Caroline Potter

Capítulo 11. La echaba de menos.

Capitulo11. La echaba de menos

11 de Septiembre de 1986

POV Snape

―Esto ya se nos ha ido de las manos.―pensé― Ella debe venir a Hogwarts, o a Dumstrang, en fin, la cosa es que ya es hora de que se deje de creer Squib. Por Merlin, ¿Qué voy a hacer? Iré a buscarla. Sí, iré a casa y la traeré, luego la dejaré elegir si quiere venir a Hogwarts o a otra escuela, pero no permitiré que siga creyendo que es una Squib por la culpa de ese maldito elfo, lo liberaré, sí, lo haré, o mejor aún, ella lo hará, pero primero acudirá a una escuela, sí―caminé en dirección a la chimenea y entré, tome polvos flu y...

Toc―Toc

―¿Quien?

―Dumbledore, ¿Puedo pasar?

¿Cómo hace ese viejo para poder entrometerse siempre?― Pase―respondí secamente y abrí la puerta, encontrándome con nada más ni nada menos que Caroline en el marco, detrás de Dumbledore viendo al piso. Dumbledore pasó y ella tímidamente levantó la cabeza,tenía ojeras y había estado llorando además se notaba que no quería estar ahí. ―Hola―dije simplemente.

―Severus, quiero pedirte un favor―comenzó Dumbledore y sin mirarlo asentí― Caroline a accedido a ingresar a Hogwarts―la miré y a ella se le escapaba una solitaria lágrima por la mejilla, el viejo continuó― y mañana en la cena se llevará a cabo su selección así que esta noche deberá dormir aquí, no tienes opción, además, creo que será una buena ocasión para que ustedes dos se pongan al tanto, ¿No creen eso?, ―al ver que no respondimos camino a la puerta y antes de salir dijo para ninguno en particular― Duerman.―y con eso se retiró.

Ella aún no había entrado y yo quería cerrar la puerta así que hable,sabía que probablemente estaría enojada con migo ya que la dejé ala deriva en el mundo muggle, o eso creía ella, cada noche iba y verificaba que todo estuviera bien, además que enviaba a mi lechuza con algunos galeones y la orden de que los dejara dentro de un zapato, bajo el sofá esperando así que ella lo encontrara y cambiara por dinero muggle que pudiera utilizar, y algunas otras cosas para que su vida fuera más sencilla. Además cuando le saqué a los elfos era para que se diera cuenta de que debía venir.

―Caroline, yo ― no me dejo terminar e hizo algo que no creí que hiciera pero muy dentro de mí ansiaba. Me abrazó y lloró un mi pecho.

―Lo siento...―dijo cabizbaja separándose de mí. Cerré la puerta y con una manola guié hasta el sofá, ella se sentó y yo hice lo mismo, fue cuestión de unos segundos de silencio para notar que ella había empezado nuevamente a llorar, en silencio, quieta, sola... Un sentimiento de culpa me invadió, así habrá estado todos estos días en los que me vine aquí, yo no estuve mejor pero con unos cuantos tragos de Whisky de fuego todo pasa. Ella no podía hacer eso. Ella solo lloraba como hace 5 año cuando llegó a mi vida, en su cuarto,sola y sin compañía hasta que yo me acercaba y la hacía salir, a hacer una poción, leer, comer o ir a la escuela cualquier cosa que la mantuviera ocupada pensando en otra cosa, pero ahora eso no puedo haber pasado, yo no estaba allí para hacerla olvidar esta vez, en realidad estaba sola, la observe bien esta vez, estaba más flaca y sus ojeras eran muy pronunciadas bajo sus hinchados y verdes ojos y sus mejillas estaban mojadas y rojas, vestía un buzo holgado y negro, acompañado con una calza también negra y panchas negras, su cabello ya no tenía ese brillo característico de ella y estaba amarrado con un moño, también negro, se veía deprimida, y yo solo podía pensar ¿Cómo llegó hasta aquí?

No aguantaba más verla en ese estado, me levante, me volví a sentar a su lado y la rodeé con mis brazos, ella escondió su cabeza en mi pecho y lloró allí, abrazándome también, creí que no querría verme, que me gritaría, que se opondría a mí, cualquier cosa,cualquiera menos que me abrazara y llorara conmigo.

―Pequeña,

Por lo visto se sorprendió, porque me soltó y bajo la cabeza, mirándome de reojo y limpiando sus lágrimas― creo,qué te debo una explicación―tartamudeó levantando la cabeza lentamente para mirarme, asíque por eso tanta timidez, cree que la interrogaré, pobre, nunca cambia, como piensa que la interrogaré en éste estado, primero dejaré que duerma, como algo, se bañe, no sé, que esté en mejores condiciones, no me permitiré torturarla de esa forma―pensé.Ella siguió― Yo, em, estaba en,―bajo la cabeza y yo la abracé, se sorprendió y sin soltarse me miró

―Shh, no digas nada, pequeña, no por ahora, tranquila, ven,― la ayudé a pararse y fuimos a la mesa tipo comedor que tengo con la cocina de mi cuarto, la ayude a sentarse, aunque sabía que no necesitaba ayuda para eso, y me encaminé hacia la heladera y saque de adentro un poco de pastel y una jarra de jugo de calabaza y los coloqué sobre la mesa, luego traje un plato y un vaso a la mesa y me propuse a cortarle una rebanada de pastel y servirle un vaso de jugo,no tengo idea de cuando fue la última vez que le serví algo para comer. Ella sonrió y se noto que hace mucho no lo hacía, la extrañaba, la extrañaba tanto. Tragándome el orgullo pero saciando mis ganas la abracé, ella, aun sentada en la silla, me correspondió al abrazo y me abrazó más fuerte. Entonces me di cuenta, me di cuenta de lo mucho que la echaba de menos.

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Hola! He Vuelto!

Sé que el capítulo es corto... Pero ya en el siguiente irán a comprar los útiles y en el siguiente tengo planeado hacer la ceremonia de selección.

¿Quieren hacer sus apuestas?

Cuál será su casa, Sombrero? ¡Ay dímelo Sombrero Seleccionador!

Slytherin o Hufflepuff, tal vez sea Ravenclaw o puede ser que Griffindor.

Nos leemos luego,

Los adora,

MKR