Capitulo 3

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Y aquí estoy apunto de abordar un avión rumbo a Londres, vaya no me imaginaba así.

-"Creo que es un adiós".-dijo con cabizbajo. Sonreí y levante con delicadeza su rostro.

"No es un adiós, sino un hasta pronto Alan, no te quiero ver triste".-el hizo una mueca.

-"Te llamare, y cuando pueda iré a verte Lolo".-sonreímos.

*Pasajeros con destino a Londres, favor de abordar* mire a Alan quien tenia una capa brillosa en sus ojos, lo abrase y olí ese perfume que me vuelve loca, saber que no lo veré dentro de un buen tiempo me duele, suspire y el me limpio mis lagrimas.

-"No llores, sabes que nos veremos".

"ok".-ese mensaje irritante se volvió a escuchar.-"Hasta luego".-lo bese, y saber que ya no sentiré su tacto en mi,

Me aleje, mientras lo observaba por ultima vez. Subí a mi vuelo, una nueva vida me espera.

*

*Al día siguiente*

Me levante por mi alarma, me quedare en un apartamento que estoy rentando, me di una ducha y vestí normal, tome mis gafas de sol, mi chaqueta, mi celular y las llaves. Al llegar a aquel hospital me entro miedo, no solo por como me traten sino como sera en trabajar con "enfermos". Me adentre al gran edificio sin antes revisarme los de seguridad.

"Buen día".-le dije a aquella recepcionista, quien tenia unos anteojos y cabello coto risado, no mayor de unos 74 años, tenia cara de pocos amigos, se podía decir que era la típica señora que se sentaba en su cómodo sofá a tejer mientras escucha las estaciones de radio daba miedo.-"Soy la nueva doctora".

-"Lauren Michell Jauregui Moregado, edad 20 años, estudio en la universidad de Miami, recomendada por el doctor collins, ¿son ciertos todos estos datos?"-dijo seria, solo asentí y tecleo algo en su monitor para después entregarme una muda de ropa, esto parece como en las películas cuando te llevan a prisión.-"Esto se pondrá todos los días cuando asista a trabajar señorita Jauregui, venga acompáñeme".-caminamos por unos pasillos, logre observar un salón donde se encontraban los "enfermos". Después de caminar me abrió una oficina muy linda.-"Esta sera su oficina señorita jauregui".

"Es muy linda, gracias".

-"Después de instalarse podría venir conmigo, le enseñare el hospital".-asentí.-"Permiso".

"Propio".-y se retiro dejándome sola. Decidí llamar a mi padre.

*Llamada*

Papa:"Hola princesa".

-"hola papa".

Papa:"¿Como te va aya".

-"Excelente, no me quejo, me acaban de dar mi oficina es realmente hermosa".

Papa:"No sabes como me alegro".

-"Me encantaría que estuvieras aquí".

Papa:"Pero te apoyo y es casi lo mismo cariño".

-"Gracias papa, bueno te dejo tengo que acomodarme te llamo luego, mandale besos y abrazos a mama y a mis hermanos".

Papa:"Lo haré pequeña, te quiero cuídate".

-"Y yo a ti, adiós".-colge, me quede observando mi celular. Era muy cercana a mi padre y no me gusta estar alejado de el ni de mi familia.

A los minutos salí  y me encontré de nuevo con la recepcionista, ni siquiera se su nombre.

"Estoy aquí".

-"Muy bien, vamos".-se levanto del asiento y empezamos  caminar.

"Disculpe si soy imprudente pero ¿como se llama?".-pregunte tímida.

-"Cameron".respondió seria.

"Un gusto".

-"Igualmente".

El transcurso fue un poco raro pero sabia que tenia que acostumbrarme, conocí a varios "enfermos", y otros doctores de mi edad y otros mas mayores. Ashley es una chica con mi misma edad, ojos marrones, cabello castaño y una tierna sonrisa que la hace ver diferente a otros trabajadores de aquí, es simpática y nos llevamos bien, solo unas días mas y presiento que estableceremos una linda amistad. Mi recorrido había terminado hace unos minutos, me quede conversando con Ashley.

"La recepcionista da miedo".-ella rió.

-"Lo se, todos aquí le tememos".

"¿Suele ser así con todos?".

-"No con todos, pero con la mayoría si".

"Vaya, y ¿cuanto tiempo llevas aquí?".-ella pensó.

-"Unos...3 meses".

"¿Te han dado casos severos?".

-"si, de echo muy pronto te asignaran uno a ti".

"¿No crees que es muy pronto?".-asintió.

-"Pero piensan que si estas aquí eres lo suficientemente buena para empezar de una vez".-suspire, esto era mas difícil de lo que pensé, pero tengo que ser fuerte.-"¿Quieres ir a almorzar?".

"Claro".

La tarde la pasamos conociéndonos mejor, resulta que ella es de Mexico pero se tuvo que mudar a Londres por el trabajo, su madre falleció y su padre ahora es un señor casado nuevamente con otra mujer que tiene 2 hijas, solo le dije un "Lo siento si te incomode", ella solo sonrió, pareciera no importarle quisiera tener ese don, de poder ser feliz a pesar de muchas cosas.

"Quisiera ser como tu".-ella frunció el ceño.

-"¿Como?".

"Poder sonreír ante muchas situaciones difíciles".-ella sonrió.

-"Lauren se nota que tu nunca haz sufrido problemas realmente severos, cuando uno sufre demasiado a veces se vuelve tan normal que pareciera que es parte de tu vida cotidiana".-solo sonrió triste como si recordara algo.-"Cuando tu pases algo similar entonces entenderás de lo que hablo".

"Tienes razón, lo siento".

-"No te preocupes".

Esta chica es muy graciosa aunque aveces tiene su lado serio, creo que después de todo debo agradecer tener una vida plena, sin preocupaciones y feliz.



Si les gusta, pueden recomendarla, la verdad cuando votan y comentan me dan mas animo de seguir. Ya viene lo bueno de esta Fanfic. Preparen sus pañuelos, en esta actualizare mas seguido, ¿Listas para llorar?



yo:p








Paradise *Lauren Jauregui y tu*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora