Estábamos tumbados, yo acurrucada en su pecho y él acariciaba mi pelo con sus dedos, poco a poco me fui quedando dormida. Al día siguiente me desperté y estaba acurrucada pero esta vez Rubén estaba exactamente igual que yo pero encajado detrás de mí, me quedé viendo el móvil y estuve una hora así. Decidí levantarme y me fui al sofá, puse la televisión y estaba echando Big Bang así que me tumbé a verlo, a la hora se despertó Rubén. Verle entrar en el salón medio zombie en calzoncillos era tan gracioso como adorable, se sentó a mi lado en el sofá y apoyó su cabeza en mi hombro, yo mientras le acariciaba la cara delicadamente. Estuvimos así un buen rato y me fui a hacer el desayuno, desayunamos y luego yo me puse a jugar con los gatos y él se fue a grabar un vídeo. Me encantaba estar con sus gatos, eran adorables, Wilson era el más loco, pero Raspy era tan adorable. Cuando Rubén terminó de grabar me dijo que si quería conocer a Cheeto y Alexby, yo asentí sin dudarlo porque ya tenía ganas de conocerles, Rubén me había hablado mucho de ellos. Rubén llamó a los chicos y les dijo que vinieran hoy a casa que tenía alguien a quien presentarles, yo estaba un poco nerviosa, no sabía si les caería bien. Pasaron las horas y llegó el momento, ya habían llegado, Rubén fue a abrir y el primero que entró fue Mangel, que ya lo conocía.
Rubén: Mi Mahe.
Mangel: Ay Rubius que te echaba de menos.
Cheeto: Ey parejita dejadme pasar.
Alexby: Ey ¿qué pasa Rubius?
Rubén: Bueno chicos, esta es Miku, mi novia.
Miku: Hola. (Saludé bastante tímida)
Cheeto: Hola guapa, encantado.
Alexby: Al fin alguien de mi estatura, encantado soy Alex.
Diji riéndose, todos me dieron dos besos y fueron muy majos.
Mangel: Miku, ¿qué tal? Ya te echaba de menos.
Miku: Y yo a ti cielo.
Dije eso y le abracé.
Rubén: Me voy a poner celoso, que sois los dos míos.
Mangel: Rubius soy solo tuyo, pero Miku es especial.
Miku: Tranquilo que no te robaré a tu Mahe.
Nos fuimos al salón y yo saqué algo de picar y unas cervezas.
Rubén: Bueno, hoy os quedais todos a cenar, no acepto un no de ninguno.
Todos: Si invitas tú vale.
Miku: Yo si no invitas no ceno.
Rubén: Cabrones, ¿pedimos pizza?
Todos: Sí.
Llamó y pidió 4 familiares, era mucho para los 5 pero es que comíamos mucho todos.
Miku: A comer.
Devoré la pizza y todos me miraron asombrados.
Cheeto: ¿Pero como comes tanto muchacha?
Miku: Uy sí, anda que vosotros comeis poco.
Terminamos de cenar y empezamos a jugar al Mario Party mientras bebíamos chupitos de Vodka. Acabamos todos un poco pedo así que los chicos durmieron en casa.
A la mañana siguiente nos despertamos a las 15:30 con unas caras de zombies flipantes, no tenía ni hambre así que fui al baño y como vi que los chicos seguían dormidos en el salón, me quedé en la cama con Rubén que ya estaba despierto, estuvimos abrazados y viendo una película en el portatil ya que estábamos reventados y con un poco de resaca. A las 17:00 salimos y ya estaban los chicos despiertos, estuvimos toda la tarde juntos, fue una tarde de resaca, o sea, pelis, palomitas, cocacolas y mantas. Los chicos se fueron de casa a las 22:00, no se quisieron quedar a cenar así que hice la cena para Rubén y para mí, cenamos y nos tumbamos en el sofá, no hacíamos nada, solamente estábamos en modo 'mimoso' y me gustaba demasiado estar así, Rubén hoy estaba especialmente amoroso. A las 23:30 nos fuimos a la cama y estábamos tan cansados que nos dormimos enseguida, yo abrazando por la espalda a Rubén y él cogiéndo mi mano.
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