Road to ninja | NaruSaku

Determinación implacable

—Oye Naruto... había una cosa que me preguntaba —dijo ella pensando.

—Qué —dijo Naruto mirándola a los ojos.

—¿Tu qué opinas... de todo lo que ha pasado? ¿De Uzumaki Menma? —preguntó ella que aún no sabía su opinión

—Creo... que es un idiota... —dijo Naruto muy serio.

—Sabes... pues yo creo que se parece algo a ti —dijo Sakura pensando.

—Yo también... y por eso digo que es un idiota —dijo Naruto haciendo sonreír a Sakura.

—Cuando tú eras pequeño, sufriste lo mismo que el... sin embargo tu historia acabó mejor. Todos por fin te aceptamos y te vimos como un compañero, un amigo y un gran ninja... pero él... —dijo Sakura mirándole.

—Él se rindió... —dijo Naruto serio.

—Pero no lo entiendo, tenía a sus padres, tenía a Sakura —dijo la chica que no podía entender como Menma aguantó menos que Naruto.

—Justamente es por eso Sakura-Chan... él tenía cosas importantes que proteger, y tenía cosas importantes en su vida —dijo Naruto mirando al cielo.

—Ya... creo que lo entiendo... a ti te decepcionaron personas que tampoco te importaban mucho, pero a él le decepcionaron las personas que más quería... —dijo Sakura triste.

—Además también quiso protegerlas y al fin y al cabo solo era un niño con una carga demasiado grande... no sé qué pensar exactamente de Uzumaki Menma... porque ha caído en la oscuridad que yo estuve a punto de caer. Y no puedo juzgarle por ello —dijo Naruto mirándola.

Menma se había alejado de los límites del País del Fuego para estar desapercibido un tiempo. Se había quedado en el Valle del Fin donde había montado una improvisada tienda de campaña a la orilla del lago. Sin embargo ahora estaba subido encima de la estatua de Madara Uchiha viendo el paisaje que había delante de él.

Realmente esa chica era hábil. Pensó notando que ya no le dolía nada en su cuerpo.

Menma llevaba una improvisada capa por encima que había hecho con unas mantas ya que Sakura había quemado su chaqueta con una bola de fuego. Pero ahora ya no llevaba máscara ya que había sido destrozada.

Naruto había ido a casa de Minato y Kushina a dormir. Era ya por la mañana pero tenía que descansar después de la noche tan movida. Minato y Kushina sin embargo no pudieron dormir en toda la noche ni la mañana. Sakura se había separado de Naruto para ir a su casa, bueno, a la casa de la otra Sakura donde ahora dormía todas las noches. Se había ido directamente a su cuarto a dormir. La otra Sakura seguía en el suyo que había conseguido conciliar el sueño algunas horas mal contadas.

Sin duda había sido una extraña noche. Primero Naruto y Sakura arreglaron sus problemas sentimentales y por fin ella pudo aclarar lo que sentía. Después Menma los atacó aplastando a todos los shinobis de élite y a los que trataron de detenerlo. Pero para hacer la noche más agradable e interesante, Haruno Sakura, la ninja médico, descubrió algo que cambió a todos su forma de ver el problema. Si... sin duda había sido una noche muy movida.

Ya había llegado la noche. Eran las ocho y Naruto se había despertado. Cuando fue hacia el salón se encontró a Minato y a Kushina en el salón en silencio.

—Hola Naruto... —dijo Kushina triste mirándole.

Están muy tristes. Pensó Naruto al verles—. Buenas noches —contestó Naruto rápidamente. Se sentó junto con ellos ya que estaban cenando. Sin embargo cenar Ramen precalentado recién despertado era algo raro. Pero al fin y al cabo era Naruto. Sin embargo comenzaron a llamar a la puerta. Kushina se levantó y fue hacia ella. Cuando la abrió se encontró con la Hokage bastante alterada junto con Tsunade.