Capitulo 4.

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Luego de un día largo de escuela, conociendo a los nuevos maestros, estudiantes de los grados menores, asimilando las nuevas materias, etc.
Decidí regresar a casa. Me regresé por el mismo camino de siempre y como de costumbre mi madre no estaba en casa, ella había comenzado su nuevo trabajo en una cafetería a 2km.
Mi madre a tenido muchos trabajos, aún recuerdo la primera vez que me dijo que iba a trabajar, tenía como 9 años. Desde que mi padre se fue y nos dejó de pasar la pensión alimenticia, solo quedamos ella y yo y ahi mi madre supo que ya era momento de trabajar. Siempre me pregunté porque no hizo nada.
Y mi padre jamás volvió a buscarme y tampoco creo que tenga interés en hacerlo, ya pasaron 7 años. Gracias a todo lo que mi madre a trabajado a podido pagar la escuela, ahora la secundaria y pronto fondos para una universidad.
Yo aveces la ayudo, limpiado casas de algún vecino o cuidando a los hijos de la señora Maybe, nuestra vecina. Con eso nos ayudamos un poco y podemos comprar comida o algo. Pero créanme que es muy difícil lidiar con los gastos y más cuando no estas sola.

Después de llegar a casa, la ordene un poco, me duche, me cambie y calente mi comida. Vi Pretty Little Liars mientras. No tenía mucho que hacer, mis días eran monótonos la mayoría de veces; porque como era primer día no habían dejado tantas tareas.
Aveces me sentía algo sola, y pues no tenía dinero para comprar cosas, no era tan hermosa como para tomarme muchas fotos y no era tan popular como para estar todo el día en las redes sociales.
Así que me eche en mi sofá, me hize bolita y comenze a hundirme en mis pensamientos. Hasta que tocaron el timbre, adiós meditación.

El timbre sonaba una y otra vez y la verdad me estaba comenzando a desesperar.

Abrí la puerta y sinceramente me arrepiento de haberla abierto, si pudiera retroceder el tiempo créanme que cambiaría eso, ya que allí comenzó todo.

Yo: Si?

Persona X: Am.. Hola, vengo a traer un pedido para la señora Wayne.

Yo: Eh, si soy su hija. Que extraño, no me dijo nada acerca de un pedido. Bueno no importa, donde firmó..?

Persona X: Aquí.. Y vives por aquí?

En mi mente pensé, ¿que no ve mi casa? Pero no quería ser atorrante, así que continúe la conversación.

Yo: Ah, si. De echo esta es mi casa - Hize un gesto con las manos.

Persona X: Ah, cierto. Que estúpido. - Soltó una carcajada.

Solo lo miré, y me límite a contestar.

Persona X: Y que edad tienes?

Yo: 16 y tu?

Persona X: 18, me llamo Lorenzo.
No podía decirle mi nombre, ya sabía mi apellido y hasta donde vivía, creo que eso ya bastaba. Así que invente un nombre.

Yo: Me llamo Emma, mucho gusto.

Persona X: Que lindo nombre, bueno Emma, espero verte pronto. Ya me tengo que ir a entregar paquetes.

Yo: Esta bien, hasta pronto.

Vi como se alejaba en esa bicicleta roja, llena de paquetes con direcciones.

Me quede pensando unos minutos que no era tan feo, era alto, cabello marrón, ojo grandes, sonrisa bonita, pero..
No era mi tipo.

Y si quizás le guste? Como dice Mía eso de las señales de chicos, aunque no creo.. Solo lo había visto 5 minutos, ¿Cómo a una persona le puedes gustar tan rápido? Preferí no pensar en eso, así que cerre la puerta y seguí con mi meditación. Total no lo volvería a ver.

Cajita de Recuerdos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora