The Walking Dead || Daryl Dixon || P1 - Finalizada

5.01 "No Sanctuary"

<<No es un Santuario>>

Pasaba fuertemente un pedazo de madera por el piso intentando darle forma de estaca, todos hacíamos algo diferente en este lugar, todos nos preparábamos para luchar y así poder irnos de aqui. Sentía mucha rabia y sinceramente después de matar a aquel hombre los días anteriores estaba dispuesta a todo con tal de salir con vida de aqui, ya no me temblaría la mano al levantar un arma o clavar este estúpido trozo de madera en el cuello de algún hijo de puta. 

—Ahí vienen cuatro de esos desgraciados —levante la cabeza al escuchar la voz de Daryl, era hora.

—Ya saben que hacer —dijo Rick poniéndose de pie y en posición de pelea —Primero a los ojos, luego a la garganta.

Me posicione a un lado de Sasha preparándome para clavar esta mierda en la primera persona que se me cruzara en el camino.

—Pónganse de espalda a las paredes de cualquier lado del vagón ¡Ahora!

Casi me quise reír cuando el techo del vagón se abrió y vi que una bomba de humo caía frente a mi, ¿Qué tanta mala suerte podríamos tener? me corrí rapidamente hacia atrás alejándome del humo, pero un par de brazos se envolvieron a mi cintura y una mano tapo mi boca antes de que pudiera gritar. 

Me moví bruscamente de los brazos que me llevaban a rastras hacia una especie de bodega y solté un jadeo viendo el cuerpo encima de una mesa siendo cortado por un hombre que vestía como carnicero.

—No, no, no. Por favor —comencé a negar con la cabeza rapidamente cuando me amarraron las manos sobre mi cabeza poniendo algo en mi boca para que no hablara, grite sobre la tela sin dejar de moverme, lo que era completamente inútil. La chica a la cual no conocía solo se mantenía llorando a mi lado. 

Comencé a gritar y moverme con mas fuerza cuando vi a Papá, Glenn, Daryl y Bob, junto a otros hombres entrar al lugar amarrados y también con la boca cubierta, sentí mis ojos llenarse de lagrimas ¿es que nunca íbamos a tener un poco de paz?

Mire atenta como los arrodillaban frente a una especie de tina larga antes de ponerse a afilar cuchillos y practicar con un maldito bate, los vi acercarse a el primer chico rubio arrodillado. Yo lo conocía era Sam, era el alegre chico al que Carol arreglo el hombro y dejamos solo en ese lugar. 

Comencé a gritar y moverme de nuevo cuando le dieron un fuerte golpe en la nuca para luego cortar su cuello, cerré los ojos fuertemente cuando paso al siguiente. No por favor. Ellos harían eso con papá, no, no, no. Seguí moviéndome bruscamente y gritando todo lo que podía, sentía mi garganta doler pero no me importaba era el turno de Glenn, era el maldito turno de Glenn.

—¡Oye! —mire rapidamente a mi lado viendo a Gareth entrar al lugar con una libreta en la mano —¿Cuantos tiros contaron?

—Lo siento, era mi primera ronda —se disculpo el hijo de puta que se encargaba de cortar sus cuellos 

—Después que acabes, regresas y cuentas los cuerpos —dijo sin dejar de escribir es su maldita libreta—Entonces ¿Cuatro del A, cuatro del D? y una del A y una del D.

Se acerco a nosotras lentamente mirando atento a la chica de mi lado —No me gustan las rubias  dijo antes de pasar el cuchillo por su cuello. 

Intente alejarme cuando su cuerpo se puso frente a mi sonriendo siniestramente antes de tomar otro cuchillo. Estoy segura que desgarre mi garganta con el grito que di cuando paso el filo de este por mi brazo haciendo que la sangre comenzara a caer rapidamente. 

—Tiene buen color —volvió anotar en su libreta y se giro para hacia los demás de nuevo ¿hablaba de mi sangre? ¿se hidrataban con sangre también? malditos hijos de puta enfermos. Cerré mis ojos tomando una gran bocanada de aire, esa seria una fea cicatriz.