Richard

capítulo 15

*FLASHBACK*

Todo era normal, padres con trabajo, hermano 10 años mayor, a mi abuela y a mi abuelo.Escepto a mi hermana mayor por parte de padre que vivía en Barcelona pero Se podria decir que tengo todo, todo lo que hace falta para ser feliz. Hasta el día que empecé a odiar a mi hermano.

El era protector, incluso cuando no tenía que hacerlo pero habían problemas con el. Empezó a fumar tanto tabaco como marihuana, le robaba dinero y cigarros a mis padres, se fugaba de clases hasta que mi abuelo lo vio. Mis padres lo sacaron del Instituto y lo pusieron a trabajar con ellos en la pequeña cafetería que teníamos.

Un día mi padre ya no pudo más, no podía pagar la hipoteca y no le llega el dinero al fin de mes. Pensaban que perdían el dinero o algo por el estilo hasta que le vio, vio meter la mano en el bolso de mi madre.

-Que haces Iñaki.

El le miro con cara de asustado. Mi padre era su padrastro y le daba miedo. El puede ser bueno como un pan pero impenetrable como un muro, no se le escapaba ninguna.

- Na...nada papá...-mi padre le miraba con cara de no creerse nada.

-Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo.

Le decía mi padre mientras que el se hiba a su habitación.

Mi hermano era un caso perdido. Utilizaba el dinero de mi padre para drogas y se lo fumaba en el baño cosa que le acabaron pillando. Y mi padre no lo soporto y le pego... si le pego.

Mi hermano no se lo espero y se fue a su habitación. Ya eran dos años que mi padre le pegaba a mi hermano cuando el hacia algo mal. Y mi hermano se callaba.

Mis padres vendieron la cafetería y se fueron a trabajar a una empresa, no tenían vacaciones y me quedé con mi hermano día y noche hasta que venían en casa.

Mis padres se iban a las 8 y mi hermano me despertaba como cada mañana a las 12.

Yo ya tenía 7 años ya sabía hacer algunas cosillas en casa pero siempre lo hacía mal, era normal.

Un día mi hermano me empezó a gritar:

-Alice me como todas las broncas tuyas cuando no son mías,-me decía mientras que entraba en mi habitación y yo estaba quieta.- y tu no haces nada, te quedas parada cuando papá me hecha la bronca. ¿por que no haces nada?

-Yo..yo.- estaba nerviosa, sabía que iba a acabar llorando, pero no sabía que decir.- No lo se.

-Nunca sabes nada, ¿no sabes hablar?¿has leído algún libro?

Un nudo se formó en mi garganta y mi vista se nublaba así que niego. No me gustaba leer pero si que sabía.

-No sabes leer, te van a llamar *tartaja.

-si que se leer.-le digo en un susurro.

-vamos a verlo. -coge un libro de la estantería y me lo pone delante.- si te equivocas te pego un hostia.

Y empecé a leer. No podía ver bien, de mis ojos salían lagrimas y no paraba de sorver la nariz. Me equivoque una 4 veces y me dio 4 tortazos. Los primeros 4 tortazos que me habían dado pero sabía que no eran los últimos.