Vaya semanita. Tres exámenes, tres suspensos. Sí, todavía sigo dándole vueltas a la tarde del viernes pasado. Por consiguiente, paso horas mirando absorto a la ventana en vez de estudiar, que es lo que realmente tendría que hacer. Siempre he sido de buenas notas, pero últimamente noto que me cuesta mucho más concentrarme delante de los libros. Ya puedes imaginar por qué...
Pero bueno, no te he llamado en toda la semana porque no ha habido novedades. Las mismas conversaciones, los mismos problemas, el mismo todo. Pero hoy, sábado, va a venir a ver a una amiga común, por lo que quedaremos todos juntos. No sé cómo voy a afrontar este encuentro, si seguiré limitándome a continuar en la friendzone o si daré el paso de declararle mis sentimientos. Pero dudo que hoy sea el día; después de la decepción con Red, no creo que esté de humor.
¿Lo que ha pasado con Red? ¡Mierda, se me olvidó contartelo! No me acostumbro a tenerte por aquí todavía. Y encima te he dicho que no había novedades. Si cuando te digo que últimamente estoy disperso, te lo digo en serio... Pues bien, resulta que Red le ha dicho a una de las mejores amigas de N que sólo la ve como a una amiga. No me puedo creer la suerte que tengo. Sé que estoy siendo un amigo nefasto alegrándome de esta desgracia, pero soy humano y no te voy a mentir. Como es obvio, ha estado destrozada toda la semana. Creo que incluso ha hecho pellas un par de días. Estoy impaciente por ver cómo está hoy, pero hasta esta tarde no la voy a ver, así que será mejor que me centre en los deberes
Vale, estoy listo para que nos vayamos. Me he vestido con mis "mejores galas", que vienen a ser unos pantalones negros y una camiseta también negra con una camisa a cuadros grises y blancos encima, que en mi opinión me sienta muy bien. Llevo mi colonia de siempre, e incluso, y sin que sirva de precedente, me he peinado el flequillo con el secador. Casi ni me reconozco delante del espejo. Casi diría que parezco guapo y todo... Sin contar con la sonrisa de idiota que me viene acompañando todo el día. Maldita N, ni siquiera es consciente del efecto que provoca en mí. Pero centrémonos. Que no se me olviden la cartera ni el móvil (no sería la primera vez). Venga, vayámonos, que nos está esperando mi amiga María, de la que te hablé antes.
[ -Adiós, mamá, me voy.
-¿Llevas la cartera y el móvil?
-Que sí, ¿cúando me los he dejado yo?
-Mira, no me hagas hablar. No vuelvas muy tarde, ¿vale?
-Vale, mamá. Ah, y no me esperes despierto.
-¿Qué...? (Clonc) ]
Pobre de mi madre, desde que se fue mi padre se toma mucho más en serio mi seguridad. Y a mí sólo se me ocurre bromear. Además, creo que le recuerdo a él, lo noto en la forma en que me mira a la cara. Ojalá no nos hubiera dejado nunca...
Bueno, ésta es otra parte, que no es la que nos atañe ahora. El día en el que todo esto pase, si sigues conmigo (cosa que dudo, pues soy muy cargante) te la contaré. Pero centrémonos en lo que viene ahora, que no es poco.
- ¡Hola, María!
- ¡L, qué guapo vas! Si te has peinado y todo. ¿Qué celebramos?
- Que voy a pasar la tarde con las dos chicas más guapas de Zaragoza. ¿Te parece poco?
- Bueno, bueno. Tranquilo, don Juan. Lo te olvides que una ni siquiera es de aquí.
- Entonces, con las más guapas de Zaragoza y alrededores.
-Calla, tonto, y ponte en marcha. Como N llegue a la estación y no estemos allí, ya podemos huir del país.
[ ¿Soy yo o María se ha puesto roja al llamarla guapa? Espero de corazón que no. Valoro mucho mi amistad con ella, pero nunca se me ha pasado por la cabeza dar un paso adelante. No te engaño, la chica es guapa, pero es el tipo de persona con el que sabes que una relación no cuajaría. Además, sólo tengo ojos para ti, N...Vaya frase sentimental. No me reconozco. ¿Realmente ella me estará cambiando? ]
- Mira qué pareja más bonita hacéis.
- Cállate, N.
- Si hasta respondéis a la vez. Que monos... ¿No se os habrá ocurrido empezar a salir sin decírmelo?
- No seas tonta, si L es todo tuyo.
- Era una broma, María, relájate. Bueno, ¿qué planes tenemos?
- Simplemente andar sin rumbo y picar algo por ahí.
- Qué profundo, L. Venga, en marcha. Perdona por la broma de antes, María.
- ¿Qué? Ah, sí, no te preocupes, N. También mi reacción ha sido desproporcionada.
[ Qué tensión... Menos mal que N ha cambiado de tema. Podría haberse armado muy gorda. ¿Qué diablos le pasa a María? Al final han terminado fundidas en un abrazo pero su actitud ha sido extraña. Puede que se haya percatado de mi forma de mirar a N. Oh dios, me parece que al final sí que le voy a estar gustando a María. Tendré que hablar seriamente con ella de este tema. Pero no hoy. Hoy sólo quiero disfrutar de la compañía de mis dos mejores amigas.
(Sí, de una más que de otra. Cállate, se supone que estás de mi parte, ¿no?) ]
![](https://img.wattpad.com/cover/50393642-288-k915478.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Ella
RandomUna historia para aquellos que conocieron a esa persona que nos fascina, que como una droga te hace dependiente de su contacto. Si sois uno de ellos, lo siento, pero bienvenidos