Llegamos nuevamente a la fiesta, estaban en la entrada, Ana sentada en una silla y Zarité besando a un chico no muy apuesto para mí gusto, era alto,Moreno y de cabello corto, ondulado.- Zarité, camina, nos vamos - le dije
- Está bien - se despidió de Ana y de el chico y camino hacia mi
- Adiós Ana, gracias por todo- dije despidiéndomeTomamos un taxi hasta mi casa, Zarité estaba un poco mejor, pero Julian la ayudo a llegar a la casa, entre y mi abuela y mi primo no estaban, fui a la sala y había una nota, habían ido a visitar a mi tía, que estaba enferma y se quedarían algunos días, cerré la puerta y me senté en la sala con ellos.
- juguemos algo- dijo Zarité,se paro y trajo unos dados que habían en un cajón, después fue a la repisa y tomo una botella de vodka que tenía mi primo y unas copas.
- Por mí está bien- dijo Julian
Yo me limité a reír.-quien no saque par, tiene que tomar una copa- nos explicó sirviendo las tres copas-
- empiezo yo- dijeTome los dados y lance. Tres y tres - Gané- sonreí.
Después fue el turno de Julian, perdió y bebió la copa, la cual Zarité llenó inmediatamente.
Mire la hora, eran las 3;45, seguimos jugando y cada vez el alcohol nos hacía reír más, cuando estaba por acabarse la botella Zarité dijo que no era capaz de más, la subí ayudada de Julian y la acostamos en la cama de Nicolás, aunque estaba un poco pasada de tragos, yo era la más consciente de los tres, Julian caminaba de lado a lado así que lo tumbe en mi cama y le puse una manta en cima, baje a la cocina y tomé un poco de agua, ya estaba en mejor estado, ya eran más o menos las 4 y faltaba poco para las 5, me tumbe al lado de Zarité y me quede dormida.
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Una breve historia de lo que nunca fue
Romance¿A dónde van las historias cuando no pueden ser?