Después de pasar una terrible noche intentando dormir sin lograrlo, decidí que lo mejor era levantarme aunque fuera temprano.
Mientras tomaba un baño me preparaba mentalmente para encontrar las palabras adecuadas que usaría para dirigirme a Chanyeol, debía enfrentarlo pero no tenía ni idea de cómo hacerlo.
Estaba rogando que el tiempo pasara rápido ya que aún era temprano y no quería irrumpir en la casa de Chanyeol a esa hora. Traté de distraerme un poco viendo la televisión pero no funcionaba mas que por unos segundos porque de inmediato mi mente se tornaba a él. Resignado salí de mi casa dispuesto a ir a su encuentro.
Al estar frente al lugar toda la determinación que había adquirido desapareció por completo, estaba dudando y los nervios se apoderaron de mí porque no sabía que pensaba Chanyeol al respecto.
Después de terminar mi conflicto mental logré tocar el timbre y en unos segundos la puerta fue abierta dejándome encontrar a Chanyeol tras ella. Su mirada no mostraba lo brillante y alegre que suelen ser sus ojos. Me preocupé.
- hola -dije dudoso- ¿podemos hablar?
- claro pasa - abrió por completo la puerta y me mostró el camino hasta la sala. Tomamos asiento y cuando por fin había logrado tranquilizarme hablé-
- escucha, lo que pasó ayer...
- Baek no tienes nada que explicar -interrumpió- después de todo no somos nada.
-¿no somos nada? -agregué indignado, ¿cómo podía decir eso? porque de alguna manera u otra teníamos algo después de lo que habíamos pasado días atrás. Estaba luchando para no enfadarme-
- No quiero que entres en conflictos por ésto. Yo sé de tus sentimientos por él ¿lo olvidas? quiero que pienses bien en lo que sientes antes de que digas cualquier cosa.
No me creía lo que estaba diciendo, pero traté de darle solución. -¿el qué esté aquí ahora no te dice nada? ¿en serio conoces mis sentimientos?
- sólo creo que debes estar seguro, no lo tomes a mal.
- el que debe estar seguro es otro. -me levanté molesto después de todo -sólo quiero que sepas que estuve toda la noche y la mañana buscando la manera de venir a ti para arreglar ésto ¿y tú me dices que no somos nada? Piensa en ello. - Me miró fijamente sin decir nada para después agachar la mirada-
Salí molesto de su casa pero no por mucho ya que la tristeza se apoderó de mí. ¿cómo era posible que la la felicidad que había logrado desapareciera así como así? Las cosas estaban más que torcidas.
No pude descifrar si lo que Chanyeol me había dicho fue producto de un enojo o realmente pensaba que aún mantenía sentimientos por Sehun.
Si era la última no dudaría en golpearlo ¿Acaso es posible que esos pensamientos invadieran su mente?
Caminaba pensativo mientras meditaba en todo pero mi estado de ánimo no era el mejor y lo último que quería hacer era ir a lamentarme a mi casa así que me mantuve caminando hasta que mis ojos se encontraron con un pequeño parque y no pude quitarme de la cabeza la idea de subirme al columpio.
Mantenía la mirada fija en el piso mientras me balanceaba sin ánimos y estaba inmerso en mis pensamientos hasta que fui arrebatado de ellos por una voz que me llamaba. Levanté la vista para ver de quien se trataba.
- ¿te encuentras bien amigo? -preguntó un chico con una gran sonrisa gatuna mientras su rostro reflejaba una inmensa amabilidad-
- ss-sí, lo estoy -contesté nervioso sin saber por qué-
- es que no lo pareces, te vi desde hace un rato y luces deprimido, lo malo de ésto es que contagias a los niños de aquí- presté atención a mis alrededores pero no había nadie más en el parque-
