3.12 "Clear"

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LIMPIO

Solté un suspiro viendo el auto donde iban Carl, papá y Michonne en busca de comida y municiones perderse en el camino. Sabía que estarían bien y que volverían sanos y salvos, pero no dejaba de preocuparme. Yo nunca dejaba de preocuparme.

Me di media vuelta caminando un par de pasos para entrar a la torre de guardia. Subí los escalenos a paso rápido, la herida estaba mucho mejor y ya no dolía para nada. Me habían quitado los puntos hace un par de días y ya podía andar con total normalidad.

Cuando llegué al final de la escalera y abrí la puerta me detuve de forma abrupta encontrándome a Daryl en el lugar, sin su jodida camina. Mierda. Carraspee nerviosa, dándole una mirada para nada disimulada a ese cuerpo, que hace un par de días podía tocar con total libertad. Idiota.

—Lo siento —susurre con vergüenza pasando por su lado, pero me detuvo tomándome del brazo. Cerré los ojos con fuerza unos segundos antes de girarme hacia él. Tan cerca.

Mire sus ojos que se notaban nerviosos y un tanto asustados tal vez. Eran azules, como un océano calmo esperando que en cualquier momento la tormenta se desatara con cualquier mínima situación. De todas formas, sabía que con la peor tormenta del mundo puesto en ellos seguirían siendo la causa de mi tranquilidad.

Solté un suspiro tembloroso y me acerqué un poco más a él acercando mi mano tímidamente a su abdomen. Roce mis dedos de forma lenta y tímida como si danzaran sobre su piel. Lo escuche silbar el aire entre sus dientes y levante mi cabeza encontrándome con su cara demasiado cerca de la misa. No dejo pasar mucho tiempo juntando nuestros labios.

Mis manos con rapidez rodearon su torso abrazándome a él, sus manos tomaron mi cara profundizando mas el beso, encajando nuestras maneras de forma perfecta. Solté un suspiro sobre su boca, sus brazos rodeando mi cintura juntando mucho más nuestros cuerpos. Cuanto lo había extrañado.

Me aleje unos centímetros de él, tomando su cara para que no se alejara. Mi lengua salió de forma lenta para poder juguetear un poco con sus labios, sus ojos se volvieron un poco mas oscuros con mis acciones y su lengua salió también para encontrarse con la misma. Un juego lleno de provocación que lo hizo gruñir.

Me separé de él, sin dejar de ver sus ojos y de pronto me sentí demasiado avergonzada bajo su mirada.

—Lo siento —susurre sintiendo mis mejillas arder

—Oye no —susurro de la misma forma dejando un corto beso sobre mi frente —Esta bien. Jazmín, yo lo siento. No volveré a irme, nunca mas nena. Nunca más.

—Lo prometes

—Lo prometo

Junte nuestros labios de nuevo enredando mis dedos en su largo cabello. Solté un jadeo cuando sus manos bajaron a mi trasero y dio algunos pasos haciéndome retroceder, arrinconando mi cuerpo contra la pared, paso su lengua por mi labio inferior antes de introducirla en mi boca. Me encantaba cuando me besaba de esta forma, mierda, me gustaba mucho.

El calor comenzó a tomar mi cuerpo, la ropa comenzaba a molestar, así que empuje un poco su cuerpo para sacar mi remera de forma rápida. Su boca dejo besos por mi mandíbula bajando a mi cuello, succionando en partes donde sabia me volvía loca. Suspire dejando mi caer mi cabeza hacia atrás, dándole mas acceso. Justo ahí.

Sus manos acariciaron mis caderas lentamente, bajándolas por mis piernas para tomarme con facilidad. Sin dejar de besarme camino un poco dejándome suavemente en las mantas y cojines que había en el lugar, necesarias para cuando necesitábamos descansar en alguna guardia.

Solté un gemido separándome de el para mirarlo. Su cuerpo se posiciono entre mis piernas y mordí mi labio con duda. Se suponía que lo haría sufrir ignorándolo un tiempo, pero aquí estoy, solo en sujetador con encima de mi cuerpo. Suspire cerrando mis ojos, eran tan fácil cuando se trataba de él.

—¿Qué pasa? ¿No quieres? —pregunto preocupado

—Quiero, pero —mordí mi labio tratando de esconder la risa ante la idea que se me vino a la cabeza —Estoy embarazada

Hice una mueca preocupada cuando vi como el color abandonaba su cara, oh por Dios ¿iba a desmayarse? Mordí mi labio aguantando un poco mas la seriedad que había conseguido, pero su cara de sufrimiento me hizo soltar una fuerte carcajada. Daryl me miro confundido, haciendo que mi risa se hiciera más fuerte.

—Era broma —pese mis manos en sus hombros —Dios mío, tu cara era un poema. Fue muy divertido.

—No lo fue —frunció el ceño tomando mis manos de forma brusca para dejarlas a cada lado de mi cabeza.

Volvió a besarme y no tarde en aferrarme a su cuerpo nuevamente. Soltó un suspiro dejando mis manos para llevar las suyas a mis senos comenzando a tocar, como solo el sabía tocar. Soltó el broche delantero de mi sujetador tomando uno de mis pezones con sus dientes, gemí llevando mi mano a su nuca, rasguñando suavemente. Quería estar con él, así, desnudos, acariciándonos siempre.

Levante la parte inferior de mi cuerpo, frotándome duramente contra el sintiendo como su miembro se endurecía cada vez más. Soltó un jadeo volviendo a mi boca, besándome con mas ferocidad, chupando y mordiendo mis labios.

—Mierda bebé —jadeo arrodillándose entre mis piernas. Bebé. Oh dios.

Sus manos fueron al botón de mi pantalón abriéndolo y bajándolos de forma torpe junto a mi ropa interior. Dos de sus dedos entraron en mí de forma rápida mientras sus labios recorrían mis pechos nuevamente. Un bufido salió de sus labios y volvió arrodillarse frente a mi para deshacerse de su ropa.

—¿Quieres esto? —pregunto pasando su miembro por mi entrada. Oh joder.

—Si —jadee con necesidad

Sonrió de forma lasciva antes de adentrarse en mí, de forma lenta. Cerré mis ojos ante la invasión, me encantaba este maldito hombre.

—¿Cómo se siente? —lo mire fijamente con la boca abierta jadeando, no podía pedirme que hable si lo tenia sobre mi golpeando con dureza y mirándome de esa forma —Dime como se siente

—Muy bien —susurre por fin

—¿Te gusta esto?

—Me encanta —gemí rasguñando su espalda

Mierda. Mis ojos se cerraron aferrándome a su espalda. Me encantaba, si que lo hacia joder. ¿Cuándo me había vuelto tan adicta a esto?

Levante mis caderas sintiéndome explotar de placer, solté un fuerte gemido sobre su boca mientras lo sentía liberarse dentro de mí. Oh por favor. Dejo caer su cabeza en mi hombro con la respiración pesada tratando de recuperar el aliento.

Abrace su cuerpo, acariciando su espalda si entiendo los relieves en esta por culpa de mis rasguños y otros antiguos. Soltó un quejido saliendo de mi para dejarse caer a mi lado.

—Arde

—Lo siento —solté una risa apoyándome en su pecho —Te quiero

—Lo sé.

(...)

La noche estaba cayendo sobre nosotros cuando el motor de un auto comenzó a escucharse interrumpiendo el cómodo silencio en el que nos encontrábamos. Nos pusimos de pie con rapidez, tome el arma atenta al camino por si aquel coche no era el de papá y Carl.

Solté un suspiro de alivio y el peso de mis hombros desapareció cuando pude reconocer el auto. Deje el arma nuevamente en el piso para bajar corriendo las escaleras para salir de la torre de guardia y acercarme a ellos.

Abracé con fuerza a papá sintiendo mi corazón volver a latir con normalidad, fruncí el ceño al vero por encima de su hombro a Michonne. Estaba despertando a Carl con una sonrisa cariñosa en su rostro, sonrisa que mi hermano respondió de la misma manera. ¿Qué había pasado ahí afuera?

—¿Todo bien? —hice una seña hacia la escena del coche

—Le agrada —respondió encogiéndose de hombros

Sonrió tomando unas bolsas para comenzar a caminar hacia los pabellones. Me quede de pie unos segundos, observando lo bien que parecían llevarse de pronto. Negue con la cabeza un poco confundida antes de girar sobre mis pies y seguir a papá, que se encontraba hablando con Daryl.

—¿Entonces se queda? —pregunte llegando a su lado

—Si, demostró mucho hoy —asentí sonriendo, ese era el Rick que yo amaba.

The Walking Dead || Daryl Dixon || P1 - FinalizadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora