La ninfa del bosque "La contienda"

Capitulo I - Belleza y misterio

Lo habíamos logrado, llegamos a Ilicia , el bosque mágico, lugar del cual solo había oído a través de historias sumamente antiguas; volví a ponerme nervioso, observaba a mis amigos desembarcando mientras caminaba por una alfombra verde muy suave que nacía en los pies de los arboles y dormía en los nuestros ,los arboles eran tan altos que con suerte se alcanzaban a ver en la cima del cielo,dejándonos fuera del alcance de la estrella mas luminosa.

Nuestro capitán y jefe supremo de nuestro grupo el viejo Olcer nos daba las ultimas indicaciones para encontrar el lugar exacto en donde teníamos que realizar el ritual de ingreso al pueblo de Toul....Toul?? Me parecía haber escuchado ese nombre muchos años atrás, solo en relatos, un sitio inimaginable, inexistente, real solo en cuentos de hadas, lo describían como mágico e hipnótico de donde no se podía salir fácilmente...no se como no me espantaban esos cuentos de niño...,pero ya estábamos aquí haciendo realidad nuestro sueño de dar con la famosa Ninfa Dorada de Toul, escondida en algún lugar secreto de ese paraíso.

Estábamos todos reunidos:

Tosen, el subordinado del viejo Olcer, un ser alto y fornido, nada inteligente , yo diría que esta en este viaje solo por ser miembro de la familia del gran capitán.

Matsumoto, una investigadora convocada a participar de este magno evento por su gran capacidad de análisis y organización en equipo, meticulosa en su trabajo la ha llevado a obtener numerosos reconocimientos en distintas entidades muy importantes.

Dios-dado, un personaje extraño , se podría decir que era un elemento nuevo en el grupo, elegido por el capitán Olcer para realizar este viaje por su gran conocimiento en historias relacionadas a las ninfas, mitología, fantasía y cualquier acontecimiento irreal.

Por ultimo esta Sebastiano, el mas joven del grupo y experto en todo lo relacionado con tecnología tan solo con 20 años de edad y en búsqueda de realizarse como un gran investigador; pero a su vez muy ingenuo.

.....Del capitán Olcer y de mi les contare después, son largas historias para una sola descripción.

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Pensando en que nos depararía esta aventura, comencé a recordar aquellos tiempos de niño cuando uno lo único que quería era poder salir a divertirse con los amigos del barrio, con un misero trompo de madera y un hilo barato de los que usaba mi madre eramos felices; épocas tranquilas donde no existían preocupaciones ni responsabilidades solo deseábamos jugar y jugar y seguir jugando; mi madre,una mujer preocupada por los quehaceres del hogar mas que por cualquier cosa pero adorable en el fondo y mi padre un hombre trabajador, por el nunca nos falto un pan en la mesa y ahora mis hermanos y yo somos personas de bien; fueron tiempos maravillosos...fueron...hasta que llego ese día en el que todo lo que construimos se derrumbo en un abrir y cerrar de ojos.

la fuerza de la oscuridad esta fuera del alcance, el asaetado de los aires se queda sin ser visto ,las luces del camino esas luces que se encienden poco a poco a donde apunta nuestro destino, a la velocidad de 8 rayos de mil cuerpos, rueda el mundo y desde esta distancia todo esta ahogado y carece de luz"; una luz muy brillante y resplandeciente renació desde la bóveda celeste hacia la alfombra verde que nos abrazaba, de pronto nos vimos sumergidos en un mundo cubierto de un concierto de luces asombrosas que nos transmitía paz y mucha tranquilidad; era como lo mencionaban en los antiguos libros,"es difícil salir de este lugar"; podía ver a mis compañeros a mi lado , en sus rostros sosiego y armonía, no nos imaginábamos que este viaje seria tan grandioso, poco a poco la luz se iba apaciguando, volvíamos a lo real , comencé a sentir un aroma atractivo, atrayente y absorbente envolviéndome, al abrir mis ojos observe un paisaje hermoso tal y como nos lo habían contado en los cuentos espirituales, mis compañeros dibujaban una sonrisa en su rostro era como si estuvieran hechizados , felicitándose por haber logrado el primer paso de todo nuestro propósito ; definitivamente estábamos en otra parte , no había señal de nuestro barco, de la zona salvaje donde nos encontrábamos, esto era diferente; lo veo claramente pero no podría describirlo abiertamente, todo era muy misterioso , las dimensiones del lugar eran distintas , el olor, las áreas verdes eran visiblemente purpuras , el cielo azul marino y el sol como una esfera redonda y muy definida en su interior.

Mis compañeros dieron comienzo a la exploración y decidimos separarnos e investigar zonas cercanas al punto de origen, la señorita Matsumoto iría acompañada del capitán Olcer , Tosen junto con Sebastiano , solo quedaba yo así que opte por quedarme a esperarlos en el lugar donde inicio todo debo mencionar que el lugar me aseguraba una calma que no sentía temor alguno a quedarme solo en un hábitat que podría ser hostil.

Por un momento me puse a revisar los apuntes que había echo durante la travesía antes de llegar a este territorio en un manuscrito de viaje, en el plasmaba todo mi sentir mientras navegábamos a lo  largo  del océano; lo podía hacer muy sereno ya que como mencione el lugar era un templo de conciliación completo, lo que cambio de un instante a otro...

En un santiamén mi cuerpo paso de la calma a la ansiedad, al nerviosismo, una inquietud que me hablaba y me decía:

-Algo no anda bien aquí, preocúpate en mirar a todos lados-

Mi cuerpo se comenzó a tensar  me sentí rodeado de una energía maligna, algo que jamas pensé se iba a manifestar estando aquí , me preguntaba a mi mismo -¿Que era esto? sera el lugar, sera la energía de los arboles, el aroma del viento, la luz cargada del sol; pero nunca lo pude descifrar solo quede inmóvil sin saber que hacer, de pronto caí desmayado al suelo.

-¿Donde estoy? ,¿donde están mis compañeros?- me ardía mucho la cabeza, pero fue sorprendente el lugar donde había despertado , sentía que estaba en el mismo sector de donde empece pero no, supuse que estaba solo pero nuevamente no, allí estaba ella , hermosa , radiante , tendida en el pasto verde el cual la hacia ver magnifica y estupenda ; con sus cabellos rojos, su piel blanca y preciosa, unos ojos que deseaba estén abiertos y poder admirarlos; desperté de ese sueño y me puse de pie, un silencio puro nos rodeaba y me acerque a contemplarla.

Ella despertó ...