Capítulo 10

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POV Paula

- ¿Qué... qué es eso? - digo incrédula a lo que estoy leyendo ¿Quién pudo escribir eso?

- No lo sé, este mensaje lo mandaron desde hace 5 horas - dice reprimiendo un sollozo

- ¿Estás bien?

- Sí... - dice, pero yo no le creo

- Vamos a sacarte la duda, mañana nos vamos a Málaga, responde ese mensaje; dile que si puede comprobar eso entonces nos ci... quiero decir que te cite en algún lugar y comprobarlo

- Que nos cite, no puedo hacer esto sólo, por favor no me dejes. Tengo miedo de que esto sea real, tengo miedo a que me lastimen, no me sueltes, no me abandones hoy ni nunca - dice esto como si fuera un niño pequeño que le teme a la oscuridad

- Pablo... - y le abrazo, él no hace ninguna objeción, al contrario, me aprieta suavemente y se acurruca en mi hombro, siento su cálido aliento y sus lágrimas recorriendo en mi hombro, me duele, me duele verlo así, sufriendo por alguien que no vale la pena.

Lo sabía alguien alguna vez me dijo que Marta era capaz de engañar a Pablo; me dijo que antes de que terminaran por primera vez, ella ya estaba liándose con alguien, pero no le creí. Me siento tan culpable

Después de un rato, él se va apartando, tiene los ojos hinchados de tanto llorar

- Lo siento Paula, estamos aquí para retomar nuestra amistad y ahora parece que venimos a consolarnos de nuestros dramas de la vida y encima me dices que volvamos a Málaga. De verdad que lo siento mucho

- No te preocupes, además ya estamos bien, por mi parte ya te perdoné - levanto su barbilla, y por acto reflejo, le beso su frente - Descansa Pablo y mañana respondes ese mensaje, todo estará bien

Estaba a punto de irme a cambiar de ropa cuando él me sujeta suavemente la muñeca

-Sé que esto puede sonar extraño, pero ¿Puedo dormir contigo? - dice nervioso - me refiero a tu lado - intento no reírme

- Claro que si - le digo con una sonrisa, no va a pasar nada, Paula, no va a pasar

POV Pablo

No entiendo este mensaje ¿Por qué me mandarían eso? ¿Quién fue? Mi cabeza está llena de dudas, intento relajarme, pero me es imposible, mi mente me lanza recuerdos, en los que todo iba bien, en los que era feliz, también los días de tormento, en los que me aleje de Paula, las peleas con Marta. Paula tiene razón, debo enfrentarme a esto.

A medida que pasan las horas, me siento más en paz estando a su lado. Es una sensación extraña, sólo con un abrazo siento que todo saldrá bien.

Pasan los minutos y no puedo conciliar el sueño, me giro y veo a Paula dormir tranquilamente, se ve bellísima, como un ángel, no me había fijado en lo hermosa que es, en lo largo que está su cabello ¿Por qué no puedo dejar de sentir que mi corazón se sale del pecho cada vez que la miro? ¿Por qué me pone nervioso dormir a su lado? Tengo miedo de sentir amor por ella, sabiendo que su corazón le pertenece a otro. Tengo miedo de que Marta me rompa el corazón, para que venga Paula a curarme y luego dejarme solo. Le tengo miedo a mis sentimientos locos, todo esto me agota y en cuestión de minutos me dejo llevar por el cansancio.

No sé cuánto tiempo pasó y sentí unos brazos rodear mi torso, me giro cuidando de no hacer ningún ruido, es Paula, noto su respiración agitada, tiene una pesadilla, sonrío y la rodeo con mis brazos eso parece calmarla, pues su respiración vuelve a la normalidad y vuelvo a cerrar los ojos

Vuelve... una última vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora