"Quiero hacer las cosas bien." |Capítulo 17|

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Mario.

Estaba feliz y ninguna mierda que me dijeran o que me pasara me haría cambiar de opinión.

Para muchos es cualquier cosa, y si Lucy fuese otra persona me valiese verga un estúpido beso.

Siempre hay una diferencia cuando pasas los momentos más importantes con aquella persona que te importa, a cuando haces las cosas porque sí.

Pero fue importante para mí y no sé porque, sentí algo... Diferente.

Qué gonorrea, estoy pensando como una marica.

Estaba bajando las maletas de la camioneta frente al aeropuerto, Paisa me ayudó con una y yo llevaba las dos restantes. Mi mamá tenia su bolso de mano y la acompañamos hasta retirar sus boletos, no esperamos mucho tiempo ya que era plena madrugada. Su vuelo saldría en dos horas y estaría allá por tres meses aproximados, yo me iría en algunas semanas cosa que Lucía no sabia aún, la mayoría de los muchachos tampoco estaban informados. Todos en mi familia nos reuniremos para recibir el jodido año nuevo -que no tiene nada de importante- en México en casa de unos familiares. Por otra parte, iríamos hasta hoy -Viernes- a clases, vendrían las vacaciones y creo que no podría estar mejor.

- Ya van a tener toda la casa para ustedes. -Murmuró mi madre y yo rodé los ojos. Ahí viene. - No quiero enterarme por la vecina que cargan un escándalo haciendo fiestas, ¿no? -Nos señaló a Paisa y a mi mientras nos sumergiamos en una carcajada. Cuando mi mamá salía a viajar -algo que acostumbraba a hacer frecuentemente- Paisa se venia de Medellin a quedarse conmigo como buen grano en el culo que es.

- ¡Solo fue una vez! -Paisa exclamó con su risa escadalosa, algo que me recordaba a Sebastián. Ew.

- Una vez a la semana, será -Me fulminó con la mirada.

- ¿Porqué me miras a mi? No puede ser que confíes más en Daniel que en mi, que soy tu amado hijo, el que vela de ti día y noche -Negué con mi cabeza, fingiendo decepción

- Uy mijo, Por eso quiero más a Paisa. -Tomó a el susodicho por las mejillas y rodé los ojos.

- Hermano, ya usted tiene quién le de amor. Ahora me toca a mi. -Comentó gracioso y con mucho disimulo le di una leve bofetada.

- Mmm... Ahora que usted se niega a hablar con su madre sobre su mal de amor; digame Paisa, ¿como los ve usted? -Yo estaba por botar humo por mis narices. Miré a Paisa advirtiendo que si llegaba a decir alg...

- Van bien, por fin se dignó a besarla el carajito. -Los ojos de mi mamá se salieron de sus órbitas y rodé los ojos por enésima vez... Recordandome de Lucy. ¿Como es que Paisa sabia eso?

- ¿Y usted? ¡Degenerado! ¡Incapaz de decirle a la mujer que lo parió que ya estaban saliendo! -Comento casi en un grito y negué con mi cabeza. Apenas lleguemos a la casa que se prepare Paisa para su funeral.

- Mami, no estamos saliendo -Comenté. - ¿Usted como sabe eso? -Frunci el ceño y mi mirada se dirigió a Paisa.

- No solo yo, Miranda, Sebastián--

- ¿Arango?

- Villawolf, sabemos que a lo que Sebas se entere te cortara las bolas en cuadritos y se los dará a comer a un perro. -Mi madre en vez de pegarle por "grosero" se rió. En cambio, si soy yo, me deporta de toda Colombia. Buena, socia.

- Sigo... Juana, Gio y creo que hasta Janel y Logan. -Rió. Pero, ¿como?

Logan sabia, genial. Me encantaba esa noticia. Quería que supiera que no tiene vida con Lucía y, ¿Qué mejor manera de besarla en frente de sus narices? Oohhhhm.

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⏰ Última actualización: Mar 24, 2016 ⏰

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Aprendiendo a quererte | Mario Ruiz.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora