Percabeth: te recuerdo?

Epílogo

~Años después~

Percy POV:

Hice un cuenco con mis manos y la llene de agua, moje mi cara y pase por manos por ella con nerviosismo.

-Vamos, Percy. Tú puedes, solo te casarás con la chica más hermosa y perfecta del mundo.-dije tratando de darme ánimos a mí mismo.

Tenía ya 26 años y en unos minutos me casaría con Annabeth, ¿Estaba nervioso? Mucho, con los años ella a aprendido a quererme aunque sea un total sesos de alga. Pero este día sería diferente, la impresionaría. Mis votos estaban listos es mi cabeza, Annabeth y yo escribimos los votos juntos.

Mire mi reloj de muñeca, las 4:18, estaba a punto de salir cuando alguien tocó la puerta.

-Percy, apúrate. La novia está esperando.-dijo la voz de Jason

-¡Enserio, Percy, no querrás llegar tarde a tu boda!- escuche la voz de Piper.

-¡Ya voy!- grite

Antes de salir, vi mi rostro en el espejo, trate de peinar mi cabello pero falle. Al salir me encontré con Jason en un traje totalmente negro, le pedí que fuera mi padrino. Junto de el, tomando su mano, estaba Piper, se veía muy linda con un vestido plateado, largo, hasta el tobillo y sin mangas, se maquillo ligeramente y su cabello estaba recogido en un elegante peinado. Sin mencionar ese pequeño bulto que nacía desde su bajo abdomen anunciando a su precioso bebé de 5 meses.

Salude a Jason con un apretón de manos y un abrazo y a Piper con un beso en la mejilla.

-Piper, te ves hermosa.- dije

-Gracias, Percy.- dijo

-Oye, tú ya tienes a tu novia deja a la mía en paz.- dijo Jason

Piper rodó los ojos mientras quitaba lentamente la mano de Jason de su vientre.

-¿Y cómo está el pequeño Percy?- pregunté poniéndome en cuclillas y poniendo mi mano en el vientre de Piper.

-Bueno, en realidad será una pequeña Annabeth.- dijo Piper

Solté un grito ahogado

-Pequeña traidora.- dije dirigiéndome a su bebé.

-El próximo tendrá tu nombre, hermano. No te preocupes.- dijo Jason

Me levante y busque en mis bolsillos el anillo de Annabeth. No estaba.

-Hermano, ¿Qué pasa? Estás pálido.- preguntó Jason.

-Perdí los anillos. ¡Perdí los anillos!-

-Oh no.- exclamó Piper

Comencé a buscar los anillos por toda la cabaña, no podía encontrarlos, alce el colchón de mi cama y pude ver como en un rincón de esta un pequeño sobre color plata brillaba con la luz del sol que entraba por la ventana.

La tome y en el reverso del sobre se leía:

~Para Annabeth~