Capítulo 6

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A la mañana siguiente estaba ayudando a prepararse a mi hermano pequeño, al ver que Miriam no salía fui a nuestra habitación y la encontré sentada en su cama sin mirar a un punto concreto. Me acerqué y a medida que estaba más cerca ella levantaba la cabeza hasta mirarme a los ojos. Yo me senté a su lado y le coji las manos:
- ¿Todo bien?
Ella negó con la cabeza para luego añadir:
- Tengo que hablar con Carlos sobre lo nuestro.
- ¿Por qué?
- Por qué no puedo estar con alguien que no me ama.
- Miriam el amor no es como en las películas y puedes ser feliz con alguien al que no amas, solo hace falta respeto.
- Pero él está enamorado de ti, mi hermana...no sabes lo duro que es eso...
- Ya veras que con el tiempo lo llevaréis mejor.
- Gracias por intentar animarme...
- Para eso están las hermanas.
- Cierto.
Y nos abrazos, de la puerta entra Nachete y se tira encima de nosotras gritando abrazo familiar, Carol al escucharle también se tira encima nuestro. Los echaba muchísimo de menos y no me había dado cuenta hasta que volví.
Al dejar allí a mis hermanos me fui directamente al bar de los padres de Mario. Él como de costumbre atendía la barra. Me acerqué y le di un beso en los labios.
- ¿Qué tal? - digo.
- Ahora que has venido mucho mejor.
Y me puse roja, no esperaba que él me dijera estas cosas.
- ¿Cuándo acabas de trabajar?
- Pues...(mira su reloj)...ahora mismo.
Y empiezo a reírme y el también, nos cogemos de las manos y empezamos a caminar.
Estábamos en un parque cuando de repente se pone serio y eso me da mala espina:
- Se que no te gusta hablar de eso pero...¿se lo has dicho ya al padre de tu hijo?
- ¿A qué viene esa pregunta?
- Estuve pensando y...si yo fuera el padre me gustaría saberlo.
- No puedo decírselo Mario.
- ¿Por qué no?
- Podemos cambiar de tema por favor...
- Claro como quieras...¿te has enterado que ayer ingresaron a Carlos?
Porque me pregunta eso le he dicho que quería cambiar de tema...ah claro él no sabe quién es el padre...
- Sí, estuve con él.
- Seguramente hoy le darán el alta.
- Me alegro...
Estoy cansada de que mis conversaciones siempre giren en torno al padre del bebé y de Carlos, aunque sean la misma persona. Parece que no pueden hablar de otra cosa.
Aun así le sonrió, seguimos caminando y disfrutamos el paisaje.
Al volver voy sola ya que Mario tenía que comprar algunas cosas para el bar y a mí no me importaba ir sola.
Cuando estaba cerca del portal oigo que me envían un mensaje...genial es de Carlos...miro para ver qué me ha escrito y leo: "Hasta con ropa de calle estás muy fea"
Eso me extraño como sabia que iba con ropa de calle. Miro a mi alrededor y le veo detrás mío mirándome y sonriendo, me acerco y no sé porque empiezo a reírme como una tonta, él siempre me produce eso.
- Ya te han dado el alta.
- Sí, me gusto verte en el hospital.
Ay mi madre le gusto que fuera...pero que digo yo estoy con Mario y soy feliz e intentó cambiar de tema.
- ¿Tus padres? Conociéndoles se me hace raro que no estén contigo.
- Han entrado al bar.
- Eso tiene más sentido.
Y los dos nos reímos, sus padres salen del bar y vienen hacia nosotros.
- Hola Alicia.- dijo el padre
- Hola.
- Carlos tienes que descansar, así que sube ahora mismo a casa. - dijo la madre.
Él asintió para luego darme dos besos en la mejilla y eso me dio mucho corte. Luego se fue seguido de sus padres los cuales también se despidieron.
Estaba en mi habitación escuchando música cuando entra Miriam.
- Se lo tengo que decir.
Me quito los cascos y me levanto para ponerme a su lado.
- ¿El qué?
- Carlos vendrá en 5 minutos. Le he dicho que tenemos que hablar de nosotros. Yo no puedo estar con alguien que no me ama.
- Bueno tranquilízate...
Oigo que abren la puerta principal.
- Puede que nunca tengas a tu príncipe azul, ya que muy pocas personas lo encuentran sino mírame a mí, embarazada de alguien que me oculto que tenía una novia.
- Aún así necesito hablar con él.
Volví a oír la puerta de entrada y pensé que sería de algún vecino que quería algo.
Después de unos minutos Miriam recibe un mensaje, el cual lo lee en alto.
- Lo siento no puedo quedar contigo, mañana hablamos del tema.
Vaya qué raro que tiene que hacer más importante que hablar con su novia. Al cabo de poco tiempo recibo un mensaje de Carlos y lo que más me sorprende es el contenido: "Ve ahora al banco debajo del árbol. No le digas nada a Miriam."
Hago lo que me pide y me dirijo allí sin alarmar a mi hermana.
Cuando llegó el está sentado en el banco, me ve y se levanta para luego acercarse, tiene cara seria y eso no me gusta.
- Cuando pensabas decírmelo Alicia.
- ¿De qué hablas?
- Sabes perfectamente de qué hablo...Cuando pensabas decirme que soy padre...
¿Cómo lo sabe? ¿Mario le habrá ido con el cuento? No él me prometió que no se lo diría a nadie y confió en él...entonces...
Me quedó inmóvil sin saber qué decir y os juraría que estaba blanca como la leche.
- Ah ya se preferías que nunca lo hubiera sabido ¿no? ¿Es eso?
Al final saque valor que pensaba que no tenía y dije:
- Para que, hice lo mejor para todos.
- ¿Privándome saber que tengo un hijo contigo?
- Yo estoy con Mario y no quiero hacerle daño y mucho menos a mi hermana. Por eso no te lo he dicho.
- Lo mejor es que me entere escuchando detrás de la puerta.
Así que era él. Estaba realmente enfadado nunca lo había visto de esa forma y me asusto bastante.
- Ya lo sabes ¿feliz?
Carlos no dijo nada solo me miraba fijamente y decidí marcharme por dos motivos: 1- no quería seguir hablando del tema. 2- estaba a punto de llorar.
Me fui corriendo de allí, tenía toda la cara mojada. Soy una idiota que siempre la caga una y otra vez, hago daño a todo aquel que me rodea...
Estaba tan sumergida en mis pensamientos que no me di cuenta de que un choche venía a toda velocidad, me giro y veo las luces del coche venir a mi...lo último que recuerdo es ver todo blanco...

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Carmela en multimedia.
Sé que me odias por haceros esto pero me encanta. ¿Qué le pasará a Alicia? Seguir leyendo 😘

El Novio De Mi HermanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora