Caroline Potter

Capítulo 2. Conociendo la Verdad.

Capítulo 2. Conociendo la Verdad.

1 de Noviembre de 1981

POV Caroline

Me desperté al día siguiente con un fuerte dolor de cabeza y con las mejillas aún mojadas de tanto llorar, todo era confuso ¿Dónde estoy? ¿Qué hago aquí? ¿Quién me trajo?, en silencio, me obligué a recordar todo lo ocurrido la noche anterior y no pude controlarme, hundí mi cabeza en la almohada y comencé a llorar a todo pulmón, y entonces el silencio que hasta ahora reinaba en la habitación, fue apagado por mi llanto, un llanto que no podía controlar, y aún sin poder hacerlo escuché unos pasos firmes y decididos que se me acercaban.

De repente la puerta de la habitación se abrió y por ella entró un hombre vestido de negro, lo que contrastaba a la perfección con su pálido rostro, su ropa era negra, su largo y grasiento pelo era negro, y sus ojos. Tenía unos ojos que por algún motivo no podía dejar de mirar, era como si me hipnotizara, como si me embrujara de alguna manera, sentía una muy extraña conexión al hacerlo.

POV Snape

Estaba abajo pensando en cómo decírselo hasta que el silencio que normalmente reinaba en mi casa fue interrumpido por un ya conocido llanto.

Subí las escaleras y rápidamente me dirigí a la cuarta puerta, la abrí lentamente y vi como lentamente se acomodaba para verme, por unos instantes me siguió mirando y la pude ver a la perfección...

-Es tan igual a Lily,-pensé-Una copia exacta de lo que ella debía ser a esa edad-

Me acerqué en silencio por un impulso que no pude controlar y me senté en su cama, no muy cerca de ella y vi como poco a poco volvía a hundir su cabeza en su mojada almohada.

-¿Y ahora qué hago?- no tenía experiencia en esto pero sabía que no podía quedarme allí viéndola llorar por más tiempo así que hice lo único que se me ocurrió, algo que ya había funcionado en otra ocasión, pero esta vez era más difícil.

Me acerqué un poco más, miré su pelirrojo pelo igual al de su madre y con cuidado y delicadeza la senté en la cama, ella se sorprendió y quiso volver a acostarse, pero no la dejé, y sin soltarla la abracé, al principio estaba rígida e intentaba escaparse de mi abrazo, pero de nuevo no se lo permití, y poco a poco fue cediendo y comenzó a llorar en mi hombro.

-Pasó por tantas cosas malas en tan poco tiempo...-pensé-Lo menos que puedo hacer es darle a entender que en realidad no está sola, que puede confiar en alguien y que conmigo no le pasará nada-ahora ella ya no estaba en la cama, en un momento de valentía se subió a mis piernas y siguió llorando en mi hombro

_Díselo ahora.

_Ahora está muy mal.

_Exacto, debes decírselo ahora para que todo le duela una vez sola aunque sea un poco más intenso, todo será más fácil.

_Pero, ¿Cómo lo hago?

_Solo hazlo, ¡Ahora! Sino la veras sufrir dos veces o pensarás que no quieres hacerla sufrir cuando recién se está recuperando.

_Tienes razón, no podría soportar lastimarla, pero si lo hago ahora en realidad no le dolerá tanto, ¿No?

_Exacto, ¡Hazlo Ahora!

-Car...-comencé a decir muy lenta y suavemente, ella se asustó y se apartó de mi interrumpiéndome por el brusco movimiento

-¿Qué?-preguntó ella cuando se apartó de mí.