Guerra De Sombras: La Estrella Caida

Capítulo 33: Motivación...

Había entrado ya la noche cuando Antonio y yo caminábamos por el bosque que hay en la montaña, tras la zona norte de la base, con la capucha puesta.

Antonio: ¿Tu estás seguro de lo que haces? -pregunta rompiendo el silencio-.

Alex: ¿Otro como Assiel? -respondo molesto-. ¿Por qué dais por sentado que no pienso lo que hago?

Assiel: porque no lo haces nunca ¿a lo mejor?

Alex: A ti nadie te ha pedido opinión -le corto-.

Antonio: sinceramente, reconozco que esto es demasiado imprudente hasta para mi...

Alex: se lo que hago, gracias. Y baja la voz, si es una trampa no quiero que nos pillen por sorpresa.

Antonio: Entonces, según el plan -susurra-, me escondo en el riachuelo antes de llegar al claro, y subo por él. Si todo va bien no intervengo y cuando acabes lo que sea que vas a hacer...

Alex: Hablar con Helena... -le corrijo-.

Antonio: pues eso, cuando habléis, bajo por el riachuelo hasta el punto donde pueda salir sin que me detecten y volvemos.

Alex: exacto. No intervengas si no te doy la señal.

Antonio: la señal será crear una rosa de hielo ¿no?

Alex: Si, ah y ni que decir tiene que lo que pase hoy no puedes hablarlo, CON NADIE. -Recalco la expresión-.

Antonio: pues no se como vamos a ocultarselo a Sariel... -ironiza-.

Alex: Antonio, enserio... -le fulmino con la mirada-.

Antonio: Solo bromeaba... Ríete un poco anda...

Alex: Estoy preocupado... Pero tienes razón, ha sido buen. -le sonrío-.

Antonio: eso ya me gusta más, porque vaya cara de culo tenías...

Justo cuando dice eso habíamos llegado al riachuelo así que con un simple empujón lo tiro al agua, este se mezcla con ella pero de la superficie del agua sale una cabeza.

Antonio: Muy gracioso... -me mira mal-.

Alex: Uy, perdón. ¿No te avisé de que habiamos llegado? -le saco la lengua-.

Antonio: -mientras se vuelve a esconder en el agua- ya ya... Procura que no te golpee mucho...

A los 3 min llego al claro. Antes de salir Assiel y yo rastreamos la zona escondidos detrás de un árbol, cuando de pronto...

Helena: Puedes salir, te dije que venia sola. -aparece en el centro del claro-.

Alex: Y ¿por qué supones que me voy a fiar de la palabra de alguien que ya ha intentado matarme? -digo mientras salgo aparentando calma-.

Helena: Porque estás aquí -sonrie-

Esta vez su sonrisa no escondía maldad, era sincera, cosa que me despistaba más.

Alex: Se esta convirtiendo en una mala costumbre esto de vernos a solas, ¿qué quieres Helena?

Helena: Que pelees conmigo...

Enseguida me pongo en guardia y saco la guadaña.

Alex: Ya decía yo...

Helena: ¡Espera! -me para- espera por favor...

Yo la miro extrañado y me relajo.

Alex: ¿se puede saber a que viene ésto?

Helena: Necesito pelear contigo limpiamente, quiero probar que mi motivación es la correcta, que los argumentos que te di en Murcia son por los que puedo pelear.