Uno nunca se da cuenta de lo afortunado que puede llegar a ser. Nunca tenemos los ojos suficientemente abiertos para darnos cuenta de las personas que tenemos al lado y que nos aman, nunca vemos de las cosas que tenemos en frente y nunca nos damos cuenta. Uno nunca agradece de tener una familia que nos ame, de vivir bajo un techo sanos y salvos, de tener comida. Y por eso es que estoy tan arrepentida, de no haber estado agradecida de que tenía a mi familia, sí a mi familia que me amaba, de poder estar bajo techo, de tener comida, de estar sana, de estar a salvo...
Hoy hace tres días que me tenían secuestrada, aunque fueran tres putos días parecían una eternidad. Por suerte me empezaron a dar de comer hoy ya que me había desmayado dos veces el día de ayer.
Me estaban llevando a un cuarto todo cerrado, solo se encontraban una silla y cosas para torturar.
Mierda, ahora sí ya estás pérdida Isabella.
Mis piernas comenzaban a perder el equilibrio, estaba muerta de miedo, ¿y si me mataban?, no eso definitivamente no iba a suceder, eres fuerte Isabella.
Mi respiración ya no era buena, y eso era a lo que más temía, por la forma en la que estaba respirando supe que el asma estaba volviendo. Ahora sí, estoy perdida.
Alex
Al principio estaba asustado, pero cuando me llamó Pérez me relaje. Si, soy una mierda de persona, me siento mal por James, no merezco que sea mi amigo. Sé que si se entera no me va a perdonar nunca en la vida. Pero Nicolas es mi tío, y dicen que la familia antes que nada. Isabella corre peligro, eso ya lo se. Pero el padre nunca tendría que haber hecho tratos con un mafioso, todo el mundo sabe que con alguien así no se debe jugar. Ahora tendrá que sufrir las consecuencias.
¿Por qué me comporto así? Es muy sencillo, nadie estafa a mi familia.
El plan se viene pensando desde que mi tío mató a la joven equivocada. Todo es muy simple, paso uno; Pérez los amenaza a los padres de James, con que si ellos no se marchan de su casa diciendo que Isabella es adoptada, y bla bla bla. El mata a sus dos queridos hijos. Paso dos; Isabella queda desprotegida, la secuestramos. Tercer y último paso; Matamos a la joven.
Por suerte no tengo que hacer que me preocupo por ella durante mucho tiempo, hoy mi tío la va a torturar, va a dejar pasar dos semanas de tortura para ella, y además para que sufran James y sus padres, y por último la matan.
Sé que soy el mismísimo demonio, pero así son las cosas, ¿no?. Después de todo soy un sin sentimientos.
Isabella
Me desperté sin saber en donde estoy, por un momento pensé que estaba en mi casa, pero luego caí en la dura realidad. No me encontraba en el cuarto que suelo pasar, si no que me encuentro en un sillón muy desgastado.
- ¡Ya despertó!. - Alguien gritó al lado mio.
Cuando pude abrir bien los ojos reconocí el lugar enseguida. El sótano de Alex...
Esto no puede estar pasándome, es imposible. Seguramente me equivoqué, pueden haber un montón de sótanos idénticos al de el. Pero para mi desgracia no era así, Alex estaba bajando las escaleras. El odio que siento es enorme, ¿Cómo pude ser tan estúpida? Todos me fallaron, todos los que he confiado en algún momento me fallan de tal manera. Todo hubiera sido más fácil si Anne no muriera, si yo hubiera muerto esto no tendría que ser así, todos se me rieron en la cara, primero Spencer, luego mis padres, ahora Alex, ¿quién sigue?.
Me siento usada, traicionanda.
- ¿Por qué? ¿Por qué tú?. - Para cuando me quise dar cuenta las palabras empezaron a salir solas.
- Nicolas Pérez es mi tío, y tu miserable padre lo traicionó, y con mi familia nadie se mete.
¿Su tío? ¡Era su tío!.
- ¿Po-por qué no me matas y ya?. - Dije intentando que no se me escape ningún sollozo. - ¡¿POR QUÉ CARAJO NO TERMINAS CON ESTE SUFRIMIENTO?! ¡TERMINALO DE UNA MALDITA VEZ!. - Grité, Grité a todo pulmón y eso no fue una buena idea, ya que mi relación empezó a fallar, otra vez.
- ¡Mierda! Traigan el respirador, AHORA. - Ahora Alex parecía desesperado. Pero no iba a caer en sus juegos otra vez.
Casi no podía respirar, pero cuando me trajeron el respirador no lo inhale, este es mi momento para que todo acabe, para que el sufrimiento ceda.
Quise ver a Alex a los ojos, para que se sienta culpable. Y cuando lo hice el estaba viéndome, en su mirada había, ¿preocupación?, no imposible.
Alex
Ella se estaba muriendo, y no quería en inhalador, lo rechazaba. Los chicos estaban intentando abrirle la boca pero era imposible.
No quería, no quería que muriera.
Cuando conectamos miradas en la suya encontré odio, sólo odio. Ella me detestaba, y con razón.
Isabella estaba apunto de cerrar los ojos, pero hice la cosa más estúpida que podría haber hecho, la besé para darle aire. Para cuando abrió la boca me di cuenta que no era intencional, si no que se había desmayado y aproveché para usar el respirador.
Isabella no respiraba, intenté otra vez y tampoco reaccionó. A la tercera ya estaba despierta.
Gracias a Dios.
Isabella
¿Dónde estoy?
¿Por qué me puedo ver?
¿Estoy muerta?
Me puedo ver a mi misma, en una cama, también puedo ver a Alex.
Definitivamente no estás muerta.
Quiero despertar, quiero abrir los ojos. Pero no estoy lista para el mundo, no estoy lista para volver al infierno en donde vivo, tengo miedo, demasiado miedo. Tengo miedo de lo que pueda llegar a pasar, de no volver a casa nunca más, de no volver a ver a mi hermano. Quiero despertar y que todo sea mentira.
- Isabella, volvé. Perdóname, te traicione, pero no puedo cambiar. Te prometo que si despiertas, no vas a sufrir, va a ser rápido.
James
Me estoy volviendo loco, cinco días. Cinco días desde que desapareció, la policía no la encuentra, yo tampoco. Alex desapareció, hace dos días que no se nada de él, tampoco contesta mis llamadas. Justo en este momento en el que necesito a mi amigo acá conmigo, se va.
Isabella... Hermanita, te extraño demasiado, te necesito. Te amo, te juro que si volves todo va a cambiar.
- Hijo, ¿hay noticias?. - Dijo papá. Si ellos habían vuelto, en realidad nunca se fueron. Todo fue obra de Pérez, él los amenazó a mis padres, y ahora Isabella corre peligro. Ya buscamos por todos lados, por los barrios de los criminales... Pero no hay ni rastro, todos piensan que se fueron de Kansas, pero yo sé, siento que mi hermana está cerca. Y mientras tanto voy a seguir buscándola.
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