The Moon

Capitulo dos: la luna, el destino y una mariposa oscura.

Había pasado un mes desde la fatídica noche en la que cinco cazadores murieron, incluyendo a Shun, y Aika aún seguía internada en la habitación principal de la Hermandad, mejoraba de a poco, pero no había despertado. Lord Yue la visitaba dos veces al día, Clara y Linda se turnaban para cuidarla, nunca la dejaban sola. Mientras los escuadrones hacían investigaciones sobre el híbrido que los había atacado, pero no estaban consiguiendo mucha información y no lo habían encontrado por ningún lado.

Lord Yue estaba con su hijo, después de un mes no habían conseguido nada concreto y necesitaban saber algo, para poder poner algún plan en marcha y terminar con el hibrido que les causo tanto daño. El líder de la Hermandad estaba esperando la respuesta de un viejo amigo, alguien que podía ayudarlos en esta situación.

_ Crees que él venga por aquí?_ le pregunto Eliot.

_ Si, sé que podemos confiar en él. El problema es que es muy difícil poder ubicarlo, las mariposas están haciendo lo imposible para dar con su paradero. _ le respondió.

_ Me gustaría conocerlo... Mañana partiremos hacía Gotten, me llegó la información de que han pasado personas extrañas por allí y no esta nada mal ir a investigar. Iré a ver a mi hija antes de prepararme. _ le dijo Eliot. Dejo unos papeles en el escritorio de Lord Yue y salió.

Bajo algunas escaleras y camino por el pasillo, entró en la habitación de Aika, y se encontró con su esposa Linda y su hijo menor; Aarón. Los saludo con mucha ternura y le dio un beso en la frente a su hija. Se sentó en el sofá junto a su hijo y conversaron un rato. Unos minutos más tarde entro una enfermera para ver a Aika, anoto todo lo que le indicaban los monitores, se quedo un poco a contarles las novedades y se marcho. Al anochecer llego Clara para seguir al lado de la joven, intercambiaron varias palabras y finalmente Linda se fue a descansar un rato a su casa.

En la mañana, luego de que la enfermera pasara por la habitación, Elena noto que Aika movía sus dedos, de inmediato salió a la puerta llamando al médico, era el primer movimiento que hacia el cuerpo de la joven, al ver que nadie venía; se fue hasta la sala de médicos y allí encontró a uno y le dijo que había pasado, corrieron los dos a la habitación y se encontraron con Aika sentada en la cama sacándose todos los cables y agujas que tenía. Quisieron detenerla pero ella los empujo.

_ Debo ir por Shun! _ grito desesperada.

Clara quedo paralizada al escucharla y las lágrimas comenzaron a brotar de sus ojos. El médico trato de calmarla diciéndole que primero debía revisarle sus heridas y ver como estaba. Aika observo a la mujer que estaba llorando en el piso y se dio cuenta de lo que ocurría.

_ Shun... Shun nos ha dejado... verdad Clara? _ le pregunto angustiada. Pero no recibió respuesta alguna, sin embargo ella comprendió el silencio.

Aika miro a su alrededor, ya habían entrado varias enfermeras; que trataban de volver a ponerle todo, pero ella se resistía y finalmente las termino por empujar a todas, miro para un costado y vio una ventana, se acercó a ella y miro hacía el bosque.

_ Quiero ir a verlo. Váyanse todos, menos tu , Clara.

_ Pero lady Yue debemos ver como esta su cuerpo, no puede salir aun, además Lord....

_ Lárguense de aquí. _ le dijo mirándolo fijo a los ojos.

_ Te buscare ropa e iremos. _ le dijo Clara para calmarla.

Todos dejaron la habitación. El medico se fue hasta la sala de Lord Yue para darle la noticia. El anciano le dio las indicaciones a seguir para el bienestar de su nieta y que todo debía ser autorizado por él y que se le informe todo.

Clara estaba sentada en el sillón, esperando. Linda entro en la habitación y al verla le pregunto lo que había sucedido. Estaban contentas porque la joven había despertado. Aika salió del baño y vio a su madre, esta última corrió a abrazarla, permanecieron abrazadas varios minutos, ninguna quería soltar a la otra. Linda miro a su hija de pies a cabeza, no podía creer que estuviera tan bien. Las tres salieron de la Hermandad y se fueron a ver a Shun. La joven se quedó paralizada frente a la lápida.

_ ".. hijo y esposo.." les falto padre. No fue una pesadilla. _ murmuro y comenzó a llorar. La joven tenia la esperanza de que Shun sobreviviera al ataque, pero tuvo que enfrentar la triste realidad.

Al final de algunas horas, las tres regresaron a la Hermandad. Aika dejo que los médicos la revisaran. Estaba destruida por dentro, aunque antes de perder el conocimiento sabía que había perdido a su bebe, estaba segura de que Shun seguiría con vida, no esperaba lo contrario. Le pidió a su madre y a Clara que la dejaran sola, necesitaba pensar mucho y asimilar la situación. En la noche Lord Yue paso por su habitación, se sentó al lado de la cama y hablaron un poco.

_ Los estamos buscando, pero se esconden bien, también nos estamos preparando por si llegaran a atacar el pueblo. Si necesitas algo, sólo debes avisarme. Descansa cariño.

_ Abuelo, si lo encuentran; que lo traigan con vida, quiero ser yo quien elimine a ese monstruo. _ le pidió Aika, él solo la miro y asintió con la cabeza. Le dio un beso en la frente y salió. La joven se acomodó en su cama, abrazó su almohada y cerro los ojos, pero por más que intentara no podía conciliar el sueño, la culpa no la dejaba tranquila y su mente soló le recordaba una y otra vez los últimos minutos de vida de Shun.

En la mañana siguiente, luego de ser atendida por su médico y por su amigo Len, Aika se dirigió a la sala de su abuelo. Quedo parada frente a la puerta, pero no se animó a golpear. El asistente de Lord Yue le abrió la puerta, le sonrió y la invito a pasar.

_ Te paras en mi puerta y no golpeas pequeña. _ le dijo el anciano. _ Yo también tengo poderes aunque este viejo. _ agregó sonriendo.

_ Temía interrumpir algo importante... _ le respondió mirando la sala. _ Sentí la energía de tres personas, pero están solo ustedes... tal vez sean secuelas de los golpes.

_ Había alguien más, si; pero ya se fue. Lisandro ordena la reunión con los escuadrones para dentro de una hora. _ le ordeno Lord Yue a su ayudante. _ Alguien nos trajo información sobre quienes los ataco hace un mes.

_ Que descubrieron abuelo? Déjame ir con mi escua... _ Aika apretó sus manos, sus palabras fueron más rápidas que sus pensamientos, hasta donde podía recordar no había quedado casi nadie de su escuadrón y tal vez los haya perdido a todos esa noche.. _ lo siento, sé que no puedo, no estoy en condiciones como la última vez.

_ No te preocupes, estarás al tanto de todo. Estas pensando en volver a entrenar verdad? _ le pregunto y ella asintió moviendo la cabeza. _ Primero debes recuperarte y hacerte las pruebas necesarias para saber cual es el estado de tu cuerpo, después te daré el permiso para hacerlo. Ahora ve a descansar, en la noche pasaré por tu habitación.

_ De acuerdo... abuelo hubo sobrevivientes en mi escuadrón, solo presencie la muerte de Densen, Shun seguía con vida cuando perdí el conocimiento y no he preguntado por nadie. _ le confeso algo avergonzada por sentirse egoísta por solo pensar en Shun.

_ Kim esta bien y a cargo de tu escuadrón hasta que decidas regresar. Tu escuadrón perdió a cinco hombres esa noche, pudo ser peor. En el pueblo no hubo víctimas. Y no te preocupes, tus compañeros te han ido a visitar en sus tiempos libres. Ellos no te culpan por lo ocurrido, y tu no debes culparte por ello, son simples hechos que le ocurren a cualquier cazador _ le respondió.

Aika se sentía muy culpable y responsable por las muertes de su escuadrón. Ella quería vengarse y no se detendría hasta lograrlo.