Capitulo 20: El Despertar De La Revolución...

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El barco avanzaba constante, pero mi tristeza no parecía descender. La tristeza seguía manifiesta a través de los copos de nieve que aparecían y desaparecían bailoteando en el ambiente. Nuria, desde el timón me miraba preocupada. A lo lejos divisamos un brillo amarillo.

Alex: ¿Nuria, ves eso?

Nuria: Espera. Apuntaré con la mira del arco a ver...

Nuria saca su arco y apunta, observando a través de la mira y contempla a un hombre con un traje militar negro como los nuestros pero con rebordes amarillos, y con galones que hacían visibles su altísimo rango. Nuria sonríe.

Nuria: Ale, ese es nuestro comandante, Marc, el Líder de nuestra revolución -dice inspirando confianza-.

Deja de "nevar" pues esto me distrae de mis dolorosos pensamientos. Me pongo en pie y ya si logro divisar un hombre joven, unos 27 o 28 años, alto, fuerte, rubio, ojos azules muy claros y mirada penetrante. Su postura es regia y se le ve apoyado sobre su gran espada, la cual es muy similar a Excalibur. Uriel y Assiel se ponen serios.

Uriel: Majestad... -dice emocionado-.

Assiel: Por fin, nuestro rey... -noto la admiración de Assiel-.

Vaya... Al final, tanta seguridad y confianza y resulta que se encontraban tan perdidos y asustados como nosotros. A su lado había una chica, coleta larguísima con la punta ondulada y alta, también unos 25 o 26 años, ojos morados, traje militar negro con rebordes verdes muy claros y un báculo.

Alex: ¿Quién es esa chica que tiene al lado? -pregunto intrigado-.

Nuria: Nu se, nunca he hablado con ella...

Assiel: Huele a Rafael, el consejero del rey y la sombra de la naturaleza y la curación. Otro sabiondo como Uriel pero sin ser tan repipi. -dice con desdén-.

Uriel: espero que recuerdes delante de quién vamos a estar y qué formas debes tener... -le avisa Uriel-.

Assiel: Tu jamas entenderás la relación que hay entre el rey y yo... Tu no eras cazador...

Nuria y yo nos miramos extrañados. El barco se va acercando a la costa y Marc nos hace un gesto de saludo, pero de pronto, tras nosotros surge una sombra enorme, con varios tentáculos, parecida a un cracken. La cara de violeta se descompone. El barco zozobra y nosotros nos giramos asustados.

Uriel: ¡¡Dios es un Arponeador!! tiene mas nivel que salamander...

Alex: ¿Que hacemos? -pregunto asustado-.

Violeta: ¡General!

Marc la mira asintiendo y desenvaina, al hacerlo se rodea de mil relámpagos y el aire empieza a vibrar. Justo cuando la bestia nos lanza su pico en forma de arpón gigante Marc salta. Lo hace a la velocidad del rayo, y lo digo literalmente. En un parpadeo corta los tentáculos de la sombra y se coloca encima. El sonido es ensordecedor, como el de un trueno. La mira y dice

Marc: Quita tus sucias manos de mis compañeros... AAAHHHHHHHHHHHHH (alza la espada y un trueno desciende a ella cegándonos a todos)

¡Espada del cielo!

(tras eso lanza un corte y la criatura se parte en dos, después de eso hay una explosión y muchas chispas).

Nuestra cara es de asombro... Ese hombre va a dirigir nuestra revolución... Mis ojos dejan asomar una lágrima sin que esta derrame. No es de tristeza, es de emoción, por primera vez en mucho tiempo me siento realmente seguro.

El barco termina de llegar a puerto, nosotros desembarcamos y Nuria se cuadra delante de Marc y Violeta. Yo que no entiendo nada pero parece importante, así que la sigo.

Guerra De Sombras: La Estrella CaidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora