La Bella Y la Bestia{Segunda Temporada}

Capitulo 19

-¡Papi! ¡Papi! ¡Quelo uno de eso! –Grita Megan señalando un barrilete.
Geoffrey observa hacia arriba donde hay montones de barriletes volando. Están todos atados a un carrito que lleva un hombre. Baja la mirada y Megan le extiende los brazos. La sienta sobre su cadera y agarra a Austin con la otra mano.
-Yo tamben quelo uno de esos –dice Ashley desde los brazos de Caroline.
Así que Geoffrey compra uno y deben compartir. No es por el dinero, sino porque deben aprender a compartir como hermanos. Justin les enseña a remontarlo y después los hace volarlo sobre el mar mientras me da un descanso. Me tiro de espaldas a tomar sol. A Caroline la hemos dejado que se vaya a observar tiendas y comprar lo que le apetezca. Hoy, Geoffrey y yo cuidaremos de los niños, no siempre necesitamos una niñera para ellos.
La gente de aquí habla en español y nos miran raro cuando hablamos en ingles. Chile es lindo, muy lindo. Tiene montaña y a la vez mar, eso es lo que lo hace atractivo. Nunca en mi vida había estado aquí y me siento muy agradecida de que a Geoffrey se le haya ocurrido esto de traernos de vacaciones aquí. Los niños están felices con el viaje, con el mar, con las montañas, con las cometas, los helados, la gente, la comida y bueno, creo que con todo lo que se les cruce. Geoffrey está feliz de vernos feliz y yo coincido en parte con él. Es bueno tomarse un tiempo con la familia, alejarse del trabajo y de lo cotidiano por un tiempo.
-Helados, helados.
Y sé que los niños ya deben de estar pidiendole a Geoffrey que les compre uno.
-¡Mami! Mira, mami –Austin se tira sobre mí y me muestra su muñeca.
Tiene una pulsera hecha con hilos de cera. Es negra con amarillo, verde y rojo. Está emocionado y me cuenta que se la han comprado a un hombre que vendía miles de esas.
-Megan y Ashley tienen una pulsera rosada en la pierna.
Sé que se refiere a una tobillera en el tobillo, por eso lo tiro a la arena y le hago cosquillas. Ahora una de las niñas se tira sobre mí y luego la otra. Me río divertida, pero cierro los ojos para que la arena no me entre y me lastime.
-Ya, ya, ya –dice Geoffrey riendo-. Mami ya ha tragado suficiente arena.
Ashley se ríe divertida y se pone de pie. Me siento en la lona, que está llena de arena, y veo a Geoffrey que está parado observándome. Tiene unos lentes oscuros y el cabello alborotado. Mierda, mi marido si que es sensual.
-Mira, mami –dice Megan mostrándome la tobillera rosada.
-Oh, pero que bonita –le digo con dulzura.
-¿Vamos al agua? –Pregunta Geoffrey.
Ashley pega un grito de felicidad y Austin se ríe de ella. Megan sale corriendo hacia el mar, pero Geoffrey la detiene y la toma en brazos.
-Primero lo primero, nadie se aleja de mamá o papá. ¿Entendido?
Los tres niños asienten. Me pongo de pie y me sacudo la arena de todos lados. Mi bikini es multicolor la parte de arriba y negra la parte de abajo. Las dos niñas tienen trajes de baño enterizos, Meg celeste y Ashley rosado. Geoffrey tiene un traje de baño blanco con líneas azules y rojas. Y Austin tiene uno verde con negro.
-¡Al agua! –Grita Megan estirando sus brazos al cielo.
Geoffrey baja a la niña y la deja sobre la arena. Acomodamos las cosas en su lugar y después nos vamos los cinco juntos al agua.
-¡A la p*ta madre!
El agua está helada, parece recién descongelada. Geoffrey se ríe mientras Megan tirita.
-Es hasta que nos acostumbremos. Vamos, ven aquí Aust.
-Está fría –se queja.
Así que nos quedamos un rato en el agua para acostumbrarnos como dice Geoffrey. Pero para mí, sigue igual de fría. Nos ponemos a jugar a la orilla con los niños. Austin tiene dos baldes rojos y hacemos castillos con ellos. Ashley se quiere poner de pie y cae sobre el castillo de Megan. Y la niña que no es enojona, se cruza de brazos y comienza a llorar. Ashley se siente culpable y también comienza a llorar. Megan le tira arena en los ojos.
-Ya, basta –dice Geoffrey enojado y pone a Megan de pie.
-Ella fe –dice Megan culpando a su hermana.
-No, ella lo hizo sin querer y tú le tiraste arena.
Geoffrey le toma en brazos y se mete al mar con ella para quitarle la arena del traje de baño. Austin mira a lo lejos mientras hace morros. Aunque se quede callado, sé que le duele cuando sus hermanas pelean y arruinan la diversión. ¿Pero que se le puede hacer? Son niños.
-Cuando venga papi le pides que te quite la arena en el mar y después podemos irnos al hotel –le digo a Ashley.
-No quiero ir al hotel con Megan.
-Hija, ella es tu hermana.
Ashley frunce el ceño y se frota los ojos. Tiene arena en todos lados. Geoffrey vuelve y deja a Megan a mi lado. Toma a Ashley en brazos y le da un beso en la mejilla.
-No llores, princesa. Ahora iremos por helados.
Ashley tira los brazos al cuello de su papá y se refugia en el hueco de su hombro. Megan me abraza porque tiene frío.
-¿Yo también voy a quitarme la arena en el mar? –Pregunta Austin pegándole a una torta de arena.
Asiento y él me sonríe. Creo que Austin necesita un poco más de atención, pero nosotros no sabemos cómo dársela.
-Yo quelo de vainilla y chocolate –dice Ashley mirando a Geoffrey desde abajo.
-Yo sempe pido eso, ella me copia, papá –se queja Megan.
Cierro los ojos porque ya son agotadoras. Caroline se ha ido al hotel con nuestras cosas y ahí estamos nosotros, por tomar un helado. Geoffrey ignora la queja de Megan.
-¿Tú de qué lo quieres, Aust? –le pregunta.
-De lo mismo que mami –responde pegándose a mi pierna.
Sonrío tiernamente cuando me mira desde abajo. Geoffrey me observa esperando saber qué voy a querer yo.
-Frutilla y chocolate.
Así que pedimos como cada uno quiere y luego nos sentamos a las afueras del lugar. Está haciendo algo de frío, el sol ya se está yendo y la noche va cayendo. Las niñas tienen buzos iguales de Mickey y Austin tiene una campera del hombre araña. Yo tengo una blanca y Geoffrey un buzo de colores.
-Copiona –dice Megan por lo bajo.
-Ya basta –digo fingiendo enojo.
Austin está entre Geoffrey y yo de un lado. Megan y Ashley están al lado enfrente de nosotros.
-Que agotadoras pueden llegar a ser –murmura Justin cansado.
Asiento lentamente mientras le paso una servilleta a Austin que se va a manchar la campera con chocolate.
-Ashley, no me toques –dice Megan frunciendo el ceño.
-Solo taba setandome ben –responde ella.
-Pero me pegate.
-No es cieto, solo me taba setando ben.
-Tonta.
Los ojos de Ashley se llenan de lágrimas.
-Megan, vas a quedarte sin regalos si tratas así a tu hermana –le dice Geoffrey intentando no sonar tan duro.
-Pero si me moleta –se queja.
-Solo se estaba acomodando. Ya terminen con el helado así nos vamos a casa
Después de cenar, Geoffrey se va a nuestra habitación y yo voy a la de los niños para asegurarme de que todo esté en orden antes de ir a dormir. Megan y Ashley han estado peleando desde que Ash sin querer se ha caído en el castillo de Megan. Aunque es Megan la que pelea a Ashley y así. Austin ya está dormido en su cama y Ashley va en el proceso. Megan está en el baño. Caroline está haciendo una llamada.
-Megan, a la cama. Tengo que irme, vamos.
Megan abre la puerta del baño de golpe y sale de allí con el ceño fruncido. Su actitud de autosuficiencia y enojo me hacen dar ganas de pegarle un par de bofetadas. Se acuesta en la cama y se tapa todo el cuerpo, incluyendo su cabeza. Así que me pongo de pie y beso la mejilla de mi dormido hijo, luego la de Ashley que acaba de quedarse dormida y a Megan la ignoro. Le hago una seña a Caroline de que me voy y ella me sonríe y saluda con la mano.
-Megan está insoportable –digo cuando entro en la habitación.
Geoffrey viene saliendo del baño con la toalla amarrada en la cadera. Junta sus labios en una fina línea y asiente mientras se encoge de hombros.
-Mañana veremos que hacer con ella.
-Austin odia cuando ellas dos pelean.
-Yo también odio cuando pelean.
-Lo sé, pero tú no te pones a llorar.
Se ríe divertido y deja caer la toalla en el suelo para colocarse los boxers.
-¿Nos olvidamos de las peleas de los niños? –Alza una ceja.
Sé a que se refiere y le sonrío con picardía.
-Solo si me atrapas.
-Pues comienza a correr, ______ -dice mi nombre en diminutivo.
Es imposible aburrirse teniendo una familia como esta