Shadows Of The Night (Adaptación)

Capítulo 14

[ESTE FANFIC, ES UNA ADAPTACIÓN. EL ESCRITO NO ME PERTENECE, TODOS LOS DERECHOS A LA AUTORA ORIGINAL, HaBiin]

- ¡Está bien, vuelve sola no me importa si mueres o un maldito Exul te desmiembra!

- ¡Entonces suéltame -me liberé de su agarre- tu tacto me da asco... tampoco quiero saber más de ti, odio tu maldita actitud y también empezó a odiarte a ti!

Sus ojos fríos me miraron fijamente por unos segundos, un pesado suspiro salió de él y se dio la vuelta a su coche mientras la rubia me fulminaba con la mirada, sentí mis ojos arder, quería llorar, gritar pero no podía hacerlo. Tae Hyung encendió el coche y se fue a toda velocidad.

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- Tae Hyung ¿qué fue todo eso? -preguntó la rubia-.

- ¡Nada! -contestó cortante-.

- ¿Quién era ella? ¿Por qué permitiste que te hablara así?

- Es alguien que conozco, solo eso.. ¡olvídalo!

- ¿Me engañaste con ella?

- No, no juegues con eso~

- ¡Tengo la ligera impresión de que hay algo mas en todo esto, no me cae bien... la mataré si descubro que estás con ella!

- ¡Guarda silencio, tu voz chillona es desagradable!

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Tae Hyung estaba con esa rubia en su coche paseándose por el pueblo como si nada, estaba dolida con él, con la maldita actitud que había mantenido conmigo. Pedaleé hasta mi casa y me detuve frente a ella, antes de entrar miré colina arriba ¿qué estaría haciendo con ella? Odiaba que ya no lo vería y odiaba el hecho de que me había lastimado portándose como un idiota, entré a casa furiosa, jamás me había sentido así por nadie. Dejé las cosas en la cocina para después acomodarlas ya que no me encontraba de ánimo para hacerlo en este momento, me sentaría mejor un baño.

Subí a mi habitación seguida de Luca y fui directo a la ducha, estuve ahí por un largo rato sin lograr dispersar mi mente de él y esa chica, salí y me acosté en mi cama viendo el techo... ¿A qué jugaba? ¿Qué pretendía?... Las últimas palabras que le dije parecieron molestarle, pude notarlo, su expresión fue tan evidente. Él quería traerme a casa pero yo le rechacé y le grité desperdiciando esa oportunidad de hablar con él y que todo volviera a ser como antes ¿por qué fui tan tonta? Pero en parte eso era imposible, él se cansó de decirme que no me quería cerca y más con esa chica en el coche, hubiera sido imposible que habláramos claramente y en dado caso ¿quién dice que él querría hablar conmigo sobre un nosotros? Tenía miles de preguntas sin respuesta... me terminé quedando dormida.

Abrí lentamente mis ojos, me sorprendí ya era tarde y el sol casi se ocultaba, terminé durmiendo más de lo que hubiera imaginado, me levanté cuando me percaté de la silueta que estaba en mi balcón detrás de las cortinas, me acerqué y ahí estaba Leo, mirándome con una sonrisa torcida en su rostro. Luca llegó en seguida detrás de mí con una actitud amenazante, tenía los pelos de punta y mostrando sus dientes mientras tenía su cuerpo erguido.

- Vaya, te conseguiste uno de esos. Creo que moriré de miedo -rió-.

- ¿Qué haces aquí? ¡No puedes entrar a mi casa como si nada!

- Has dormido por un largo rato, querida Lena -se acercó- no quería interrumpir tus dulces sueños

- ¡No me vengas con eso, no caeré más en tus juegos así que sólo vete!