Travelers

El Vibranium Peligra

N/A: ¡Hello! ¡Las he extrañado! Este capítulo va como regalo de Halloween así que disfrútenlo, ojala les guste :)

Disclaimer: Basado en los comics y en las películas de Marvel. La trama es mía y también algunos personajes. Esta historia está escrita en tercera persona y ubicada en mi universo TIERRA-F-251. Para más información, leer mi perfil.

Capítulo 7:

El Vibranium Peligra

Una nube de polvo cubrió la frondosa atmosfera. Todo era silencio, ni siquiera el cantar de algún pájaro. Para Natasha, era como si de pronto un fuerte pitido invadiera sus oídos, no podía pensar, no podía moverse... nada. Era como si el mundo se hubiera detenido en cuestión de segundos. Los parpados estaban por cerrársele pero sabía que si lo hacía no tendría fuerzas para seguir adelante.

Un sonido de pasos apresurados se escuchó levemente contrastando el molesto zumbido que había en sus oídos. Era Thor, con algo de sangre fresca en su nariz y frente y con una expresión sumamente preocupada. Verlo en ese estado le hizo preguntarse como luciría ella en este momento. Los labios del Dios del Trueno se abrieron y formaron una oración, pero ella no pudo escucharlo debido al problema que tenía.

Su mente se fue a otro lugar en cuanto alguien la miro. Un par de ojos verdes se alzaban sobre ella, era su hijo, era James.

Definitivamente, la explosión había sido demasiado fuerte. Todos estaban ahí, rodeándola. James chasqueo sus dedos frente a ella tres veces, intentando hacerla volver en sí.

-Mamá... - escucho el susurro que emano de la boca del chico -. Mamá, vamos, tu puedes hacerlo.

Una nueva voz se unió.

-Nat, vamos, no cierres los ojos... no te atrevas a dejarme...

-¿Clint? - susurro la pelirroja, no localizando a su mejor amigo.

-Sí, aquí estoy - sintió un pequeño tirón en su mano.

Natasha sonrió y de pronto, recordó algo que la hizo sentarse de golpe, James y Clint la sujetaron con un poco de fuerza, empezó a sacudirse y a mirar en todas direcciones tratando de encontrar algo.

-Cálmate, Natasha, cálmate - le decía Clint a su mejor amiga.

-Natalie... - susurro -. ¿Dónde está, Natalie? - dijo con desesperación.

James se puso de pie inmediatamente, con una expresión asustada, las palabras de su progenitora solo hicieron que la ansiedad por recuperar a su hermana aumentara a niveles críticos.

-Tío, ¿en dónde la vieron por última vez? - pregunto el rubio menor a Thor.

-No tengo idea, sobrino - le dijo este con pesadez -. Ella y Lady Wanda se desaparecieron del campo de batalla poco antes de que la bomba estallara - le explico.

Steve se acercó a la pelirroja, quien en esos momentos era abrazada por Clint, y se agacho a su altura. Nunca antes la había visto tan perturbada, a excepción de la vez que Wanda la controlo, y eso hizo que su corazón se encogiera. Lentamente, estiro una mano y acaricio cariñosamente su corta cabellera roja, haciendo que la espía abriera los ojos y los enfocara en el soldado, enviándole un mensaje a través de ellos.

-No es tu culpa - le dijo el, sin dejar de pasar sus dedos por su cabello.

-Claro que lo es... - replico ella con la voz ronca -. Si yo la hubiera cuidado mejor...

-No... fue mi error - la interrumpió Steve -. No debí darle permiso de venir, debimos dejarla en el Quinjet con Jordan y Bruce.

-Mamá, papá - dijo James, con la mirada perdida - No es culpa de ninguno de los dos... yo debí quedarme... debí protegerla, no debimos separarnos... fui un estúpido - se lamentó.