Aprendamos a traducir cielos encriptados y a dejar de pensar que si llueve es porque el tiempo está tan triste como nosotros.
Empecemos a descifrar cómo abrir corazones con candado y a leers sueños rotos en los ojos de los otros.
Me dijo que tenía el corazón demasiado grande para su cuerpo y para parecerme más a él me tatúe uno en el pecho derecho por no tener suficiente con el del izquierdo.
Pero no tardé en darme cuenta que un corazón vacío es peor que no tenerlo.
Es como vivir en un continuo silencio horrible, sin que nada ocurra y nada suene.
Algo que produce una sensación de vértigo tan grande como tener que saltar de mi pecho a tu pecho sabiendo que, al otro lado, me espera un hueco.
Te prometo que es el vacío mas bonito que he visto.
El precipicio más alto, y el mayor desorden que mis ojos y mis labios han recorrido nunca.
Hace tiempo dejé de prometerme cosas que no podía cumplir.
Y ahora no me queda nada, solo sobrevivir, porque dejar caer la silla no es una opción válida.