CAPÍTULO 2: Aspecto

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Lea llegó a casa de Rick, tenía una gran puerta de entrada y un pequeño jardín adornado con árboles florales.

Llamó a timbre y Rick le abrió, los rayos de sol se reflejaban en el pelo rubio de Rick, y sus ojos brillaban como nunca.

Otra vez con su típica sonrisa- pensó Lea.-

-Hola, ¿Qué tal?-Le dijo Rick. Estaremos solos en casa, mis abuelos han salido a dar un paseo.

¿A qué viene lo de que estaremos solos?-dijo Lea para sus adentros. En el fondo... lo prefiero así.-

Pasaron hacia un gran salón que conectaba con una cocina en la que cogieron vasos y una botella de agua, tras esto subieron al cuarto de Rick.

-Que ordenado está todo-dijo Lea.-

-Me gusta tener mis cosas ordenadas- contestó Rick riéndose.-

Ambos se pusieron a hacer el trabajo, y decidieron hacer un descanso cuando pasó un rato.

Allí estaba otra vez frente a frente, mirándose a los ojos, Lea interrumpió el silencio.

-Tienes unos ojos muy bonitos Rick, son de un profundo color turquesa que hace que no pueda parar de mirarte.

-Gracias...-contestó ruborizado.

Fue entonces cuando Rick se abalanzó sobre los labios de Lea y este le correspondió.

¿Por qué esta sensación?¿De verdad me gusta un chico?-pensaba Lea.-

Lea llevado por la pasión del momento colocó a Rick contra la pared y lo besó una y otra vez.

Tras esto Rick le indicó a Lea que se fuesen a la cama. Fue entonces Rick el que se fundió en un beso con Lea, esta vez Rick metió la lengua en la boca de este, al principio Lea no estaba cómodo pero Rick supo encaminarlo y ambos sentían algo que les hacía que no pudieran parar de besarse.

Un ruido hizo que parasen, la puerta se había cerrado.

-Mis abuelos.-

Lea se quedó fijándose en Rick y dijo: Rick... tú...

Rick le calló la boca con un beso y dijo: No hace falta que digas nada, esto también es nuevo para mí.

Esto alivió bastante a Lea.

-Bueno mañana terminamos el trabajo en mi casa-añadió Lea.-

-Como quieras.-

De camino a casa la luna ya había salido y el pelo castaño de Lea se movía al son del viento.

¿Por qué Rick me hace sentir así?. Nunca había sentido esto por nadie... Es tan especial... Es único...

Llegó a casa, cenó y se subió a su cuarto a pensar.

-¿Esto está mal? Es un chico y a mi me gustan las chicas pero... Hay algo en él que hace que quiera acercarme, besarle, abrazarle, pasar a su lado mi tiempo...

Lea se quedó dormido pensando en Rick.


El despertador sonó.

-¡OH NO! Otra vez tarde.-

Cuando llegó a clase Rick le esperaba con su típica sonrisa.

-Otra vez tarde-le dijo y se le escaparon unas carcajadas

-¡CÁLLENSE!- decía el profesor.-

Llegó el recreo y Lea fue al cuarto de baño a orinar, a Lea no le gustaba que nadie lo mirara así que se metió en un baño con puerta. Alguien le interrumpió tocando la puerta, era Rick

-Soy Rick, ¿Puedo pasar?.-

-Un momento.- contestó

Cuando se disponía a salir Rick empujó a Lea hacia dentro del baño lo sentó en la tapa del inodoro y le dió un beso.

-Ahora no es el momento Rick, nos prodrían ver.-

-Me da igual que me vean, quiero besarte.

Alguien abrió al puerta del cuarto de baño, antes de que entrara ambos salieron de donde estaban y volvieron a clase.


Pasaron las horas y era la hora de irse a casa, Lea y Rick se despidieron y ambos se fueron con una sonrisa en la cara.

Era la hora acordada y Rick llamó a la puerta, en cuanto se cerró la puerta se dieron un beso y subieron a terminar el trabajo.

-Rick, hoy también estamos solos- dijo Lea.




El chico de ojos turquesa (YAOI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora