JUEGO DE GEMELAS JUSTIN Y TU

Capitulo 1 (Editado)

NARRA SCARLETT:

Me miró al espejo y veo el moretón que me a dejado Justin en la mejilla, una lágrima resbala por mi mejilla al recordar como fue que esto paso y como termine así.

(Flash-back)

Estaba llegando a casa después de ver al detective privado que contrate para encontrar a mi hermana, ya han pasado 17 años y aun no puedo dejar de echarme la culpa por su desaparición, antes de entrar a la casa me limpie las lágrimas que sin darme cuenta habían salido, siempre que pienso en Hanna no puedo evitar llorar, trate de tranquilizarme ya que a pesar de todo nunca le e contado a Justin nada y no queria que me viera llorar aunque se que eso le daría lo mismo.

Cuando entre vi a Justin sentado en la sala como si estuviera desesperado, de pronto volteo y nuestras miradas se cruzaron, rápidamente se levantó y se puso enfrente de mi, por su cara sabia perfectamente que estaba furioso y también sabia lo que estaba a punto de pasar, golpes.

-¿DONDE CARAJOS ESTABAS?- dijo Justin gritando y haciendo que yo retrocediera dos pasos, verlo así me provocaba mucho miedo.

-Yo...estaba...con una amiga- dije algo nerviosa, mierda, nunca e sido buena para mentir.

-NO ME MIENTAS IDIOTA- este me tomo fuertemente del cabello haciendo que yo cayera de rodillas al suelo -¿CREES QUE SOY ESTÚPIDO O QUE? SE QUE ESTABAS CON EL MAL NACIDO DE TU AMANTE- vi sus ojos los cuales estaban más que oscuros de la rabia.

-Justin porfavor suéltame que me haces daño- dije llorando e intentando hacer que me soltara -No es lo que tu piensas- el soltó una carcajada carente de humor.

-ERES UNA MALDITA MENTIROSA- yo solo lloraba -Y APARTE DE MENTIROSA ERES UNA PUTA- dijo dándome una bofetada en mi mejilla izquierda haciendo que cayera acostada al suelo, honestamente no me dio ni tiempo de poner las manos, de pronto me soltó dos patadas en el estomago haciendo que más lágrimas salieran de mis ojos -LARGATE A TU HABITACIÓN NO TE QUIERO VER HIJA DE PUTA- sin pensarlo dos veces subí corriendo las escaleras no me importaba el inmenso dolor que sentia, lo que me importaba era escapar de el antes de que me dejara peor y sabia que era capaz.

(Fin Del Flash-back)

La verdad es que ya no lo soportó más, desde que me case con el no e recibido más que golpes y humillaciones y lo peor es que no entendia porque, de no ser porque quiero encontrar a Hanna ya me hubiera largado muy lejos de aquí, en cierta forma creo que por eso también me merezco que Justin me trate así, de no ser por mi ella estaria conmigo, pero no importa porque no descansare hasta encontrar a mi hermanita y en cuanto aparezca me iré muy lejos para ya no tener que soportar a esta bestia disfrazada de hombre.

-ESTUPIDA VEN AQUÍ MALDITA PUTA- grito Justin, por mi bien más me valía hacerle caso, pero esta situación no será por mucho tiempo, me limpie las lágrimas ya que no quería verme más patética de lo que ya soy y así salí de mi habitación para bajar a la sala con mi esposo.

NARRA ________:

Estaba acostada en mi cama como siempre llorando, a pasado un año desde que el cruel destino me arrebato al amor de mi vida y de la peor manera, desde ese día no salgo de mi habitacion más que para comer, recuerdo muy bien ese maldito día dónde todo mi mundo se fue a la mierda, jamás imagine que algo tan horrible nos fuera a pasar a los dos, yo sabía perfectamente que su trabajo era peligroso pero nunca le había pasado nada hasta ese día donde todo en mi se rompió.

Estaba tan sumida en mis recuerdos de cuando el y yo eramos muy felices que no me di cuenta en que momento mi madre entro a la habitación.

-______ amor ¿no vas a venir a cenar?- dijo mi madre con su típica voz angelical.

-Si enseguida voy- dije con la voz quebrada de tanto llorar y es que no podia evitarlo.

-Cariño mañana voy a ir a la casa de tu abuelo a ver a tus tíos- la volteé a ver y la fulmine con la mirada ya que se lo que me quiere insinuar, se que ella no tiene la culpa de mis desgracias pero la verdad me molesta que siempre intente hacer que vuelva a mi vida "normal" -Digo para que te despejes y veas a la familia, todos están preocupados por ti- para lo que me importa, pensé.

Todo eso me molestaba ya que sabía que a mi familia yo le importaba un carajo, en ese momento no pude más y explote.

-QUE NO ENTIENDES QUE NO QUIERO SALIR YA ESTOY HARTA DE QUE TODOS QUIERAN "AYUDARME "- dije haciendo comillas con los dedos -Si de verdad quieren ayudarme solo déjenme sola con mi dolor, es lo único que necesito- dije con lágrimas en los ojos.

-Porfavor ________ ya a pasado un año, a Josheph no le gustaría verte así, recuerda que el siempre decía que el quería que tu fueras feliz pasara lo que pasara- no porfavor porque tenía que meter a Josheph en esto -Además te recuerdo que el doctor dijo que tenias que salir por lo menos una hora todos los días así que no te lo estoy preguntando te estoy avisando que mañana saldremos- dijo cerrando la puerta obviamente más que molesta, nunca había escuchado a mi madre así

Hace unos días mi madre me llevo al doctor y le dijo lo que era mas que obvio que estaba deprimida y que si no salia por lo menos una hora todos los días podría morir de tristeza, en ese momento a mi me dio mucha risa pero a mi madre no tanto, ella es de esas personas que se lo toman todo muy en serio, honestamente en ese momento no me importaba morir para mi seria mejor así podria estar con el amor de mi vida y con una de las personas más importantes de mi vida, mi padre

El murió cuando yo tenía 9 años debido al cáncer de pulmón y desde ahí no e sido la misma y ahora que Josheph también murió para mi ya nada vale la pena, a pesar de que tengo a mi madre pues ella casi siempre se la pasaba metida en la oficina trabajando, aunque debo admitir que ahora intenta estar más tiempo conmigo pero más que nada por miedo a que vuelva a cometer otra locura, pero bueno para mi Josheph y mi padre eran las personas más importantes en mi vida y el destino me las arrebato y fue ahi cuando se vino la pregunta de siempre ¿como querer seguir viviendo si mi vida es una mierda?

Sin mas me levante de la cama y salí de mi habitación ya que sí no lo hacia mi madre seria capaz de venir por mi y honestamente ya no tenía las fuerzas suficientes para discutir con ella, en cuanto llegue al comedor me sente y me puse a cenar como siempre, en total silencio.