UN MUNDO DISTINTO

¿QUÉ NOS OCURRE?

¡¡DIOS MÍO!! ¡¡PERDONADME!! ¡¡NO SABÍA QUE LLEVABA TANTO SIN SUBIR!! ¡¡LO SIENTO!!

ESPERO QUE LA ESPERA MEREZCA LA PENA...

Narra Juan Carlos

¿Por qué me habría hecho eso mi hermana? Sabe que nunca me gustó que me ocultaran información, fuera la que fuera, por mucho que asustara o doliera.

Decidí hablar con ella. ¿Que cómo? Por telepatía.

Me concentré en ello y tras unos minutos ella también me habló.

-¿Por qué? - le dije.

-¿Por qué, qué? - preguntó.

-¿Por qué le dijiste a la señora Clenson que no me dijera todas las consecuencias que podían causar en mí mis poderes?

-¿Cómo lo sabes?

-Contesta.

-No quería asustarte, eres mi hermano pequeño, tengo que protegerte.

-O sea, que "me proteges" ocultandome los peligros que puedo correr, en vez de decírmelos por si pasara algo y no supiera que hacer - resumí.

-Eh... No era ese mi punto de vista...

-Y yo que creía que teníamos confianza. ¿Tu sabes lo que ha pasado, y yo sin saber nada?

-Sí... Se ha corrido la voz por el reino. La noticia ha volado, la dio el mensajero. Lo siento.

-¿Hay algo más que deba saber? - pregunté indiferente a su disculpa.

-Venga ya Juanqui, sabes que no haría nada que te perjudicara.

Eso es cierto. Bueno, da igual, errar es de ángeles.

-Está bien, pero nunca más me ocultes nada ¿vale?

-Vale enano. En cuanto te vea te voy a comer a besos - me avisó.

-Anda - dije ruborizado. Jeje.

-Hasta la semana que viene.

-Hasta la semana que viene.

Terminamos y me fui al salón de nuevo.

-¿Qué me he perdido? - pregunté sentándome.

-Nada, que podemos ir todos. - me anunció Rubén muy contento.

-¿Qué hacías? - me preguntó Abraham.

-Hablar con mi hermana. - respondí.

-¿Cómo? - preguntó sorprendido.

-Después te explico.

-¿Todo arreglado? - preguntó el rey.

-Sí, todo arreglado.

-Perfecto. - respondió feliz él.

-Os esperamos a todos la semana que viene. - dijo la reina.

-Estupendo, muchas gracias. - dijimos todos.

[...]

Narra Rubén.

-¿Todo preparado? - pregunté. En dos minutos se abrirá el portal.

-¡SÍ! - respondieron los humanos con entusiasmo.

Para mi sorpresa se abrió el portal antes de lo previsto.

-¿Es seguro? - dijo Abigail asustada.

Hicimos caso omiso a su pregunta.

-Cogeos de la mano. - dijo Tony una vez estaban todas las maletas dentro.