Sergey Kozlov
Caigo exhausto y extasiado en la cama. Mis respiros son rápidos y me río de mí mismo, cada vez voy por más. Azoto el culo de una de las mujeres y escuezo su blanca y firme piel. Ya es hora de que se vista y se vayan. No sé ni el nombre de ellas, la verdad. Ni me importa. Me levanto de la cama aún desnudo y ambas me miran esperando algo más de mi. ¿Acaso no se dan cuenta que ya no me sirven?
— Ya es hora de que se vayan. Salgan por la puerta de atrás.
Una de ellas me mira y algo confusa replica
— Pero, ¿Así no más? Pensé que podríamos…
— ¿Que? He dicho que se vayan.
— Prometiste que luego nos llevarías a cenar
Sirviéndome una copa rio con burla
— A ver, nunca prometí eso. Sólo fue sexo y ya. Ahora váyanse
Enojadas se visten mientras las veo y suelto un suspiro. Sólo están de pasada, igual que muchas y eso no logran comprenderlo. Salen de mi penthouse y miro el móvil, tengo una llamada perdida de mi querido amigo. ¿Qué querrá a estas horas? Le marco y contesta algo enojado
— ¿Joder Sergey donde te metes el teléfono?
— Estaba algo ocupado con unas curvas para morirse. Dime, ¿que ocurre?
— Necesito que hagas algo además de follar. Estoy ocupado con la delegación de Seattle. Recién llego y me encuentro con un total caos. Me han llamado de la delegación de Berlín. Necesitan que me presente pero no puedo. Vas y me representas
No puedo evitar reírme. ¿Que se cree señor dueño de medio Rusia?
— A ver Mikhail, yo sólo soy tu abogado. Además, ¿Que rayos sé yo de lo que quieres que haga allá?
— Son problemas legales. Tu eres el abogado no yo. Deja de quejarte y te vas en dos días para Alemania.
— Ya vale, ¿Por cuánto tiempo?
— El necesario
Termino la llamada y me quedo pensativo. Este hombre me ha jodido todos los planes. Miro el reloj y son poco más de las doce, Carol no llega y se va a meter en líos, es viernes y sabe muy bien las reglas. Algo enojado mando un texto
Sergey a las 12:01am
¿Donde coño estas? Sabes que me perteneces y deberías estar aquí. Tienes cinco minutos para llegar y le espera un castigo por desobedecerme.
Carol a las 12:02am
Disculpeme señor. He tenido un contratiempo personal. Pero ya estoy de camino. Aceptaré el castigo que imponga
Aprieto los dientes y camino hacia el guardarropa. Saco un cinturón y una cadena para atarla a su collar. Va a pensarlo dos veces antes de desobedecer. Al rato escucho el timbre sonar, debe de ser ella. Abro la puerta y con la mirada hacia baja dice
— Pido nuevamente disculpas por la tardanza. No volverá a pasar
Me hago a un lado
— Entra…
Entra a la casa y da unos cuantos pasos hacia la sala de estar. Busco con la mirada rápidamente su cuello, lleva puesto su collar en piel con aros de acero. Ese que aceptó llevar hasta que me parezca lo contrario.
—Camina a tu cuarto, te quiero desnuda frente al espejo en cinco minutos
Dice que si con la cabeza y hace lo que le digo. Antes de ir a reprenderla por desobedecerme busco el cinturón de piel y la cadena. Entro a su cuarto y está desnuda frente al espejo tal y como le he ordenado. Al verme entrar baja la mirada y sin decir nada me acerco a ella. Le coloco la cadena de acero en el collar y tiro de ella llevándola a la cama.
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Rétame
RomantizmSergey Kozlov es un abogado que además de ser uno reconocido, es un hombre tan guapo y atractivo como enigmático. Parece ser el hombre que toda mujer de sea, pues además de guapo y atractivo es el heredero de una importante empresa vitivinícola de R...