Siempre contigo. |H.S|

Capitulo 4.

15 de abril, 2011.

Estos últimos días estuve un poco paranoica, bueno mucho. Sentía que todo el día tenía una mirada encima de mi, incluso cuando dormía.

Al salir del hospital llevaba un pantalón algo pegado de mezclilla y una blusa azul rey, llevaba mi pelo recogido en una coleta, amo mi pelo suelto pero en el hospital tengo que tenerlo recogido.

En ese momento vi a alguien alado de mi camioneta, viendo el carro de a lado, mi corazón casi se para cuando lo veo, Harry.

-Hola pequeña, que gusto verte. -dijo con una sonrisa muy amplia.
-Igual Harry, ¿pasa algo con mi carro? -pregunté curiosa.
-Oh no, es que a mi carro se le a ponchado una llanta. -dijo con cierta preocupación.
-Oh si quieres te puedo llevar. -dije mientras abría mi camioneta.
-¿En serio? Eso sería genial. -y una vez más mostró su enorme sonrisa. - Hasta te puedo invitar a comer, ¿qué dices? -preguntó con cierto entusiasmo.
-Oh no se es qu... -sin que pudiera terminar dijo - Vamos Leah, es solo una comida, ¿por favor? -preguntó.
-Esta bien -dije y subimos a mi auto.

El camino fue tranquilo, llegamos a una casa muy bonita para ser sincera.

-Vamos a dentro. -me dijo en el momento en que bajo.
Lo seguí y entramos a la casa, muy hermosa también por dentro.

-Haré de cenar mi especialidad. -dijo sonriendo.
-Espero que sea bueno. -dije.

La comida paso más rápido de los esperado, hizo albóndigas o solo las calentó porque no se tardó.

-Bueno Leah te seré sincero. -dijo de la nada. -Quiera que me dieras la oportunidad de salir contigo y conocerte. -dijo con una mirada sería, una mirada que daba demasiado miedo.
  -Harry yo no tengo tiempo para una relación. El hospital me consume. -dije la verdad.
-No me interesa. -dije ahora más serio y sin dejarme de ver a los ojos.
-Bueno eso algo que me tiene sin cuidado. -dije parándome de la mesa, era lindo pero su actitud era una mierda.
-Bueno, tú lo decidiste mi pequeña hermosa, fue tu decisión no la mía. -dijo en tono de amenaza.
-Harry por favor, basta. -me estaba empezando a artar. -No es mi problema que no pueda tener tiempo para ti.
-Leah -dijo con cierto enfado. -si te vas, te vas a arrepentir toda tu vida de no a ver tomado la decisión correcta, porque yo ya no me puedo alejar de ti. -dijo con mucho odio.
-No me asustas Harry. -Adiós. -dije sin más y salí de ese lugar lo más rápido posible.

Tenía miedo, no iba a mentir, Harry se veía enojado, pero no iba a permitir que me asustara. Al menos aún no.