Como suicidarse y no morir en el intento

Capitulo 16: Una melodía de dos

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-Fue una gran sorpresa para todas ustedes- Luke se mofo un poco de las cosas –La verdad es que no hablo mucho con ella y por eso en ese momento no la mencione.

Emily le sonrió –La verdad es que no fue tan molesto, ciertamente fue hasta agradable.

-Y todos sabemos por qué lo dices- Livi le dio un pequeño golpe al cual Emily reacciono con una risa nerviosa –De eso estoy hablando chica.

Tay miro su reloj –Bueno sigue, ya nos falta poco para nuestra presentación-

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Emily cayó de rodillas al lado del bote de basura, abrió la tapa y metió parte de su cabeza en el y comenzó a vomitar, Ella tenía una jeans de color negro, una camisa de cuadros azules con las mangas recogidas y una camiseta de color negro, tenis y un gorrito de lana.

-La verdad no pensé que un par de vueltas te hieran tanto mal. No debí insistir- La chica le dio un par de palmaditas en la espalda, ella tenía unos jeans azul oscuro, botas rojas con taches, una camisa negra de Guns and roses y una chaqueta tipo blazer recogida hasta los codos –Si quieres podemos irnos ya.

Emily saco su cabeza del bote de basura –Apenas llegamos –Tomo una servilleta de su bolso se limpió la boca y fingió una sonrisa –Vamos Kat, aún hay más juegos a los que podemos subirnos.

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La verdad es que eso de que no hay mal que por bien no venga no está del todo errado, aunque algunos males son peores que otros, ella era una chica problema, algo demente y muy alocada... todo lo contrario a mí y eso honestamente me encantaba mucho.

-Mira, es la chica rara y su novia de turno- Uno de los chicos de la escuela apareció para molestarle- ¿Qué harán ahora?

-¿Sabes jugar baloncesto? – Kat le pregunto con mucha calma –Me gustaría jugar contigo delante de toda la escuela, digo si es que al menos uno de los dos es hombre.

El chico sonrió –Yo soy el capitán del equipo- Se le acerco –Te voy a aplastar, nos vemos mañana.

-Es una cita guapo.

Las dos chicas se marcharon, se fuero calmadamente, Kat se iba riendo un poco, y Emily seguía nerviosa, luego de un momento Kat la tomó por sorpresa y la beso, la beso suave y confiada a lo que Emily no pudo reprimirse y le continuo.

-No te preocupes por ese, tú y yo sigamos en lo nuestro.

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En general fue una simple y buena cita, ya saben helado y algodón de azúcar, la montaña rusa y un par de besos furtivos, la rueda de la fortuna y un par de manos juguetonas... un largo beso de despedida y una noche llena de suspiros y sueños hermosos y unos más calurosos con ella.

-No me voy a contener solo por que seas chica, o algo así fenómeno- El chico le hablo muy confiado, tenía el uniforme azul de su equipo y estaban en la cancha del parque que estaba frente a la escuela.

Kat le sonrió –Solo espero que no sea demasiado fácil- Ella estaba vestida con una unos shorts negros, tenis converce, una camisa negra con el logo de las reliquias de la muerte –Juguemos.

-Lista fenómeno.

Kat comenzó a botar la pelota en el suelo, y usando un par de pifeos y movimientos de piernas se la paso por las piernas al chico, la recupero la lanzo por encima de el para que votara y regresara a sus manos, luego amago con correr y no lo hizo, el resbalo y se cayó ella siguió botándola, para después correr y encestarla. Kat se estaba burlado a la par del chico, cada sesta era una nueva humillación con una jugada diferente, pasadas entre las piernas, golpes en su espalda y amagues para hacer cestas casi imposibles solo fueron parte del repertorio, la última fue la peor de todas, ella giro sobre sí misma, el chico en su afán de recupera la bola y un poco de su hombría cayo de nuevo Kat boto un par de veces la pelota en el suelo.

-Y se acabó- Kat dijo con una gran sonrisa antes de lanzar la pelota por encima de ella y de espaldas a la cesta, esta entro limpia, Kat puso su mano sobre su oído en señal de estar esperando algo y en cuanto escucho el grito de todos por esa cesta hizo con su mano el gesto de tres puntos -Auch chico, eso debió doler ¿No?- Ella le dio la espalda y se fue –Soy campeo de freestyle callejero en el antiguo vecindario donde vivía, y si ... soy la novia de Emily.

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Si lo que hizo fue súper, ese chico se lo merecía, pero decir que éramos novias después de un par de citas y unos cuantos besos creo que fue algo arriesgado y más aún delante de una escuela como la mía, ya saben estos ignorantes.

-No debiste de hacerlo, no tienes idea de lo que hiciste- Emily hablaba muy molesta –Me ganare una cantidad de problemas insufribles por tu culpa.

Kat solo sonría –Oye chica tranquila, solo humille a ese tonto como se merecía, es todo.

-No me refiero a ese estúpido, me refiero a que dijeras que somos novias –Emily la miro fijo a los ojos.

-¿No lo somos?- Kat pregunto seria –O será que te da vergüenza que sepan que eres homosexual ¿Cierto?

-No es eso, es que...-

-Lo sabía, te da vergüenza lo que eres, llamas ignorantes a los demás por no aceptar que eres diferente, pero tú no te aceptas- Kat la miro fijo a los ojos –Eres una cobarde y no tendrás una vida plena hasta que no te aceptes como realmente eres y no puedes pedirle eso a los demás si tu no lo haces...

Emily la interrumpió con una fuerte bofetada –Tú no sabes nada.

Kat se tomó la mejilla –Claro que lo sé, lo viví- Kat se marchó corriendo dejando a Emily hay sola llorando.

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En ese momento no quería aceptarlo, pero ella tenía razón, cada palabra era cierta y fui cobarde, cobarde no aceptarlo, cobarde no correr tras de ella, cobarde no hacer nada mientras la perdía... mientras perdía a alguien que quería de nuevo.