Se escuchaban los gritos por todas partes.
-¡YUI! ¡YUI! ¡YUI! ¡YUI! ¡YUI! ¡YUI! ¡TE AMAMOS YUI! ¡ERES LA MEJOR!
Decían las voces, pero, ¿Para quién eran esas porras y ovaciones que hacían? Me levantaba ingenua mientras pensaba en eso, dirigiéndome hacia la ventana para admirar mejor la rebeldía.
Abrí la ventana y admire aquel espectáculo, es verdad, es para mí, sí, yo Yui, soy la mejor Mangaka de Japón y, ¡Todos me aman! Decía abrazándome a mí misma y saludando al público agitando mi mano con fuerza hacia ellos.
-¡¡Holaaa!! ¡¡Yo también los amo!! ¡¡Nada de esto sería posible sin su apoyo!! -les gritaba esas líneas como si las hubiera ensayado toda mi vida, simplemente todo esto era como un sueño, el imaginar que todas estas personas estén aquí por mí, me daban ganas de llorar.
Y diciendo esto me lancé hacia ellos quienes detuvieron mi caída cargándome, me sentía como si fuese su reina o algo parecido.
-¡LOS AMO A TODOS!
Era una de las mejores sensaciones que he podido apreciar en mi vida, saber que el trabajo que hago para ellos les llega al corazón, como siempre lo he esperado cada vez que los hago... Porque, todo esto lo hago por, ¡Ellos! ¡Mis queridos fans!
De repente siento como toman mis hombros con brusquedad.
¿Eh? ¿Qué?
Lo hacen de nuevo con más afán.
¡No! Detente... ¡No quiero!
Poco a poco siento como mis fans desaparecen... Solo escucho el eco de sus voces a lo lejos, desvaneciéndose en la nada... Regresando a la realidad. ¡NO!
-¡Yui! ¡¡DESPIERTA!!
¿Despertar? No, no no quiero despertar.
-¡¡LEVANTATE!! -grito una vez más esa voz agresiva.
-¿Eh? ¿Qué? -desperté sobresaltándome de la cama.
-Llevo horas queriéndote despertar, llegaras tarde.
-Está bien ya te escuche...
Es verdad, dije que todo esto parecía un sueño pero realmente no tenía que serlo. Bufe. Y bueno, esa era yo, Yui Murakami, soñando de nuevo con ser la mejor Mangaka, pero nadie dijo que no se podía, o ¿sí?
Me levante de la cama aun somnolienta, con la intención de arreglarme para asistir al instituto, me voy al baño a ducharme. El agua que cae por mi cuerpo se siente bien, es relajante, incluso podría quedarme aquí... Hmn, la idea me tienta, pero no puedo hacerlo, así que con toda la fuerza de voluntad que tengo salgo de la ducha para terminar de alistarme e ir de una vez por todas al instituto.
Al parecer Sashi se ha ido, ya que cuando salgo, ella no está en la sala. Sashi es mi hermana menor, tiende a ser un poco antisocial, pero es una gran persona, de no ser por ella, llegaría casi siempre tarde a clases, bueno, aunque al final termino haciéndolo. Ella tiene ojos azules los cuales me recuerdan a mi mejor amiga, a diferencia de los míos que son raros, los herede de mi padre, un tipo de ojos muy inusual... De esos que solo unas cuantas personas tienen, ¿Cómo se llamaban? ¿Heterocromía? La verdad no recuerdo, ya he ido a citas con el médico para chequear que todo se encuentre normal, pero aparte de mi inusual color de ojos, todo va bien. Uno es de color rojo y otro verde, ¿Genial? ¿No? Mi hermana y yo somos completamente distintas, nadie diría que realmente fuéramos hermanas, ella con su cabello corto y solo unos cuantos largos, los que se deja en frente, negro y mechas moradas y el mío completamente rojo, a veces es manejable y otras muy desobediente, muy parecidas, ¿Eh? Yo solo soy unos centímetros más alta que ella pero eso no me quita lo pitufo.
ɷɷɷ
Caminando por el sendero que conduce al instituto, me di cuenta de que está comenzando a hacer frio, se acerca el invierno, me gusta esa estación del año. Seguí caminando mientras sentía la suave brisa que golpeaba mi rostro, se sentía bien. ¡Mierda! ¡Lo olvide! ¡Llegare tarde si no me doy prisa! Comencé a correr sin fijarme muy bien lo que había a mi alrededor.
¡AUCH!
Había topado en algo, o más bien en alguien, perfecto, lo que me faltaba !Argh!.
-¡Oye! ¡Porque no te fi..! -trague.
¡Dios! No podía creer lo que tenía en frente... ¿Acaso estoy soñando de nuevo? Si es así, espero que Sashi no venga de aguafiestas a despertarme. El chico que tenía enfrente con quien había chocado bruscamente, era totalmente ¡APUESTO! y esa palabra le queda corta, sus ojos eran de un perfecto color verde, son hermosos, es una cabeza más alta que yo, lo cual era perfecto ya que, ¡Me encantan los chicos altos! Su cabello es un poco rebelde, alborotado, pero lacio, y se ve tan suave, me dan ganas de pasarle la mano... Tenía unos perfectos labios carnosos, muy lindos a decir verdad, ¿Puedo morderlos?, espalda ancha y cintura que se ajustaba perfectamente, tiene un buen físico... Hmn...
-¿Disculpa? -ladeo la cabeza mirándome desde arriba, tenía que bajar la mirada para poder verme. Haciendo que reaccionara y me diera cuenta que me había quedado embobada viéndole. Qué vergüenza.
-Eh... Hmn... -lo vi por unos segundos más, desviando la mirada, totalmente ruborizada.
Joder... Hasta su voz es hermosa. ¿Era justo que estuviera frente a alguien así de hermoso? Pero el único problema era su cara, digo, no en si su físico, si no, su expresión, es fría no tiene indicio alguno de expresión. Ya decía yo que era imposible que fuese perfecto.
Lo mire de nuevo, a su expresión dura, nos quedamos mirando uno al otro, ¿Cuánto tiempo? ¿10? ¿20 minutos? O simplemente solo un segundo. De repente, dejo de hacerlo para seguir con su camino, mientras yo me quede ahí, parada, como estúpida, viendo cómo se alejaba, estaba, estupefacta, aun no me lo creía, ¿Realmente paso lo que paso?
Negué con la cabeza, para Yui, solo es un chico, nada más, no es nada del otro mundo, si, es guapo pero nada más.
Suspire.
Cuando vi que lo había perdido de vista por completo seguí con mi camino, pensativa, recordando esos hermosos ojos color verde, iba a estar difícil sacármelo de la cabeza.
Espera... acaso... ¿! ¿! ¿! LLEVABA EL MISMO UNIFORME?!?!?!?!
Estúpida Yui, estabas tan embobada, comiéndotelo con la mirada que no pensaste que pudieron ir juntos al instituto. Estúpida. Estúpida.
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CHIAI "Amor Eterno"
Romance-¡No soy lesbiana joder! Ambos estábamos molestos, y cuando eso pasa nada bueno puede suceder. -¿Es ella o yo? -Mabuchi, por favor. -Responde Yui, ¿ella o yo? -¿Realmente quieres terminarme por esto? -mis ojos picaban, las lágrimas amenazaban con s...