos. Me sentía muy mal. Estaba como mareado, con nauseas, con susto. Me costaba asumir que estaba en un apocalipsis zombie, en la nieve, con un montón de mafiosos qlos raros, que me iban a arrastrar por todo Chile, mientras mi familia seguía pensando que yo estaba muerto, y quizás en qué estaban... Quería puro verlos, weón...

Cuando me estaba sintiendo tan mal, que casi me desmayaba, llego el Edgar de no sé dónde y me agarró.

- Nico, ¿qué onda?- me interrogó- Porfa, no te escapís' así de la nada, imagínate no te encuentro- me dijo preocupado

- Sorry- le conteste cabizbajo

- ¿Qué pasa?- me preguntó mientras me abrazaba. Aaah eso necesitaba- Oye... Estamos todos igual que tú... Por lo menos el Yelito y yo... Te entendemos y tranquilitio, ¿ya? En serio me preocupo por ti, necesito que me entendai y no hagai weás locas tú solo- me pidió

- Si, perdón...

- Ya...- nos quedamos abrazados un rato en silencio, sentía su corazón acelerado, pero que de apoco se iba calmando- Sé que te va a cargar que te diga esta weá, pero... Hay veces que hay que ceder igual... No siempre se puede ganar... Pero yo te voy acompañar siempre, estemos ganando o no, así que tranquilein...

- Puta cabros, no se vayan tan lejos...- se quejó el Bestia de repente, caminando hacia nosotros.

- ...- yo me quedé callao mirando la nieve bajo mis pies.

- Oigan, sé que están pa la cagá con toda esta weá, pero no hagan enojar más al Elmo...- nos pidió como cansado de pelear con el weón supongo- Les prometo ayudarles en todo lo que pueda, para que se vayan rápido a donde se quieren ir, pero ahora cooperen- rogó mirándome a mí

- ...- yo ahora lo pienso y me portaba como un cabro chico al que estaban retando y sabía que lo había hecho mal...

- ¿Vamos, Nico?- me dijo el Eddie, tomándome de la mano.

- Sí- respondí sin mirarlo.

- ¿Sí, qué?- me preguntó el ruliento.

- Sí todo, ya entendí, me voy a guardar los berrinches y vamos padentro' que hace frío...- contesté amurrao.

Tal y cómo había dicho el Edgar, me molestaba que me dijeran eso... Que hay que ceder...

Sé que puedo sonar terco y molestoso, que ya, es mejor decir que sí a todo y aguantar, pero yo no sirvo pa' eso. Soy muy competitivo y orgulloso...

Cuento corto; regresé a la mesa y pedí disculpas al Choreza, al Jaime ni lo miré, me senté calladito y empecé a comer, cuando de repente el barbón me habla.

- Disculpa- dijo bajito, como no queriendo hacerlo, pero sintiéndose obligado por sus compañeros igual. En ese sentido, no éramos tan distintos.

Hasta que la muerte nos reuna (GOTH HD - Zombie AU!)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora