Capítulo 29

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-CUATRO MESES Y MEDIO MÁS TARDE-

Aun quedan cosas por arreglar en la habitación de mi bebé y aproveche que dejé la empresa en manos del vicepresidente mientras regreso luego de dar a luz. La doctora me pidió que guardara reposo estos últimos dos meses ya que he tenido la presión arterial un poco alta. Me encontraba en mi habitación junto a Hyunseong preparando las maletas ya que nos íbamos por una semana al mismo lugar donde fue nuestra luna de miel. Una vez que estuvo lista la maleta, bajamos juntos para despedirme de la nana. Hyunseong siguió hasta el auto para dejar las maletas.

Nana: Te cuidas mi niña – dijo – recuerda comer lo menos salado y grasoso posible – recordó

Jenni: Lo sé nana – dije – Hyunseong no me va a dejar aunque quiera – comenté

La nana empezó a reírse y me voltee para ver a Hyunseong venir por mí. Me voltee a ver a la nana para despedirme y prometer estar de regreso en una semana. Tomé de la mano a Hyunseong para salir juntos hasta el auto. Nos subimos y el chofer hizo lo mismo para poner en marcha el auto. Al llegar, el chofer estacionó el auto en el estacionamiento del edificio y junto a Hyunseong bajó las maletas. Camine hasta la entrada para tomar el ascensor y subir. El chofer entró para dejar las maletas en la habitación y luego retirarse diciendo que cualquier cosa no dudemos en llamarlo. Seguido salió de la habitación para atravesar la sala y salir del apartamento. Me voltee a mirar a Hyunseong y estaba abriendo las maletas para organizar las ropas. Le ayudé un poco en lo que podía ya que mi pansa era bastante notable y no me permitía hacer mucho. Luego que terminamos, nos fuimos juntos a la sala del apartamento y nos sentamos en los sillones para mirar la televisión hasta que me queje de hambre. Era cerca de las cinco de la tarde y era de esperarse sentir hambre. Hyunseong se paró para preparar la cena y cuando menos él lo espero, aparecí para ayudarle.

HS: Deberías descansar – dijo

Jenni: Quiero acompañar a mi esposo en la cocina – respondí

Hyunseong sin pelear ni disgustarse acepto que le ayudara en la cocina. Cocinamos juntos y a veces nos hacíamos trampa con tal de gastarnos una broma. Una vez que estuvo lista la cena, caminamos hasta la mesa para poner los platos. Seguido nos sentamos para empezar a comerla juntos y disfrutar del momento donde podemos estar completamente solos en parejas y en romance sin tener que contenernos. A más lo miraba mas enamorada me sentía. Sentía que mi amado Hyunseong es el hombre perfecto y el mejor amante y compañero que he podido conocer. Sentía mi corazón palpitar tan fuerte que me sentí perdida en sus gestos y en la sonrisa que tenía en sus labios.

Jenni: Hyunseong – llamé

Hyunseong respondió tan pronto le llame. Me levanté y en la silla que estaba a su lado me senté para él voltear a mirarme. Me acerque a sus labios para besarlo con mucha calma y sin mucha prisa. Separándome de sus labios susurré que lo amo y fue la misma respuesta que recibí de Hyunseong. Los días avanzaron y dentro de dos días teníamos regresarnos. La hemos pasado muy bien y me ha ayudado a sentirme más tranquila. Era cerca de las seis de la tarde, luego que cenamos nos quedamos en la habitación juntos. No hacíamos nada especial, además de jugar con sus dedos sentamos en la cama. También planeábamos cual sería un buen nombre para nuestro hijo.

Jenni: Quisiera que lleve tu primer nombre – dije

HS: Porque – preguntó

Jenni: Porque siempre quise ponerle el nombre de mi esposo a mi hijo – respondí mientras entrelazaba mis dedos con los de él – y me gusta el nombre de Hyun Woo – comenté

HS: No suena tan mal – respondió

Voltee a mirarlo y lo primero que apareció fue una caricia de la mano que tenia libre. Lentamente rompimos la distancia y nos dimos un beso no muy largo pero lo suficientemente tierno.

Conociendo el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora