Capitulo 22

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Hola lindas personas que siguen por acá leyéndome en cada actualización, dejare primero esta nota para explicarles cómo se narrara este capítulo.

En unas partes aparecen letras en negritas esto quiere decir que Alice está hablando en el presente y en el resto aparecerán textos en estilo cursiva aquí estará hablando es pasado, o más bien recordando lo que paso.

Espero haberme explicado bien, una vez más gracias por leer esto, si alguien quiere que le dedique algún capitulo, decirme acá en los comentarios y con gusto se los dedicare.

Bueno creo que esos es todo, espero que les guste el capítulo.

Besos y abrazos mentales *-*


Atte: Lu

Г=

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Los pies, las piernas, la cadera, en resumen todo me dolía.

Sin duda alguna caminar no era mi pasatiempo favorito, prefería estar recostada en mi cama sin hacer ningún desgaste físico.

Por segunda vez en el mes tuve suerte y ahora estoy salva y un poco sana, regresando a casa, caminando.

Salva porque sigo viva y no tan sana por mis dolencias.

Después de conocer a Val y su amigo-novio, decidimos saltarnos las clases restantes para relajarnos, no lo negare me sentía un poco asustada de no saber qué pasaría, las paranoia seguía viva en mí y nuevamente ideas locas y aterradoras, de terminar muerta en ese "paseo", no abandonaban mi cabeza.

Además tomar tanto hace daño, are nota mental:

"Jamás poner tanto hielo en una bebida"

Sufrir de cerebro congelado es lo más bello en el planeta tierra. Nótese mi sarcasmo. A causa del frio la pequeña herida que me hice en la frente me palpitaba

El agua de maracuyá, ¿Qué? ¿Creyeron que tome alcohol? Para nada, que Val preparo estaba como 100 grados bajo cero, está bien exagere un poco, pero enserio estaba horriblemente fría.

En realidad si me ofrecieron alcohol, pero como lo dije anteriormente, no tomo, también me ofrecieron mariguana, según ellos para ambientarnos un poco, pero al final también la rechace ignorando las molestas insistencias de Val y de Billy.

Y por fin volviendo al tema, pasamos un rato en su cuarto, charlando y viendo una película.

Fue agradable conocer gente nueva, lugares nuevos y pisos nuevos. Si pisos nuevos, después de un rato, se ofreció a mostrarme su casa, bajamos al garaje y tarde ni perezosa me fui de bruces hacia el suelo, y por primera vez en la semana tuve suerte, ya que caí en un bonchesote de tela, hasta quede a gusto, por poco y me quedo dormida, lo único malo fue que, caí encima de un perrito, lo aplaste tanto que sus chillidos no se escuchaban.

Típico pisar a un perrito y sentirte la peor persona del mundo, pero es este caso yo me sentía como una gorda y fea ogra, ya que no lo pise si no que le aplaste.

-MIERDA!!- literal, el cachorro me cago en la mano. Deje de caminar y busque asiento en una banca del parque para limpiarme la popo.

No culpare al cachorro, es mi culpa después de casi asesinarlo.

Al momento de levantarme de ese cómodo bonche, el cachorro salió disparado, chillando como loco, dando vueltas en el piso y cagando por todos lados, creo que estoy demasiado gorda y mi peso le afecto en extremo, a juzgar por el comportamiento del perrito creo que estaba delirando.

Al despertarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora