Pov Samuel.
Ya había pasados una semana desde que los buques de guerra habían partido, aún no habían encontrado a David y mientras más pasaba el tiempo más nos deprimíamos, Daniel lleva ya dos días enteros sin comer y cada vez que escuchaba la pronunciación de su nombre se hecha va a llorar, yo por mi parte no decía nada.
Como estará, fue el pensamiento que cruzó por mi mente mientras tocaba la puerta del cuarto de Daniel, al entrar vi como este se volteaba a ver me, mientras de sus ojos caían pequeñas lágrimas, nunca pensé que se preocuparía tanto por el, siempre creí que nos odiaba pero estaba equivocado.
Sin más me acerque y acaricie sus rebeldes cabellos, este se dejó cuando me senté a su lado me abrazo con fuerza aferrándose a mí, al parecer no era el único que se sentía sólo, nos quedamos un rato en silencio y desee protegerlo no era la primera vez que sentía esa necesidad pero si lo hacía, mi madre se daría cuenta de que era débil como mi padre.
- Samuel, David volverá ¿verdad? - me pregunto con sus mejillas sonrojadas aferrándose con más fuerza a mí.
- Claro que lo hará y cuando esté aquí, se enojar a por vernos llorando como mariquitas - dije mientras hacia un puchero.
Este sonrió lo que me hizo sentir mejor acariciándolo, lo mire de reojo se parecía tanto a mí, que me asustaba la sólo idea de imaginarme que tendría que vivir lo mismo que yo, me daba lástima.
- No sabía que estabas casado- hablo de pronto sacándome de mis pensamientos, suspire cansado mientras me acomodaba en su cama.
- es porque cuando me case apenas tenía 13 años, sino mal recuerdo mi madre aún no se había casado con tu padre - susurre mientras apretaba con fuerza mis manos.
- Te gustó ya sabes el.. Rey Jos.. etto Ren - pregunto sonrojado lo que me hizo reír, tal vez por su cabecita aún rondaba lo que había visto cuando entro a la habitación.
- Para serte sinceró odio a Ren - dije y pude ver la tristeza florecer en sus ojos- pero no negaré que lo ame como nunca amare otra vez - dije mientras me perdía en mis pensamientos, era su culpa que mi familia fuera destruida y que mi padre hubiera muerto.
- Pero el parece que te quiere - susurro y me moleste, me levante y lo empuje este se asustó por mi actitud así que me controle.
- lo siento pero tú no sabes cómo realmente es el - dije mientras recordaba cómo me tomaba a la fuerza y me hacía suyo.
- aquí están - hablo Sebastián mientras entraba a la habitación seguido del Rey, este nos miraba enojado tal vez porque no me había encontrado en su habitación.
-¿Qué pasó? - pregunté ignorando la mirada de Ren, Sebastián sonrió mientras se acercaba hacia mi hermanito.
- Encontraron a David - murmuró y no pude evitar que la alegría se apoderar de mis labios, los cuales formaron una sonrisa.
- ¿Donde esta?- pregunto Daniel mientras se levantaba, se notaba que no había comido pues estaba más flaco, lo que me hacía preocupar y no era el único.
- Aún no han llegado a tierra, lo encontró uno de los buques del Rey José, pero ya viene en camino- susurro Sebastián.
- Gracias- dijo con un sonrojo Daniel mientras tomaba de las manos a mi Ren, no sé porque me molesto un poco, pero siguiendo el ejemplo de mi hermanito me acerque.
- gra..aci...as- tartamudee mientras me ponía al lado de Daniel al igual que el con las mejillas sonrojadas, es que es vergonzoso.
- De nada - respondió aun cuando su mirada me martillaba el cuello, vi como Sebastián algo enojado tomaba de las manos a Daniel alejando lo del rey.
- Bueno ya lo encontraron y será mejor que comas ya que no lo has hecho muy bien estos días- susurro mientras se llevaba a Daniel, quien solo se quejaba de no querer comer.
- Al fin solos - susurro Ren mientras me tomaba de la cintura, no me negué sabía que si lo hacía lo haría enojar y eso no me convenía.
- En verdad encontraron a David - dije mirándolo directo a los ojos, como me gustaban y a la vez odiaba esa mirada.
- Si aún que para serte sinceró está muy mal, no ha comido nada por una semana y esta deshidratado, al parecer huyó de los piratas y se lanzó al mar en un pequeño bote- susurro aún sin despegar su mirada de la mía.- Pero está vivo- gruñí mientras clava mis uñas en sus fuerte brazos, este asintió sin soltarme, contemplando mi situación.
- No ha cambiado nada, sigue siendo ese mismo chiquillo que no piensa en consecuencias y hace cosas demasiado temerarias a diferencia de ti, que eras siempre el sumiso el que aceptaba todo y recibía todo no es así Samuel- dijo lo que me hizo agachar la cabeza.
- No quiero hablar de mi pasado, por favor Ren no es el momento - pedí mientras mordía con fuerza mi labio inferior.
- Tarde o temprano tendrás que enfrentarlo, no puedes escapar por siempre y no puedes echarme la culpa de todo lo que paso - gruñó mientras me apretujada con más fuerzas.
- Cállate no quiero oírte- empecé a gritar mientras trataba de liberarme no quiero aún no por favor.
- Está bien por los momentos actuaré como si nada aun que tú sabes muy bien que toda estas Mierda... lo que nos pasó a los dos, tiene nombre y eso Samuel es tu culpa por permitir que esto sucediera- gruñó mientras me besaba con fuerza.
- Te odio- grite mientras lágrimas salían de mis ojos, no quería recordar lo no deseaba hacerlo quería morir antes de pensar que él tenga razón.
- y yo te amo Samuel - dijo frío para soltarme y alejarse quise detenerlo quise decirle que se quedara aquí, que no se fuera pero no pude, sabía que si permanecimos juntos seguiríamos discutiendo el queriendo que recapacitara, pero yo no puedo si admitiera ello sería como romper el último eslabón que me permitía seguir a flote.
- David por favor regresa te necesito - susurre a la nada mientras caía al piso, abrace mis piernas con mi brazos y colocando me en una posición fetal comencé a llorar con más fuerza, mientras imágenes llenas de sangre se arremolinaban en mi mente.
bueno hasta aqui el capi ya saben no actualizo hasta que halla actualizado las demas, gracias por leer espero y les guste conti dos veces seguida a que es justo... bueno me voy sayoo...xDD
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Ceniciento
NouvellesCeniciento es la historia de un joven que es maltratada por sus crueles hermanos, luego es rescatada por su hada madrina que le ayuda ir al baile, y luego se casa con su adorable príncipe azul. Si claro como no esa historia es una vil mentira...