De pronto me gustaba estar con Rafael, me gustaba la forma de sus lunares en el brazo, sus anteojos, sus manos finas, su sonrisa tímida, la forma en como cubría su boca para no sonreír demasiado, de pronto lo quería...
Por las mañanas solía llevarme café y hablábamos mucho, era un tipo muy alegre, incluso cuando contaba cosas tristes.
Yo también compartí ciertas cosas de mi vida, no estaba lista para decirle sobre la violación, ni a él ni a nadie, ese secreto morirá con Laura o al menos no hay persona en quien confíe más en este mundo.
-Preparé huevos y sanduches-dijo acariciándome el rostro-
-Gracias-
Me besó cariñosamente, no me lo esperaba, se sintió extraño, algo comprometedor.
-Vengo en un momento-dijo sonriendo-
Después de comer salimos a caminar un poco por el parque. La brisa estaba especialmente romántica y nos despeinaba, un par de veces tuve que reírme porque las gafas de Rafael se caían.
-Me gusta estar contigo-Dijo-Así...
-A mí también me gusta-le dije-
-No entiendes-dijo-no es tan simple, ¿sabes? No solo quiero acostarme contigo-
-No comprendo Rafael-
-¿Has pensado en el futuro?-
-Si-dije-lo hago siempre-
-Carol-dijo-un futuro... de los dos-
-¿De los dos?-
-Si-dijo-Yo quiero, lo deseo, mira yo tengo un buen trabajo, no quiero llegar a mi casa y acostumbrarme solo al perfume que has dejado-suspiró-de pronto es como si ya no soportara la soledad, no quiero ver mi cama vacía-intente decir algo y no me lo permitió-quiero decir, sé que es extraño Carol pero creo, estoy seguro que si me das la oportunidad de dar un paso más en esto que tenemos yo te podría hacer muy feliz-
-Un paso más-repetí-¿qué significa?-
-Ven a vivir conmigo-
De pronto hizo frío, mucho frío, por un momento creí que el frío se trataba de mis sentimientos y de mi mirada a Rafael, helada, sin significado, sin sentimientos.
-Solo llevamos saliendo dos meses-dije-
-Dos meses y diez días-dijo-
-¡Es absurdo que estés contando los días!-se puso rojo-No estoy lista para algo así-dije-pero si quieres seguir conmigo, sin dar ningún "paso adelante" estaría muy bien, a mí me gusta estar contigo-
-No debí decir todo eso, creerás que soy un idiota-
-No, no, es muy lindo Rafael, no te diré que no lo pensare, pero es muy pronto, hasta tú lo sabes, apenas y tenemos meses, no somos adolescentes-
Y de pronto a la Dama de Hielo ya no le gustaba tanto Rafael, le asustaba como la trataba, como la veía, como era, le gustaba pero la aterraba, no quería dormir en su cama y llenarse de silencio, si quería los café por la mañana, pero no quería café todos los días, otros días le apetecía despertar sola, me gustaban sus cálidas manos recorriendo mi rostro mientras me escuchaba hablar, pero la verdad es que no siempre me gustaba hablar, a veces no me apetecía ni comer, es mejor dejar el perfume en la casa de quien te ama.
Me fui, le di un beso en la mejilla y lo dejé con el viento despeinándolo, le dije que tenía que ir a hacer una reseña del Guardián Entre el Centeno para la universidad, creo que ambos nos dimos cuenta de que no era cierto.
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Los 7 cielos
RomancePrologo Conocer a Francisco (escritor de merecido reconocimiento internacional) no fue lo que se dice, una historia de amor, en realidad la historia empieza con un libro que tenía en mis manos esperando para que fuera firmado, (como todos en la fi...