When The World Turned Round

El primer beso

Allison

Un nuevo día en Road Hills. Eso significa: una enorme cantidad acumulada de estrés, aventura y, especialmente, drama.

Aaron me recogió en su Porsche, y nos dirigimos, otra vez, al instituto, y llegamos temprano, otra vez.
Me sorprendió no ver a Jeremy con Hayley, ya que la semana pasada estuvieron casi todo el tiempo juntos.

Otra cosa que me sorprendió fue ver a Hayley hablando con Carlie y Nicki.

Aaron y yo intercambiamos una mirada de terror mezclada con confusión, y nos alejamos de ellas rápidamente para no tener que enfrentar lo que sea que esté pasando aquí.

- Creí que la perra estaba peleada con ellas a susurré, cuando por fin estábamos lejos de ellas.

- Yo también, Al, no tengo idea de qué está pasando.

Y en ese momento, levantó su polo casualmente, dejando al descubierto su perfecto abdomen, y yo, obviamente, no podía quitar mis ojos de su torso.

- ¡Tierra llamando a Allison! - me dijo cuando finalmente su remera volvió a cubrir su abdomen.

- ¡Oh! ¿Qué? Es decir... Lo siento, estaba...

- ¿Admirando mis perfectamente trabajados abdominales?

- ¡¿Qué?! ¿Cómo lo sabes? Emmh, quiero decir... Yo sólo estaba pensando en...

- ¿Mi perfecto y glorioso torso? - preguntó divertido.

- Deberías controlar tu nivel de arrogancia - le dije, siguiéndole el juego.

- Como gustes, hermosa - al decir eso me guiñó un ojo, y me sonrojé completamente.

~•~

Abandoné la clase de química, dispuesta a irme a casa, ya que aquella era mi última clase. De todas maneras, tendría que dejar algunos libros en mi locker primero.

Puse la clave, y en el momento en que iba a abrirlo, noté que alguien estaba detrás mío, muy, muy cerca.

Giré mi cabeza rápidamente, para encontrarme con el rostro de Aaron Standed delante mío. Lanzé un grito agudo debido a mi gran sorpresa.

- ¿Cómo estás, Allison? - preguntó, con voz extremadamente ronca e increíblemente sexy.

- B... Bien, ¿y tú? - dije, con mi voz temblando.

- Antes estaba bien... Ahora estoy increíblemente mejor - respondió, acercándose aún más a mí.

Miré a mi alrededor, y no había nadie. El pasillo estaba completamente vacío, como si todos se hubieran desvanecido. Volví a posar mis ojos en los de él, y tragué saliva.

-¿Te llevo a casa? - finalmente preguntó, y asentí, nerviosa.

Volví a girar la cabeza para depositar mis libros en el locker, pero se me cayeron al piso. Bufé, y me dediqué a levantarlos del piso. Segundos después, Aaron se arrodilló frente a mí y me ayudó a levantarlos.

- Gracias - le dije, y los coloqué en el locker, esta vez por suerte sin que se me cayeran.

- Allison... - empezó a decir, sin despegar su mirada de la mía - Me encanta estar contigo... Yo nunca creí que... No sé como explicarlo, pero me haces muy feliz, demasiado... Y sé que tú también los sientes, lo sé. Y no me preguntes cómo, pero estoy seguro de que...

- No digas más nada - lo interrumpí, dedicándole una sonrisa de oreja a oreja. Sabía que no era bueno en este tipo de cosas.

Y entonces junté mis labios con los de él, cosa que hizo que al principio se sorprendiera,y admito que yo también me sorprendí, pero no pude contenerme. Luego, se relajó, me tomó con una mano de la cintura, y posó la otra en mi mejilla. El beso se hizo largo, y sus labios se sentían suaves contra os míos.

No pude explicar cómo me sentía.

Cuando nos separamos, me di cuenta de lo que acabó de suceder: lo besé. Y él tiene novia.

- Lo siento mucho, yo...

- No lo sientas. Por favor, no lo sientas.

Y me besó, y otra vez sentí aquello que era imposible de explicar.