Vuelve... una última vez

Capítulo 21

POV Pablo

El avión parte a México, siento muchas cosquillas en mi cuerpo. Mi mente sigue estancado al momento en el que descubrí todo. Claro que quiero volver a verla, quiero que se quede conmigo. Pero ¿Por dónde empezaría a buscarla?

Cierro mis ojos tratando de buscar una pista de dónde podría estar. Una lágrima cae por mis ojos, no puedo negarlo. La extraño más que a mi vida. Ese beso bajo la lluvia fue tan mágico, dormir a su lado, cuidarla hasta que se pusiera bien.

Quiero ser el dueño de sus risas, de sus sonrisas, ser lo primero que vea cada mañana y lo último al dormir.

No puedo creer lo idiota que he sido no fijándome en ella desde el principio, seríamos tan felices ahora

12 horas después....

Por fin... Está aquí, no pensé en volverla a ver, no decimos nada. Tengo tanto que decirle

Abro mis ojos, bajo las sacudidas de Mariola

- Pablo, hemos llegado

- Ah, vamos

Bajamos y nos dirigimos al hotel, donde me instalo y en este me reciben los chicos

- Hola Pablo – me saluda Joy

- Hola Joy

- Pablo, es un gusto verte en persona

- Igualmente Jesse – Mariola se acerca a nosotros – chicos ella es mi mánager ya también una gran amiga, Mariola

- Encantada – los hermanos responden de igual forma – bien, me dijeron que tendremos una ronda de entrevistas.

- Sólo tendremos una entrevista para Hola.com para hablar sobre el disco y la colaboración con Pablo - Responde Jesse

- Después de ello, podrá ir a descansar y en tres días grabaremos la canción. - termina de decir Joy - sentimos que tengas que quedarte más tiempo en México...

- No te preocupes Joy, además, vamos a llamar que esto es un viaje de desconexión

Caminamos hacia la recepción donde me choco con un chico, quizá un año mayor que yo, más alto que yo y de cabello oscuro, delgado pero tiene músculos. En sencillas palabras es un chico que se cuida

- Lo siento, estaba un poco distraído – le digo a modo de disculpa

- No te.... ¡Dios!

POV Sebastián

¡Pablo Alborán! El mundo es muy pequeño, no puedo creer que los rumores eran ciertos. Quisiera decirle que conozco a Paula y que es urgente que la vea, pero es claro que me puede tomar por loco

-  ¿Todo bien? – me pregunta extrañado.

- Ah... Es que... Lo siento es que mi hermana te adora – sonríe

- Es lindo que pienses en ella. Y me alegra oír eso de tu hermana

- Me encantaría que me firmadas algo... para poder... – en ese momento siento un mareo intenso. Me sostiene

- ¿Estás bien....?

- Sebastián, sí...

- Te veo pálido... ¡Mariola! – y frente a mí aparece un retrato vivo de Caro... Mis ojos no dan crédito a lo que ven...