Shadows Of The Night (Adaptación)

Capítulo 22

[ESTE FANFIC, ES UNA ADAPTACIÓN. EL ESCRITO NO ME PERTENECE, TODOS LOS DERECHOS A LA AUTORA ORIGINAL, HaBiin].

Di un paso atrás, no lo hice a propósito, simplemente mi instinto de supervivencia salió a flote.

- ¿Y esa, soy yo? -pregunté sabiendo la respuesta-.

- Lo eres. Eres mi Mitad. -Caminó hasta estar frente a mí- No sólo como el objetivo que perseguía, eres a quien amo. Cada día, me arrepiento de lo que hice, porque sé que nunca seré alguien que tú merezcas.

"Eres a quien amo".

Sentí como una chispa de felicidad recorriera mi cuerpo. Era ese tipo de sensación, de la cual sientes como si tu cuerpo volará. Como si fuera irreal.

- Lo sé, debes estar aterrada. Es por eso... que quise alejarte de mí. Temía que este momento llegara. Lena, eres libre. Puedes irte, no te detendré.

La expresión en su cara era sombría. Sentí un escalofrío recorrer mi espina dorsal. Nunca, había visto a Tae Hyung parecer vulnerable frente a nadie. Pero ahora, estaba frente a mí, mostrándose.

- Ya te lo dije, no me iré. No me importa quien fuiste antes. Lo que importa, es el Tae Hyung del presente, aquel que siente remordimiento, que acepta que se equivocó. El que puede sentir. El que me ama -tomé su mano, él me miraba confundido-. Eso demuestra que tienes compasión por los humanos. No los odiabas, sólo querías ser alguien más, no un ser despiadado, como crees que eres. Tal vez estuvo mal, pero no soy quien para juzgarte. Porque no soy perfecta. El equivocarse, es aprender de los errores.

- Lena -dijo aún confundido-. A pesar de lo que soy... ¿aún puedes quererme? -miró la herida en mi mejilla, tomó mis manos y las observó con pesar, las heridas en mis muñecas, donde había enterrado sus uñas la noche anterior -. Te hice daño... yo…

Me apresuré a hablar. No dejaría que él se sintiera culpable por esto. Sabía, que nunca fue su intención.

- Te amo. Y eso nunca cambiará.

Tae Hyung me observó por un momento, era probable que no lo entendiera, pero yo lo amaba. No me importaba si perdía o ganaba. Supongo que esto era amar. Es así como las personas eran cuando amaban, confiaban en el otro sin temer. Y yo, confiaba en Tae Hyung.

Sus brazos me rodearon. Lo hizo con fuerza, como si quisiera asegurarse que esto no era un sueño. Llevé mis manos detrás de su espalda y me aferré a él, porque, por un momento, temí que él me pidiera que me alejara. Pero ahora estábamos aquí, sintiendo el calor del otro. Estábamos juntos.
Su mano tomó mi barbilla para que lo mirara, sentí sus labios presionar los míos suavemente. Casi como una caricia. Pero no fue suficiente, ambos buscábamos más, y fue entonces cuando me besó en serio. Mis manos jugueteaban con su cabello, nuestros cuerpos se presionaban con el anhelo del uno del otro.

- Te amo -dijo él sobre mis labios-.

Me tambaleé un poco, pero Tae Hyung me tomó de la cintura. Seguíamos besando con desespero, él besó mi cuello y volvió a mis labios dando un pequeño mordisco.

- ¡Tae Hyung! -dijo una voz masculina, exaltada, entrando por la puerta-.

Ambos nos separamos de inmediato. Si antes mi corazón estaba acelerado, ahora parecía querer salir de mi pecho, por si solo.
Sentía mis mejillas arder.

- Lo siento, de verdad lo siento. Es sólo que no pensé que.. ya sabes, no creí que tuvieras energías para nada.

- Ve al punto, Ash -ordenó Tae Hyung-.

- Es una emergencia. Sobre el lado sur, a las orillas del lago, encontré el cuerpo de un hombre. ¡Está muerto!

- ¡Maldición! ¿Estás seguro?