Hogar.

Esperanzas.

Era un sentimiento crudo, como la espera de algo grande. Estaba esperando que me tomaras con tus manos, y que me sonrieras. Que me dijeras que me quieres. Se asemejaba a cuando tenía un nudo en la garganta porque algo me ponía nerviosa. Era algo hermoso y tierno.
Pues esperaba un abrazo y un beso, como en las películas.
Estaba ahí, sentada en la banca, esperando a que llegaras de repente a tomarme con fuerza del brazo y cuando yo protestara me callaras la boca con un beso, de esos que me dabas cuando estabas desesperado.
Sentía un enojo radical, y una impotencia grandísima, como cuando quieres y no puedes. Trataba de llamar tu atención, pero no estabas.
Era un sentimiento amargo y vulgar, al mismo tiempo vil e inocente. Aun no me explico como supere el esperar tanto de ti.
Aun no me explico como supere el no tener nada de ti.