Chicos extraños.

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El despertador de ambas chicas sonó al mismo tiempo. Ambas vivían en el mismo departamento, la primera en levantarse fue Hayley ya que tenia un examen y tenia que estar temprano en el instituto, fue hacia el baño para darse una ducha con agua tibia, una vez que termino de ducharse se vistió. Camino hacia la habitación de Ashley, quien dormía plácidamente con la boca levemente abierta. Hayley rodó los ojos al ver la posición de su amiga y sin pensarlo la tiro de las piernas.

-Ah... Hayley, cinco minutos mas-. Bufo Ashley, Hayley negó con una sonrisa malévola. 

-Vamos, despierta o llegaremos tarde-. Ashley bufo levantándose de la cama. Hayley la empujo hacia el baño para que se diera una ducha y se despertara mas. Cerro la puerta del baño y fue a ordenar un poco su habitación y estudiar algo. Ashley salió del baño con una sonrisa, entro a su habitación y se vistió, ya se sentía mas despierta. Una vez vestida camino hacia la cocina para preparar el desayuno. Hayley por su parte se encontraba con una hoja donde tenia los apuntes que necesitaba para la prueba. 

-¡Hayley!, ¡el desayuno ya esta listo!-. Grito Ashley. Hayley entro a la cocina con una mueca.

-No grites, estaba cerca tuyo-. Dijo enojada.

-Vaya... Alguien esta de malas hoy...-. Comento Ashley. 

-No estoy enojada, estoy molesta-. Hayley se sentó a leer sus apuntes una vez mas.

-¿por que?-. Pregunto Ashley mientras se frotaba su cabello mojado con la toalla.

-Por que hoy hay una estúpida prueba y la materia no la entiendo mucho-. Dijo enojada.

-Pero bueno...-. Esta vez puso una sonrisa en la cara, Ashley la miro confundida, su amiga cambiaba de emociones constantemente y no sabia como reaccionar ante aquello, ¿debía de decirle algo?, mejor no, probablemente se enojaría.

Ambas tomaron desayuno en silencio, Hayley seguía leyendo sus apuntes mientras que Ashley se sumía en sus pensamientos. Una vez que terminaron salieron del departamento y bajaron por las escaleras. Salieron del edificio y el clima frío les azoto sus rostros haciendo que un escalofrío les recorriera de pies a cabeza. Caminaban en silencio, Hayley susurraba cosas, de seguro era la materia que estaba estudiando. Caminaban por fuera de los callejones, por la calle principal, cuando un viento helado y fuerte las golpeo a ambas, el papel que llevaba Hayley en la mano voló y esta salió corriendo tras de el.

-¿¡Hayley, es en serio!? ¡Llegaremos tarde!-. Grito Ashley mientras corría tras su amiga, su cabello interrumpía su campo visual y sin darse cuenta choco con algo, miro hacia el frente y era Hayley que estaba con la boca levemente abierta observando dentro de un callejón, miro hacia el frente y pudo ver como un brillo luminoso brotaba de la pared de al fondo, luego poso su vista en el suelo donde estaba el papel que Hayley tenia anteriormente en la mano. 

Hayley comenzó a caminar dentro del callejón.

-Hayley, no. Puede ser peligroso, vamos... Ya es tarde-. Dijo agarrando del brazo a su amiga.

-No, Ashley mira es hermoso, ¿no te dan ganas de tocarlo?-. Ashley negó.

-Ems... Algo, pero puede que no sea seguro.

-Ven...-. Tomo a Ashley del brazo guiándola hacia la pared luminosa, estaban a centímetros de la pared cuando un ruido se escucho dentro de la pared, seguido por un crujido. Ambas se alejaron de la pared, esperando a que algo pasara, los segundos corrían y nada ocurría con aquella pared. Hayley se iba a acercar, pero los ruidos se escucharon de nuevo y esta vez la pared lanzo una luz que cada vez se hacia mas blanca y potente. Ashley y Hayley cerraron los ojos ya que era molesto para la visión, luego se escucho como algo caía, seguido por el quejido de un hombre. La luz se apago un momento pero volvió con mas intensidad, nuevamente se escucho como algo caía seguido por el gruñido de otro hombre quizás. 

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